Francisco Rodríguez. Índice Político. 7 de Marzo del 2014
En la Secretaría de Educación Pública que encabeza el bien llamado “Príncipe de la Soberbia” Emilio Chuayffet no atinan a enterrar ni a revivir la Evaluación Nacional de Logro Académico en Centros Educativos. Deciden retirarla del aparador. Los presionan. Vuelven a ponerla en vigor. ¿A ver si entre tantas indecisiones sobrevive al 2018?
Tras todas estas vacilaciones, sin duda, está uno de los hombres más poderosos de México: Miguel Limón Rojas, que ahora cobra a los contribuyentes por fungir como jefe de asesores de Chuayffet.
¿Y dígame usted si no es verdaderamente poderoso? Después de haber ocupado la titularidad de la SEP en el sexenio de Ernesto Zedillo, Limón tiene 13 años como exitoso empresario al frente de la firma consultora Valora, haciendo todo tipo de trabajo con los panistas, desde la oscuridad más que bien remunerada de las “asesorías”.
“Valora –dice la página web de la empresa– es una firma especializada en los campos de la educación, la cultura y la capacitación para el trabajo. Fundada en febrero de 2001 –apenas dos meses después de que Limón concluyera su desempeño como secretario de Educación– , Valora reúne la experiencia y los conocimientos de consultores, asociados, investigadores y expertos para brindar una asesoría de calidad que responda, desde la perspectiva global (but of course), a las necesidades de sus clientes. Nuestra labor se aboca a mejorar, impulsar y potenciar la capacidad, la preparación y el desarrollo de las personas y sus organizaciones.” ¡Uf!
La realidad, empero, es otra. Se sabe que desde ahí se “descubrieron” y sacaron a la luz varios de los trapitos priistas mejor resguardados del ámbito político y educativo.
¿El premio? No uno, varios de ellos. A saber, una hija tránsfuga del panismo, ex esposa de Ugalde el del IFE, hoy subsecretaria incómoda de Gobernación; tres empleados del despacho VALORA, Alba Martínez, subsecretaria de la SEP, el gris zacatecano panista Hugo Talancón, manejando la dirección general de Enseñanza y Métodos Modernos de aprendizaje –lo que quiera que eso sea y el dinero que se gaste–, Guillermo Kelly, ungido otra vez –como con Zedillo y Limón al frente de uno de los presupuestos más atractivos del mundo, en la Dirección General de Comunicación Educativa (what?). Sí, el famoso y derrochador ILCE, productor de toda la chatarra que ninguna televisora quiere exhibir, salvo el Canal 11que lo hace obligado.
Y, por si faltara poco, Carlos Mancera, el de la familia financiera que estuvo a un pelito de quitarle su puesto al actual Secretario de Educación, se mantiene como socio director de la empresa de Limón Rojas, mientras éste “asesora” a Chuayffet.
Como “enlace” con el PAN, Limón Rojas tiene un gran negocio “educativo”, ¿no cree usted?
Y mientras, Enlace va. Ya no va. Otra vez va…