Desde hace unos días parece haberse desatado una guerra contra Morena y su líder nacional, una verdadera andanada de descalificaciones y una sarta de mentiras, el límite de ella fue el supuesto apoyo de López Obrador a Javier Duarte quizá como un mecanismo de descalificación del candidato de ese partido político a la gubernatura de Veracruz.
Decía
doña boni que “
cuando los perros ladran, se les acabó la comida” y parece que ya a los ladrantes en referencia, se les acabó la comida, pues la letanía provino de medios, de “
líderes de opinión” y hasta de “
intelectuales”, simplemente ayer en nueve diarios nacionales un grupito de esos opinadores profesionales se puso a ladrar de una manera espeluznante, hasta se me erizó la piel, pero
como dije antes, el problema que tienen es que ahora las encuestas muestran un partido político que diferenciado ha mostrado la verdadera oposición.
Hace unos días fue publicada en El Financiero una encuesta que muestra a Morena encabezando la preferencia electoral en el DF por más de 2 a uno respecto de la segunda fuerza electoral (PRD); en Veracruz parece ser que en las últimas semanas
Cuitlahuac Jiménez, rebasó (por la izquierda) a
los primos Yunes y que aquella
sorpresa de que hablé en el principio de la campaña puede hacerse realidad.
Zacatecas indudablemente será de Morena y me dicen que en Chihuahua, Tlaxcala y Quintana Roo pueden llegar a unos 15 puntos porcentuales; en Oaxaca el candidato ha levantado interés entre amplias capas de la población y quizá logre un porcentaje interesante.
Aunque en las otras entidades federativas parece mucho menor la presencia de Morena, hay algunas posibilidades de que en Tamaulipas pueda alcanzar hasta el 10 por ciento y que en Aguascalientes esté por arriba del 8%.
En resumen, Morena diferenciándose de las otras fuerzas políticas, sin hacer alianzas y mostrando una oferta clara, puede llegar a más del 20 por ciento de la votación del próximo 5 de junio, lo que la colocaría como tercera fuerza electoral nacional y quizá como segunda.
Dicen que la popularidad de Peña Nieto hace prever que arrastrará a al PRI a una profunda crisis tras el proceso electoral, dicen que desde ya el señor
Peña y
don Beltroni están enfrascados en un fuerte enfrentamiento que sólo augura rompimiento y que además implicará fracturar la estructuras, pues parece que
Beltrones Rivera no está dispuesto a “
aceptar” bajo las “
reglas” de sometimiento partidista su relegación, pues él sigue queriendo y está dispuesto a todo por ser.
Me informan que incluso promueve entre algunas estructuras partidistas que la candidatura sea para un candidato del PVEM (en el que tiene mucha influencia).
Los negativos del PRI en estos procesos electorales en los que hay 12 gubernaturas en juego, en donde en la Ciudad de México pasará a ser quinta fuerza política (debajo de los “independientes”) y en donde perderá las principales ciudades;Beltrones se los va a cargar a él y con ello intentará “revertir” la pésima imagen que el capo mayor tiene incluso al interior de su partido.
El PAN, pese a sus “alianzas” se ve reducido y el PRD parece limitar sus posibilidades a Tlaxcala, ellos le tienen miedo al inmenso crecimiento y posicionamiento de una verdadera alternativa electoral.
Sólo para documentar en 1992 en Chihuahua el PRD logró 1.7% ahora Morena no tendrá menos del 4.4%; en Baja california el PRD en 1992 estuvo desaparecido con un 2.1% y hoy morena tiene hasta el 5% de preferencia electoral.
Respecto de 2015 el PRI habrá perdido más de cinco puntos porcentuales y el PAN apenas mantendrá su ya de por si bajo nivel mientras que Morena logrará más que duplicar (casi triplicar) su votación.
Ellos tienen inmenso miedo a que esa opción electoral muestre que puede ganar en 2018.
Ellos tienen miedo a encontrar su verdadero nivel electoral y enfrentar un resquebrajamiento interno. Ya hoy en el PRD DF su nivel será históricamente bajo, el más bajo desde 1988.
Ellos tienen miedo a perder su capacidad de negociación para arreglar las cosas.
SALUD
http://arorci.blogspot.mx/2016/05/a-que-le-tienen-miedo.html