Según El Universal, Azuela recibió las amenazas en su domicilio en el DF y la misma activista atribuyó los mensajes a sus textos sobre violaciones de de derechos humanos por parte del Ejército y del gobierno de Puebla.
Las amenazas ocurren unos días después de que otras dos periodistas, Anabel Hernández y Gloria Muñoz, denunciaron sendos ataques en su contra.
En entrevista, la analista dijo que el miércoles 25 de noviembre a las 17 horas llegó a su casa y encontró un sobre amarillo sin remitente que decía en la parte de afuera “Señora Maite Azuela“, con un timbre fechado el 09 de noviembre y un sello de la oficina postal de la calle Obrero Mundial , en el Distrito Federal, con fecha 11 de noviembre.
Al abrirlo, Azuela se encontró con una foto suya ampliada sacada de su perfil del periódico.La imagen se encontraba rayada con las frases y amenazas de muerte. Además de las frases e insultos, la fotografía tenía dibujada sobre su cara una calavera con lágrimas.
La organización defensora de periodistas, Artículo 19 emitió la siguiente alerta:
Articulista de El Universal recibe amenaza de muerte en el Distrito Federal
México, D.F. a 30 de noviembre de 2015.- El 25 de noviembre Maite Azuela, articulista de El Universal, recibió una amenaza de muerte vía correo en su domicilio en el Distrito Federal.
Ese día llegó a su domicilio alrededor de las 17 horas y encontró un sobre amarillo sin remitente dirigido a ella, con un timbre fechado al 9 de noviembre y un sello de la oficina postal de la calle Obrero Mundial con fecha del 11 de noviembre. Adentro se encontraba la foto de su perfil en El Universal con amenazas de muerte e insultos escritos.
Maite Azuela acompaña su labor periodística con la del activismo, el cual está directamente vinculado a los temas sobre los que escribe. Sus artículos se centran en derechos políticos y violaciones a derechos humanos, recientemente con hechos relacionados al Ejército, encabezado por el general Salvador Cienfuegos, y el gobierno de Puebla, dirigido por Rafael Moreno Valle.
La amenaza a Azuela se suma a otros incidentes en los últimos dos años, como en mayo de 2014 cuando elementos de la Policía Federal intentaron ingresar con armas de alto calibre al departamento de la periodista “debido a una llamada sospechosa”, sin contar con una orden de cateo o sin dejar un número de reporte.
Azuela entró en contacto con la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos cometidos en contra de la Libertad de Expresión (FEADLE) y con el Mecanismo Federal para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas (Mecanismo), a pesar de su desconfianza en las instituciones.
“Hice denuncias correspondieres en cada una de las instancias de gobierno a pesar de la profunda desconfianza que les tengo. Quiero que se documente lo que sucedió. Con los trámites que realicé entiendo lo que atraviesan periodistas y defensores cuando exponen su vulnerabilidad ante quienes probablemente operen a favor de los que realizan las amenazas, más que a favor de quienes somos víctimas de ellas. Si pedimos un mecanismo de protección y una Fiscalía lo menos que puedo hacer es recurrir a ellas pese a la debilidad institucional que aún tienen”, comentó la periodista en entrevista con ARTICLE 19.
ARTICLE 19 reitera que las autoridades deben actuar confirme a los estándares más altos en la materia, como los reseñados en la Declaración conjunta sobre delitos contra la libertad de expresión , donde se establece que los Estados deben adoptar medidas especiales de protección; asegurar investigaciones independientes, rápidas y efectivas; y asegurar reparaciones adecuadas.
Asimismo, exige a las autoridades una pronta investigación de los hechos ocurridos, tomando como prioritaria la línea de investigación relacionada con la labor periodística de Maite Azuela. También insta al Mecanismo de protección a realizar las acciones suficientes para salvaguardar la integridad física de la periodista y de sus familiares.