El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, en la entrevista que realizaron los reporteros de la sección Capital en las instalaciones de este diarioFoto Víctor camacho
A. Bolaños, A. Cruz, L. Gómez, R. González, R. Llanos, B. T. Ramírez, G. Romero, T. Sánchez y M. Servín
Periódico La Jornada
Martes 17 de septiembre de 2013, p. 34
Más que amenaza, Miguel Ángel Mancera Espinosa deja caer respecto del conflicto magisterial la sentencia que, advierte, es producto de un acuerdo con los liderazgos de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE): los maestros no volverán al Zócalo; el gobierno capitalino no lo permitirá
.
En entrevista realizada en las instalaciones de este diario, el titular del Ejecutivo local explica que no es casual que a la llegada de la Policía Federal a la Plaza de la Constitución ya no hubiera resistencia de los maestros.
No hubo desalojo, sino una salida negociada; sólo quedaba un grupo pequeño que buscaba el enfrentamiento, que no era precisamente de profesores. De otra manera, dice, no se explica por qué entre los detenidos no hubo integrantes de la CNTE.
–¿El gobierno se ha visto sometido a presiones graves por esta crisis?
–Es una crisis más fuerte y se da con un conflicto nacional, en el que hubo un aprovechamiento, diría yo, de confusión, para decir hay debilidad e inacción del gobierno de la ciudad
. Cuando la verdad es que lo que ha hecho el gobierno de la ciudad, reconocido por las autoridades federales, es contribuir a la solución del conflicto.
“En el caso de la recuperación del Zócalo hay una comisión del gobierno que va a hablar con los maestros, y por medio de ese diálogo se evita –no sé si decir– un brote de violencia o lo que hubiera sido, pero por lo menos sí un choque mayor.”
–¿Y eran maestros?
–Y otros grupos que no eran de maestros, que iban con una sola lógica de enfrentarse. Entonces, yo ¿qué destacaría? Que la salida de los maestros se dio por el diálogo, por eso salen los líderes, por eso salen sus diferentes bases. Y el costo político de todo esto, pues lo asumimos.
–¿Hasta qué punto los hilos del gobierno federal se movieron para generar en algunos sectores que hay responsabilidad del gobierno de la ciudad?
–Creo que aquí el punto más difícil de este conflicto fue posicionar que se trataba de un conflicto nacional, porque la gente en la calle no entendía si nosotros habíamos generado el conflicto, si lo estábamos consintiendo o incluso si lo estábamos abonando.
–¿Pero esto no lo escuchaban los medios?
–No, no, no porque se ocupaban las notas para el reproche hacia la ciudad, hacia el gobierno, cuando la realidad era que nosotros estábamos buscando que se solucionara (el conflicto).
–¿Diría que hubo un intento de desestabilizar, a partir de la cuestión mediática, la ciudad?
–Yo creo que sí hay actores políticos que aprovechan cualquier cosa. No digamos este conflicto nacional. Aprovechan que haya falta de agua, un apagón, lo que sea para manejar su agenda. Una agenda que es una descalificación al gobierno.
–¿Qué va a pasar ahora que los maestros anuncian que regresarán al Zócalo?
–El acuerdo hasta este día (de la recuperación del Zócalo) es que la ciudad de México señala un lugar donde puedan estar los maestros. Ya se determinó que sea el Monumento a la Revolución. Nosotros estaremos acompañando la solución del conflicto, pero yo no vería en la ruta de los acuerdos que se tomaron, que ellos regresen al Zócalo. El acuerdo hay que respetarlo.
–¿No se les va a permitir?
–No estoy de acuerdo con eso.
–¿No se va a permitir?
–No.
–¿Qué les dice a las voces que desde la izquierda han dicho que usted entregó la plaza para que entrara la Policía Federal?
–La plaza no es mi plaza, es de México. Es un lugar donde precisamente se da el asiento de los poderes de la Federación. Entonces, no me imagino un escenario donde hubiéramos nosotros estado llamando a una confrontación con la Federación. Simple y sencillamente hay que fijar una postura política; la nuestra en todo momento ha sido que se resuelva con el diálogo.
Caso Heaven
–¿El caso Heaven?
–Mas allá de que pudiera estar vulnerada la seguridad de la ciudad, fue una crisis que tuvimos de percepción, por la implicación de que si la delincuencia organizada podría estar entrando a la ciudad, y si esto se iba a generaliza, íbamos a tener levantones constantes,ejecuciones permanentes. Entonces, eso generó una crisis verdaderamente complicada de atajar.
“Lejos de lo que dicen algunas voces, de que lo resolvió la Procuraduría General de la República, yo diría que la Procuraduría (General de Justicia del Distrito Federal) señaló quiénes eran los responsables, cómo había sido la operación, cuáles eran los motivos. Hubo un acompañamiento con los familiares para no estigmatizar a las víctimas.
“Lo que sigue es que debemos tener más detenidos. No se ha terminado el asunto, no se ha cerrado el caso. Me resulta muy interesante comentar que llevamos más de 100 lugares cerrados, cien lugares entre afters, table (dance) y lugares que operaban sin ningún tipo de licencia.
–¿Dice que es un hecho focalizado y de percepción?
–Y lo seguiré diciendo, porque en la ciudad de México son 14 millones de personas, porque se sigue manteniendo el control en los delitos de alto impacto. Si me dijeran ha habido siete eventos en diferentes zonas y tenemos la presencia de tal grupo delictivo y tal otro, como sucede en otros estados, a lo mejor sí diría que se desborda el tema de la seguridad. Pero en este caso concreto ¿qué sucede? Hay un tema denarcomenudeo.
–¿El procurador está firme en su puesto?
–En este momento no estoy pensando en ningún cambio (en el gabinete) más que el que tiene que ver con la Secretaría de Trabajo y la Secretaría de Obras.
Defender la ciudad
–¿Cuál es el punto fundamental de su informe?
–Reiterar que estoy en el fortalecimiento de la capital social; en eso voy a poner mucho énfasis, dando a conocer lo que se ha hecho en infraestructura y lo que se ha hecho en todos y cada uno de los rubros hasta pasar por el medio ambiente.
–¿Qué hay que entender por ese llamado que hace a defender la ciudad?
–Yo lo que vería es que tienen que defender al gobierno de la ciudad. Hay que defender lo que se hace en la ciudad. El capital de la izquierda está en la ciudad y si la izquierda participa o contribuye a los ataques a la ciudad, el único efecto que va a crear es que haya una disminución de la credibilidad de las personas.
–¿Cuáles son esos grupos de la izquierda que están afectando?
–Pues son voces que no ayudan. Yo entiendo que haya oposición, y el papel de la oposición siempre va a ser criticar la acción del gobierno. Lo que no entiendo es que tengas una oposición en el propio gobierno para el que trabajas. El trabajo que estamos haciendo nosotros es para consolidar muchas de las líneas de acción de la izquierda.