"Intelectual" de Nueva Izquierda... vulgar traidor El recuerdo ominoso que los oaxaqueños tenemos de los chuchos, el grupo de seudo perredistas que se aglutinó a la izquierda proveniente del Partido Comunista y del PSUM, para conformar el PRD, es aquel en donde Fernando Belaunzarán, el delegado de los perredistas para el proceso interno, y la posterior elección estatal, recibió un regalo inusual en tiempos de crisis: una camioneta Liberty color verde que le fue entregada por el gobierno de Ulises Ruiz, a cambio de las canalladas políticas que concretó durante su estancia en nuestro estado. Belaunzarán, digámoslo francamente se vendió como Judas, y con su actuar polarizó las fuerzas que confluyen dentro del vapuleado perredismo oaxaqueño, las que finalmente optaron, en gran parte por detraerse a la acción política-electoral, hastiados de las formas y modos con los que se conduce su partido. Ya se ha hecho un recuento de las trapacerías de Fernando Belaunzarán,y de las nego