Señoras y Señores Consejeros, ustedes han demostrado carecer de toda ética y moral. Con sus malas decisiones nos han demostrado también, carecer del sentido del cumplimiento del deber por encima de cualquier seducción. Foto: Especial. |
Señores Consejeros: cuando ustedes tomaron protesta a su cargo, juraron ser imparciales y equilibrados en sus decisiones. Juraron conducirse con la verdad. Juraron cumplir cabalmente con su cometido.
Pues mintieron. No han hecho bien su trabajo. Al contrario, están fortaleciendo el fraude electoral. Están favoreciendo al partido en el poder, el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Su trabajo deja mucho que desear porque han traicionado los valores democráticos. Ustedes, señoras y señores Consejeros, se han negado al principio de equidad al tomar sus decisiones.
No sabemos si por corrupción, por ineptitud o por que así se los mandaron hacer. Ustedes prefirieron traicionarse a sí mismos y luego traicionar a los mexicanos, y finalmente agacharon la cabeza para someterse a las órdenes del Presidente y sus testaferros.
Señoras y Señores Consejeros, ustedes han demostrado carecer de toda ética y moral. Con sus malas decisiones nos han demostrado también, carecer del sentido del cumplimiento del deber por encima de cualquier seducción.
Ustedes, han garantizado impunidad a los miembros del partido en el poder y sus aliados. Han dejado de velar los derechos político-electorales de los ciudadanos, para velar y defender los más diversos intereses inconfesables en las últimas elecciones.
¿Dónde quedó la independencia con la que debieron conducirse? ¿Dónde quedó el apego a la ley? ¿Dónde quedó la legalidad en beneficio de la sociedad? ¿Dónde quedó el cambio de las maltrechas instituciones electorales de México que históricamente han fracasado?
Ustedes, Señoras y Señores Consejeros han envilecido la sana competencia democrática. Y por si fuera poco, Eduardo Gurza Curiel, titular de la Unidad de Fiscalización del INE ha mostrado que la corrupción cubre sus decisiones y se ha negado a aceptar que las autoridades electorales en los estados están sometidas a los gobernadores, controladas y manipuladas con los recursos del estado.
Consejeros, ustedes no fueron capaces de investigar el exagerado y evidente desvío de recursos públicos de programas sociales durante la campaña del candidato del PRI Alfredo del Mazo, al gobierno del Estado de México. Con la mano en la cintura se negaron a cumplir con su deber, exhibiendo de manera descarada su parcialidad al PRI. Se han negado a sancionar a todos por igual. Aplican multas que saben que tardarán en pagar a modo, solo para simular.
También se negaron a castigar la compra de votos encabezada por el PRI en el Estado de México y en Coahuila. Ustedes saben de sobra que las elecciones en esos dos estados, fueron un auténtico fraude. Ustedes conocen las decenas de irregularidades denunciadas. Ustedes tuvieron en sus manos las pruebas para actuar y prefirieron no hacerlo.
Ustedes, Consejeros, nos han demostrado que todo el entramado de instituciones electorales que existe actualmente en México está podrido. Nos han dejado claro que así nunca habrá cambios, que habrá una continuidad del PRI y sus aliados. Y lo más importante: que las elecciones del 2018 serán igualmente fraudulentas.
Nos han dejado claro que no hay castigo para los imparciales Órganos Públicos Locales Electorales (OPLE) que funcionan en cada entidad controlada por el PRI y sus aliados.
El Consejero Presidente, Lorenzo Córdova Vianello se ha convertido en un pelele del PRI. Su deslealtad a la democracia no solo constituye una felonía imperdonable, sino un posible delito que perseguir. Su traición a la democracia debería ser considerada inmediatamente una oportunidad para someterlo a proceso judicial porque de manera sistemática ha tomado decisiones parciales que generalmente benefician al PRI.
Lorenzo Córdova ha permanecido inamovible cada vez que recibe las denuncias que evidencian las ilegalidades cometidas por el PRI. Ha preferido hacer la vista gorda para sostener su puesto, su jugoso salario y todas las prerrogativas personales que va acumulando para cuando se vaya a su casa después del deber no cumplido.
Señoras y Señores Consejeros, ustedes no garantizan las elecciones libres y justas que los mexicanos necesitamos. Ustedes no garantizan la paz pública.
No garantizan la integridad de las próximas elecciones a Presidente de la República en el 2018. Ustedes, no son un arbitro objetivo. Ustedes ya están viciados, coptados, sometidos al poder.
Por lo tanto, deben renunciar ya.
Señoras y Señores Consejeros, si les queda un ápice de decencia, un mínimo de ética, un gramo de moral, renuncien. No han podido o no han querido desarrollar bien su trabajo, váyanse ya. Háganle un favor al país, entreguen a los ciudadanos que han traicionado, un poco de honestidad, esa que les faltó durante el desarrollo de su patética actuación en las últimas elecciones. Pero antes de irse por la puerta chica por ser unos traidores, anulen las elecciones de Coahuila y el Estado de México.
Y si no lo hacen. Si se aferran a sus puestos, a sus prebendas, que sea el Congreso de los Diputados el que regule, el que encuentre una configuración jurídica para mandarlos a su casa, para removerlos y quitarles una atribución que no merecen.
Pero si a pesar de todo continúan, si carecen de grandeza humana y congruencia. Queridos lectores, los invito a conocer su nombre, su rostro, su trayectoria. Identifiquemos en la calle, en un restaurante, en cualquier lugar a los traidores para mostrarles nuestro rechazo. Y para que vivan el resto de sus días con el estigma. Tenemos que ejercer nuestra ciudadanía.
Aquí sus nombres: Consejero Presidente: Lorenzo Córdova Vianello. Secretario Ejecutivo: Edmundo Jacobo Molina. Consejeros Electorales: Enrique Andrade González, Marco Antonio Baños Martínez, Adriana Margarita Favela Herrera, Ciro Murayama Rendón, Benito Nacif Hernández, Dania Paola Ravel Cuevas, Jaime Rivera Velázquez, José Roberto Ruiz Saldaña, Alejandra Pamela San Martín Ríos y Valles y Beatriz Claudia Zava Pérez.
Ellos son nuestros empleados. Y merecen ser despedidos.
Twitter: @SanjuanaMtz
Facebook: Sanjuana Martínez