domingo, 9 de septiembre de 2012

Represión contra estudiantes de la UACM

Irrumpen taxistas piratas en UACM Cuautepec, aseguran estudiantes

Iban armados y se escucharon disparos, dicen alumnos que resguardaban el inmueble. Se replegaron ante el arribo de la policía.
Bertha Teresa Ramírez
Publicado: 09/09/2012 13:49
México, DF. Un grupo de taxistas piratas, quienes dicen pertenecer a la “Red Universitaria de Cuautepec”, irrumpieron la madrugada de este domingo en el plantel Cuautepec de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), donde estudiantes en huelga que resguardan el inmueble reportaron haber escuchado disparos y petardos, así como el ingreso de, al menos, dos personas armadas ajenas a la comunidad universitaria.
Los hechos ocurrieron en los primeros minutos del domingo, relataron los estudiantes, quienes señalaron que tras varias llamadas a la Secretaría de Seguridad Pública, la policía se presentó en el lugar, lo que conllevó al repliegue de los taxistas.
Hace unos minutos, estudiantes y docentes se presentaron en la Agencia 21 del Ministerio Púbico ubicada en Cuautepec para levantar el acta de hechos.
“Sin embargo, María del Pilar Herrera Reyes y Esteban Vázquez Martínez, identificados como oficiales secretarios del Ministerio Público, se negaron a recibir la denuncia al alegar que lo reportado son “delitos menores” y que ellos investigan delitos graves, como homicidios”.
Esta omisión coincide con lo sucedido el miércoles 5 de septiembre cuando a una estudiante, que recibió un martillazo en la mano por parte de un alumno contrario a la huelga estudiantil, no se le admitió levantar acta de hechos pues no llevó al agresor informó la Asamblea Universitaria.
Ante estos casos, funcionarios de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal han expresado a los universitarios que el Ministerio Público tiene la obligación de recibir las denuncias, la calificación de las mismas es un acto posterior.
Esta es la segunda ocasión que el citado grupo de taxistas se presenta en el plantel de Cuautepec, el pasado viernes 7 de septiembre irrumpieron en el inmueble ubicado en la delegación Gustavo A. Madero, Comandados por el candidato al Tercer Consejo Universitario, Jacobo Venegas, quien fuera impuesto de manera ilegal por el Consejo Electoral a pesar de haber perdido en urnas, amenazaron con recuperar el plantel por “usos y costumbres”.
Gracias al cordón de estudiantes, trabajadores docentes y administrativos, los aliados de Venegas no lograron ingresar al lugar.

Los curitas, haciendo trabajo sucio... como siempre

Respalda Iglesia proyecto de reforma laboral

Ya no se puede postergar "con argumentos chantajistas o ideologías trasnochadas que han detenido el desarrollo del país", publicó en el semanario 'Desde la fe'.
De la redacción
Publicado: 09/09/2012 13:11

México, DF. La Arquidiócesis Primada de México respaldó la propuesta de las reformas laboral y hacendaria del gobierno.
Dichas reformas, al igual que la educativa y energética ya no se pueden postergar "con argumentos chantajistas o ideologías trasnochadas que han detenido el desarrollo del país", sostuvo en el editorial del semanario Desde la Fe.
También insistió en que el crimen organizado no debe ser combatido sólo con las armas, por lo que propuso instituir un programa incluyente para que participen todos los sectores sociales para detener la violencia en el país.
Al realizar un recuento del gobierno del presidente Felipe Calderón, asentó que la realidad nacional es compleja, "no acepta juicios ligeros, condenas demagógicas o difamaciones perversas".
Pidió a los ciudadanos ponderar lo realizado por la actual administración y destacó que tuvo logros pero siguen pendiente el combate a la pobreza.
Expuso que entre los logros están: la cobertura universal del seguro popular y el manejo responsable de la economía y finanzas públicas.

Se separa AMLO de PRD y buscará nueva fuerza política

 

En su discurso en el Zócalo, el político tabasqueño manifestó que Morena entra a una etapa de reflexión para determinar democráticamente si sigue como asociación civil o se constituye en partido político.
 

México, DF. El ex candidato a la Presidencia, Andrés Manuel López Obrador, durante la asamblea informativa en el Zócalo donde dijo: "dedicaré toda mi imaginación y trabajo a la causa de la transformación de México". La Jornada / María Meléndrez Parada


México, DF. Andrés Manuel López Obrador anunció que se separa de los partidos del Movimiento Progresista para "dedicar toda mi imaginación y trabajo a la causa de la transformación de México". En su discurso ante un zócalo prácticamente lleno, manifestó que "no se trata de una ruptura, me despido en los mejores términos". Estamos "a mano y en paz" con el PRD.
El ex candidato presidencial anunció que Morena entra a una etapa de reflexión para determinar democráticamente si continúa como asociación civil o se constituye en partido político.
"Hoy se ha dado a conocer la convocatoria para elegir a los órganos de dirección (del movimiento) en los estados, así como al consejo y al comité ejecutivo nacional de Morena". Por mi parte, adelantó, participaré el 15 de septiembre como delegado efectivo en la asamblea que me corresponden, en Copilco, ciudad de México.
Afirmó que lo primero será "consolidar la organización interna de Morena, manteniendo el carácter de movimiento amplio, plural e incluyente. Es decir, Morena continuará siendo un espacio abierto a todos los ciudadanos, corrientes de pensamiento y clases sociales".
López Obrador reiteró que no va a reconocer a Enrique Peña Nieto como presidente de México y también, de forma pacífica, a manifestarse en contra de las llamadas reformas estructurales.
En su discurso resaltó que se inicia una nueva etapa. "Vamos a recomenzar porque así lo exigen las circunstancias. Hagámoslo con el mismo entusiasmo de siempre", declaró.
Peña Nieto no será reconocido por Morena
El Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) resolvió no reconocer a Enrique Peña Nieto como presidente de México y recurrir a la desobediencia civil pacífica, que incluye realizar el 1 de diciembre acciones "contra la imposición en todas las plazas públicas del país".
Desde el zócalo capitalino, donde se lleva a cabo la asamblea de López Obrador, el movimiento acordó un plan de acción que establece: acciones informativas y culturales en plazas públicas todos los fines de semana, promover el establecimiento de un tribunal popular electoral, con posibilidad de réplica en los estados, rechazar la Ley Federal del Trabajo, conmemorar el 2 de octubre la matanza de estudiantes "para recordar lo que ha representado y representa el PRI".
Asimismo, convocar a todos los ciudadanos y movimientos a realizar una campaña por la democratización de los medios de información, un boicot a medios como Televisa y a exigir nuevas concesiones de medios.
Javier Jiménez Espriú afirmó que se trata de una lucha sin cuartel por hacer valer la democracia.
Propuso que las más altas instituciones académicas del país realicen un análisis servido y profundo sobre la sentencia del Tribunal Electoral. "Harán una gran aportación al bienestar de la nación". Convocó a no dejar que se cierre el expediente sobre las pasadas elecciones; es importante que la gente la conozca. Tenemos que hacer prevalecer el imperio de la verdad, resaltó.
Raquel Sosa, por su parte, dijo que los 5 millones de integrantes de Morena "participaremos en acciones de resistencia civil", y adelantó que integrarán consejos estatales, municipales, distritales; nombrarán un comité ejecutivo nacional y delegados a un Congreso Nacional, a realizarse el19 y 20 de noviembre para decidir el futuro del movimiento.
"Hoy son días que la izquierda debe reflexionar el papel que debe jugar en los próximos años, porque tenemos vocación de gobierno y queremos poner desde ahora un proyecto, en donde podamos poner sobre la mesa una agenda que le beneficie a los millones de mexicanos que votaron por la izquierda y que sea el futuro para ganar la presidencia de la República", señaló.
En estos momentos habla López Obrador, quien se ha manifestado en contra de la violencia.
La gente ha gritado constantemente "revolución, si hay imposición".
Previo a las palabras del tabasqueño, Paco Ignacio Taibo II señaló, al tomar la palabra desde el templete, que se inaugura la etapa más larga de la resistencia popular.
"Nos vamos a meter en sus sueños y nos vamos a convertir en su peor pesadilla", aseguró el escritor ante miles de personas apostadas en la explanada del Zócalo. "No prometemos días tranquilos", resaltó.
Se encuentran presentes, entre otros, el gobernador electo de Tabasco, Arturo Núñez; el senador Alejandro Encinas; el presidente municipal electo de Acapulco, Luis Walton; Jesús González Schmall, Clara Brugada, Héctor Vasconcelos y más.

Con AMLO, la militancia Morena de Benito Juárez




Discurso de AMLO en el Zócalo de la Ciudad de México, Sept. 9 de 2012


Versión estenográfica del discutso de Andrés Manuel López Obrador pronunciado el 9 de septiembre de 2012 en asamblea informativa en el Zócalo de la Ciudad de México.

En el discurso, AMLO anuncia su separación del PRD y el inicio de una consulta nacional para determinar si el Movimiento de Regeneración Nacional, MORENA, se convierte en partido político.



Amigas y amigos:

Como todos sabemos, el Tribunal Electoral decidió validar la elección presidencial a pesar de las evidentes violaciones a la Constitución y a las Leyes.

Muy poco tengo que decir sobre lo torcido del proceso electoral porque casi todo es de dominio público. Si acaso subrayo, aunque tampoco es novedad, que se violó el artículo 41 de la Constitución que establece que las elecciones deben ser libres y auténticas.

El distintivo de esta contienda fue el uso del dinero a raudales para comprar millones de votos. En los hechos, el candidato del PRI rebasó por mucho, los topes de gastos de campaña que establece la ley y, aunque se demostró el uso de dinero de procedencia ilícita, prevaleció el cinismo y la impunidad.

Tampoco hubo equidad en la actuación de los medios de comunicación. Por el contrario, la mayoría de los periódicos, la radio y, sobre todo, la televisión, en especial Televisa y Milenio, se convirtieron en los principales patrocinadores de Peña Nieto.

Ante estas violaciones, las autoridades electorales siempre se hicieron de la vista gorda. Los Consejeros del IFE y los Magistrados del TRIFE demostraron que son personajes sin convicciones, acomodaticios, seleccionados a modo para formar parte del engranaje del régimen antidemocrático que predomina.

Se podrá replicar que esto ya lo sabíamos y que a pesar de ello, decidimos participar en la contienda. Sin embargo, puedo argumentar que siempre debe intentarse la transformación por la vía pacífica y electoral. Respeto otros puntos de vista, pero no considero a la violencia como alternativa. Pienso que produce más sufrimiento y se terminan imponiendo con mayor facilidad quienes no tienen la razón, pero cuentan con la fuerza para reprimir. La violencia en vez de destruir al régimen autoritario lo perpetúa.

Al mismo tiempo, mantengo la convicción de que, aún en condiciones adversas, enfrentando a los poderes más siniestros, se pueden lograr cambios profundos siempre y cuando exista una voluntad colectiva dispuesta a ejercer a plenitud sus derechos y a no permitir ningún régimen de opresión. Sostengo que cuando el pueblo decide ser dueño y constructor de su propio destino, no hay nada ni nadie que pueda impedirlo.

Pero este proceso virtuoso de toma de conciencia y participación ciudadana, no es fácil de lograr. Lleva tiempo, requiere de mucho trabajo educativo con la gente y de predicar con el ejemplo; exige temple, convicciones y perseverancia.

Quienes estamos en esta causa, debemos saber que llegar al gobierno para mantener el régimen dominante es relativamente fácil, pero el triunfo de la justicia sobre el poder implica fatigas y confrontación política. Los procesos de cambios estructurales suelen ser lentos y complicados, pero son indispensables y gloriosos.

Basta con recordar la historia: Hidalgo proclamó la abolición de la esclavitud y ese anhelo de justicia se hizo realidad un siglo después. Las reformas liberales se consumaron luego de 30 años de cruentas luchas internas y de invasiones extranjeras. En 1910, Francisco I. Madero convocó al pueblo a la Revolución para derrocar a la dictadura porfirista con el lema del Sufragio Efectivo y, aún cuando se avanzó en la atención de demandas sociales, todavía no hay democracia en México.

De modo que no es sencillo lograr una transformación pacífica y profunda como la que nosotros queremos y necesita el país. Hay que enfrentar intereses creados muy poderosos que se oponen de manera rotunda a perder sus privilegios.

Los defensores del régimen de corrupción imperante, como lo vimos en las recientes elecciones, utilizan todo su poderío: sus medios de comunicación, sus relaciones de complicidad y, sobre todo, cuantiosos recursos económicos. A esa prepotencia hay que agregar, y eso es lo que más les ayuda, el atraso político y la pobreza extrema que se padece en el país.

Tenemos que aceptar que todavía hay muchos mexicanos, de todas las clases sociales, susceptibles al engaño y a la manipulación. Están, por ejemplo, y lo digo de manera respetuosa, quienes en las pasadas elecciones decidieron no apoyarnos porque creen en las vulgaridades y calumnias que difunden de nosotros los voceros de los dueños de los medios de información.

Sin embargo, no fue la desorientación lo que más influyó para impedir el cambio de régimen, en esta ocasión, lo determinante fue el uso del dinero para traficar con la pobreza de la gente. Ya hemos visto cómo Peña Nieto, con sus patrocinadores y cómplices, obtuvieron la mayoría de los votos en el medio rural y en las colonias marginadas del país.

No se trata de juzgar a quienes por necesidad venden su voto. La perversidad es de aquellos que, valiéndose del hambre y de la miseria, compran la voluntad de los desposeídos.

Esta es, sin duda, la mayor inmoralidad que se registró durante la elección presidencial y, al mismo tiempo, este es el gran desafío que tenemos por delante, porque si no hacemos nada para contrarrestar esta práctica inhumana y corrupta, nunca habrá una auténtica democracia en nuestro país.

Permitir a los poderosos que, encima de empobrecer al pueblo, se beneficien electoralmente de sus carencias, es aceptar que se instaure un sistema de esclavitud moderna en el que, entre más miserable y debilitado se mantenga al pueblo, menos esfuerzos serán necesarios para oprimirlo. En otras palabras, tolerar este retroceso significa dejar que los pobres se conviertan en peones y que haya amos que les compren su libertad.

Enfrentar esta infamia es una razón más para seguir adelante. Aquí es oportuno recordar que luchamos por ideales, no por cargos. Por más que nos haya dolido este nuevo fraude, no debe haber motivo para el desaliento y la rendición. Por el contrario, debemos sentirnos orgullosos de tener la encomienda de regenerar la vida pública y lograr el renacimiento moral de México.

Además, hay que tomar en cuenta que, en poco tiempo, hemos avanzado mucho. Nuestro movimiento ha contribuido a cambiar la mentalidad de amplios sectores del pueblo de México. Hemos puesto al desnudo al actual régimen con sus formas de control y manipulación. Se ha hecho evidente que el PRI y el PAN representan lo mismo. Que no hay diferencia entre Elba Esther Gordillo, Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Diego Fernández de Cevallos, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto. Ahora se sabe más sobre los que verdaderamente mandan y hay más claridad sobre su proceder y avaricia.

Esto ha sido, estimo, la mayor aportación social y política de nuestro movimiento. Tengamos presente que no se puede cambiar lo que no se conoce y lo que bien se comprende, difícilmente se olvida.

Fruto de este trabajo de concientización es el despertar de muchos ciudadanos de las clases medias, que en las pasadas elecciones por primera vez nos dieron su respaldo. Aquí aprovecho para mandarles el mensaje de que nunca traicionaremos su confianza.

Somos testigos, también, del surgimiento del movimiento estudiantil de nuestro tiempo, el #YoSoy132. Estos jóvenes han sabido estar a la altura de las circunstancias, han levantado el orgullo de muchos otros y les han dado poderosas razones para luchar por el derecho a la información, la justicia y por la democracia. Es un movimiento limpio, auténtico, independiente y creativo. Al grado que podemos proclamar que ya se tiene relevo generacional.

Abro un paréntesis para reconocer que hubo ciudadanos de todos los sectores que nos ayudaron a convencer a empresarios y a integrantes de clases medias, que debido a las campañas de desprestigio, mantenían una mala imagen de nosotros. Solo menciono, por no poder hablar de todos, a Alfonso Romo, Demián Bichir, León Larregui, Epigmenio Ibarra, Luis Mandoki, Manuel Clouthier, Dolores Heredia, Tomás López Rocha, Paco Ignacio Taibo, Lorenzo Rojas Guzmán y María Antonieta Laso.

También va a quedar para la historia el gabinete que presentamos, por la honestidad y experiencia de las personas que propusimos: Marcelo Ebrard, Rogelio Ramírez de la O, Juan Ramón de la Fuente, Claudia Sheinbaum Pardo, Javier Jiménez Espriú, Fernando Turner, Adolfo Hellmund López, María Luisa Albores, René Drucker Colín, Víctor Suárez Carrera, Sergio Rodríguez Cuevas, José Agustín Ortiz Pinchetti, Genaro Góngora Pimentel, Miguel Torruco Marqués, Raquel Sosa Elízaga, Bertha Elena Luján Uranga, Bernardo Bátiz Vázquez, Manuel Mondragón y Kalb, Elena Poniatowska Amor, Jorge Eduardo Navarrete López y el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.

En contraste, ya estamos viendo que en el gobierno de Peña Nieto ocuparán los puestos más altos, los hombres y las mujeres del más bajo nivel moral.

Pero, sobre todo, agradezco a los cerca de 16 millones de mexicanos, que expresaron con su voto su firme decisión de abolir el actual régimen de corrupción, injusticias y privilegios. Estoy seguro que, aún con los resultados oficiales, están satisfechos por haber actuado con dignidad y decoro, y no formar parte del mundo de la sumisión y del conservadurismo.

A todos les digo que nadie se desanime, que no debemos decir adiós a la esperanza. Tengo elementos para afirmar que el actual régimen está en su fase terminal, ya caducó; carece de consenso. La mayoría de los mexicanos no lo respalda, aunque muchos no lo expresen abiertamente. Baste decir que a pesar de tratarse del supuesto regreso del PRI a Los Pinos, la gente no festejó, al contrario, hay duelo nacional. El pueblo tiene un instinto certero y sabe que por desgracia nada bueno se puede esperar, que continuará el empobrecimiento, la corrupción, la inseguridad y la violencia.

A los hombres del régimen solo les queda el dinero y el aparato de manipulación y de fuerza. Pero el dinero no lo es todo, no es Dios, deja de dominar en la medida en que la gente va tomando conciencia. Ahí está el ejemplo de millones de pobres que, a pesar de sus necesidades, no vendieron su voto.

Asimismo, el control que ejercen los potentados a través de los medios de comunicación es, cada vez, menos determinante. El caso Peña Nieto es un ejemplo; pensaron que bastaba con la publicidad, con lo mediático y no les resultó, tuvieron que recurrir a la compra de voluntades. Y, en cuanto al uso de la fuerza, es cosa de no caer en ninguna provocación y no olvidar lo que dijo Talleyrand a Napoleón: “Las bayonetas sirven para todo, menos para sentarse en ellas”.

De modo que, ánimo, es poco lo que falta. Uno, dos, tres, seis años, una década, son como un suspiro, representan un abrir y cerrar de ojos en la historia nacional. Quienes luchamos por una transformación que servirá a varias generaciones, debemos aprender a medir el tiempo de un modo distinto. No nos debe preocupar tanto, cuanto dure consumar la obra de transformación. Lo importante es no dejar de caminar hacia ese ideal. Si tenemos la fuerza necesaria para resistir, veremos el triunfo de nuestra causa y, en cualquier circunstancia, habremos ayudado mucho a quienes vienen detrás de nosotros para lograr el cambio anhelado.

Amigas y amigos:

Por estar concentrado en la defensa de nuestro juicio de inconformidad para demandar la invalidez de la elección presidencial, no respondimos a las interrogantes en cuanto al futuro de nuestro movimiento, pero ahora es el momento de hablar sobre lo que sigue. Empiezo con lo obvio: diciendo que lucharemos hasta alcanzar el objetivo superior de transformar a México.

Con mucha claridad, hace unos días expresé mi rechazo al fallo del Tribunal Electoral que declaró válida la elección presidencial. Dije que nunca vamos a jugar el papel de paleros del régimen antidemocrático. Por el contrario, lucharemos siempre por abolirlo.

Considero que haríamos mal en darle vuelta a la página, como si nada hubiese pasado. Sería tanto como prestarnos para dejar cancelada, en los hechos, la vía democrática.

En consecuencia, reitero, no voy a reconocer a Peña Nieto como presidente legítimo de México.

Esta postura forma parte, como aquí se ha dicho, del plan de desobediencia civil, que incluye el compromiso de seguir luchando bajo el principio de la no violencia, sin caer en provocaciones, sin afectar a terceros y, sobre todo, de oponernos por medios pacíficos a la aplicación de las llamadas reformas estructurales como la laboral, la fiscal, la energética y todas aquellas medidas que se tomen en contra de los intereses del pueblo y de la nación.

También debe quedar de manifiesto que vamos a proteger a los jóvenes, a los luchadores sociales y a cualquier ciudadano u organización que padezca del acoso del régimen autoritario. No permitiremos la violación de los derechos individuales y colectivos de los mexicanos.

Vamos a seguir trabajando en el fortalecimiento del Movimiento Regeneración Nacional, MORENA. El día de hoy, se ha dado a conocer la convocatoria para elegir a los órganos de dirección en los estados, así como al Consejo y al Comité Ejecutivo Nacional de MORENA.

Además, en los congresos distritales que se celebrarán a partir del día 12 de septiembre, entre todos decidiremos, de manera democrática, si MORENA continúa como asociación civil o se constituye en partido político. En lo que a mí respecta, voy a participar el 15 de septiembre como delegado efectivo en la asamblea donde me corresponde, en Copilco, de esta ciudad. Invito a todos a que sean parte de los 125 mil delegados que participaremos en los 300 congresos distritales que se llevarán a cabo en todo el país. También informo que asistiré del 10 de octubre al 11 de noviembre a los 32 congresos estatales y, desde luego, estaremos presentes en el congreso nacional que celebraremos el 19 y 20 de noviembre.

De modo que lo primero será consolidar la organización interna de MORENA, manteniendo el carácter de movimiento amplio, plural e incluyente. Es decir, MORENA continuará siendo un espacio abierto a todos los ciudadanos, corrientes de pensamiento y clases sociales.

MORENA seguirá sembrando ideas y haciendo conciencia. Fortaleciendo valores culturales, morales y espirituales. En esta nueva etapa se pondrá énfasis en la formación política de los jóvenes. Se mantendrá el periódico Regeneración y se continuarán usando las redes sociales para difundir nuestro proyecto, fijar posiciones y contrarrestar la propaganda de los medios de información al servicio del régimen.

Con MORENA defenderemos a los que sufren injusticias, protegeremos a los débiles y cuidaremos el patrimonio nacional, herencia de las futuras generaciones. Y hay algo en especial que evitaremos con toda nuestra fuerza: la privatización del petróleo. Adelanto que nos opondremos a cualquier reforma al artículo 27 Constitucional, para entregar el petróleo a particulares, nacionales y extranjeros.

Amigas y amigos:

En lo que a mí corresponde, en esta nueva etapa de mi vida, voy a dedicar toda mi imaginación y trabajo a la causa de la transformación de México. Lo haré desde el espacio que representa MORENA, por esta razón me separaré de los partidos del movimiento progresista.

No se trata de una ruptura, me despido en los mejores términos. Me separo de los partidos progresistas con mi más profundo agradecimiento a sus dirigentes y militantes.

Agradezco todo el apoyo que recibí de militantes y dirigentes del partido Movimiento Ciudadano, antes Convergencia.

Estoy obligado a decir que en los momentos más difíciles, siempre contamos con el respaldo decidido de militantes y dirigentes del Partido del Trabajo, del PT, en particular, de su dirigente, Alberto Anaya.

Agradezco, en especial, a los militantes y dirigentes del PRD, partido en el que me tocó participar desde su fundación, del cual fui dirigente y en el que milité durante estos últimos 23 años. Tengo en el PRD muchos amigos, que en todo momento me dieron su confianza y respaldo y, en correspondencia, considero que les di lo mejor de mí y los representé con entrega y dignidad. Estamos a mano y en paz.

Estoy seguro que esta decisión ayudará a renovar y a fortalecer al movimiento progresista. Además, siempre que se trate de la defensa del pueblo, del patrimonio nacional y de luchar por la transformación del país, estaremos dispuestos a caminar juntos y llegaremos a acuerdos para actuar como una sola organización.

Amigas y amigos:

Iniciamos una nueva etapa. Vamos a recomenzar porque así lo exigen las circunstancias. Hagámoslo con el mismo entusiasmo de siempre. Sigamos despertando y organizando a los ciudadanos. Que no nos angustie y detenga el qué dirán nuestros adversarios. Lo más importante es sentirnos bien con nosotros mismos, con nuestras conciencias y con el prójimo.

Comparto con ustedes mi experiencia, que es semejante a la de muchos otros luchadores sociales. Llevamos años batallando, trabajando con intensidad, avanzando y recibiendo reveses. Hemos aprendido que, aun en condiciones adversas, con el predominio del régimen antidemocrático, se va avanzando en la creación de conciencia, en la organización del pueblo y en la conquista de espacios políticos.

Una prueba de ello, por solo poner un ejemplo, es el triunfo del movimiento progresista en Tabasco. Es memorable que este año a pesar del caudal de dinero utilizado para la compra de votos y otras trampas, el pueblo de mi tierra y de mi agua dijo basta y se pudo ganar la gubernatura del estado, luego de 80 años ininterrumpidos de gobiernos priistas.

Esta experiencia es, repito, una prueba de que se pueden ir obteniendo victorias parciales, al mismo tiempo que se van creando las condiciones para alcanzar el hermoso ideal de ver triunfar la justicia sobre el poder.

La fórmula es luchar, resistir, no claudicar, avanzar, caer y levantarse, recomenzar y así, hasta la victoria final.

Todo depende de no perder la fe o desmoralizarse, de comprender que los procesos de transformación son tardados pero sublimes; hacernos a la idea de asumirlos como forma de vida porque hasta en lo personal producen dicha y grandeza. Es decir, podemos ser felices si dedicamos nuestra existencia a procurar el bienestar y la felicidad de otros. Además, la vida es demasiado corta para desperdiciarla en cosas que no valen la pena.

Amigas y amigos:

Créanme que estoy consciente del coraje, el desánimo, la impotencia y malestares del alma que sienten millones de mexicanos luego de este nuevo fraude electoral. Pero debemos superar todas estas tristezas y decepciones, pensando que nada es en vano, hasta en las peores circunstancias, nuestra noble labor significa limpiar el camino a las futuras generaciones, a nuestros hijos, a nuestros nietos, es promover la aurora, la llegada de una nueva vida, de una patria nueva, del reino de la justicia y del humanismo.

Y a los dirigentes sociales y políticos de nuestro movimiento, les recuerdo que debemos guiarnos por valores más elevados que nuestros propios intereses personales. Aunque a algunos les pueda parecer una utopía, nada se puede hacer sin ideales.

Cuando pensemos que no se puede, recordemos que Hidalgo enseñó que “el pueblo que quiere ser libre lo será, que el poder de los reyes es demasiado débil cuando gobiernan contra la voluntad de los pueblos”.

Y cuando no tengamos lo suficientemente claro los motivos de nuestra lucha, no olvidemos las palabras de Morelos, cuando les dijo a sus allegados: “Quiero que hagamos la declaración de que no hay otra nobleza que la de la virtud, el saber, el patriotismo y la caridad; que todos somos iguales, pues del mismo origen procedemos; que no haya privilegios ni abolengos. Que todo el que se queje con justicia tenga un tribunal que lo escuche, lo ampare y lo defienda contra el fuerte y el arbitrario. Que como la buena ley es superior a todo hombre, las que dicte nuestro Congreso deben de ser tales a que obliguen a constancia y patriotismo, moderen la opulencia y la indigencia, y de tal suerte se aumente el jornal del pobre, que mejore sus costumbres, alejando la ignorancia, la rapiña y el hurto. Que se eduque a los hijos del labrador y del barretero, como a los del más rico hacendado y dueño de minas”.

Y cuando necesitemos fortalecer nuestras convicciones, emulemos a Juárez cuando decía “que el enemigo nos venza o nos robe, si tal es nuestro destino; pero nosotros no debemos legalizar un atentado entregándole voluntariamente lo que nos exige por la fuerza”.

Y cuando nos falte idealismo, pensemos en ese extraordinario luchador social, Ricardo Flores Magón, que decía: “Cuando muera, mis amigos quizá escriban en mi tumba: ‘aquí yace un soñador’, y mis enemigos: ‘aquí yace un loco’. Pero no habrá nadie que se atreva a estampar esta inscripción: ‘aquí yace un cobarde y un traidor a sus ideas’”.

Por todas estas consideraciones, aquí, en el Zócalo, corazón político y cultural de la República, decimos a los cuatro vientos que no claudicaremos. Que con la misma fe de siempre, vamos de nuevo a entregarnos al fecundo trabajo de despertar a los que faltan para que todos juntos logremos el renacimiento de México.

¡Viva México!

¡Viva México!

¡Que reviva México!

Ciudad de México 9 de septiembre de 2012

Qué irresponsables-Hernández


El destino de Morena

 
 
Morena es una vasta y compleja organización política de clara originalidad, cuyo potencial y destino seguramente producirán inquietud y esperanza no sólo en los cientos de miles de integrantes, sino en toda la clase política, incluidos sus posibles adversarios, y por supuesto en diversos sectores de la sociedad mexicana. Producto de una gestación que ha tomado años, en los pasados tres ha crecido en todo el país sin prisa ni pausa. Sus dirigentes reclaman que tienen más de tres millones de simpatizantes registrados y un buen sector de ellos está en activo. Morena fue la pieza fundamental para la promoción y defensa del voto de la candidatura de Andrés Manuel López Obrador en las pasadas elecciones federales y, a pesar de los fraudes e irregularidades y de los ataques y calumnias de casi todos los medios de masas, logró convertir a la coalición progresista en la segunda fuerza en la Cámara de Diputados y en números oficiales en la segunda fuerza electoral, con más de dieciséis millones de votos. No es poca cosa para una organización que ha surgido y que ha crecido en la adversidad.
Morena es un misterio para los politólogos de la ciudad de México. Ni ellos ni la mayoría de los políticos profesionales creyeron que pudiera surgir una organización verdaderamente popular no de una convención entre figuras destacadas reunidas en un recinto –como ha sido el origen de todos nuestros partidos políticos hasta ahora–, sino de las raíces de la sociedad, de los municipios, de los barrios, de las aldeas y de los pueblos de México. En este sentido, Morena es mucho más moderno que sus posibles antagonistas. El PAN tiene una arcaica estructura de cuadros, que quedó obsoleta en Europa hace mas de 60 años, y el PRI es un partido primitivo, clientelista y corporativo, para no hablar del Panal o del Verde que son en sentido estricto propiedad de un grupo familiar.
No hay un trabajo serio de investigación sobre el fenómeno de Morena, y es hasta ahora cuando su presencia no puede negarse y cuando está a punto de iniciar el proceso para convertirse en una organización política institucional y permanente cuando, seguramente, provocará comentarios, muchos de hipócrita satisfacción, otros de sincera sorpresa y no pocos de furiosa descalificación.
Morena y AMLO son inseparables. La iniciativa para su formación y el trabajo heroico para su conformación se deben a la tenacidad y a la visión estratégica del líder tabasqueño. Pero él mismo ha puesto los pilares de una organización democrática, y en cuanto esta se consolide y tome el carácter de una poderosa agrupación política capaz de competir por el poder, empezará a cobrar inevitablemente distancia de su fundador y llegará a adquirir un enorme impulso dinámico que no vendrá de un hombre o de un grupo de hombres sino de un conjunto de ciudadanos, cuyo poder y destino irán en relación directa a la fidelidad de su propósito central: la transformación de México.

La nomenklatura financiera y… Peña Nieto

 

 
MÉXICO, D.F., (apro).- Si Enrique Peña Nieto es para Carlos Salinas de  Gortari “la esperanza”, para la nomenklatura financiera será el cuerno de la abundancia, la garantía de la impunidad y el abuso que podrían convertirse en coraje y reclamo ciudadano.
Se ha sostenido que el grupo compacto de Peña Nieto, encabezado por Luis Videgaray, Luis Miranda y Luis Vega, lo llevaron al lugar en que hoy esta, –avalado como presidente de México por un tribunal electoral que la población no avala, pero eso es otro asunto–.
No fue la política ni los políticos los que lo llevaron al poder, de ahí que hoy Carlos Salinas de Gortari se le rinda hoy a sus pies. Fue el dinero, fueron los operadores que se allegaron recursos económicos de varias fuentes para comprar una elección.
Salinas jugó en dos vías: la política, –con Manlio Fabio Beltrones como favorito–, y la económica, con Peña Nieto a la cabeza. El grupo compacto fue ganando espacios, desde 2009, cuando Luis Videgaray se impuso en la comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados para entregar carretonadas de dinero a los estados, vía obras, sobre todo de agua y carreteras; además de sumar políticos a la causa que tiene a Peña Nieto a la cabeza.
Las versiones sobre la maleta que cargaba Videgaray en cada elección local para, a nombre del Peña Nieto darle su apoyo, son muchas. Fuera de los rumores, lo cierto es que Videgaray a lo largo de su carrera, que por supuesto no inició con el hoy reconocido por el Trife, tendió puentes, fijó rutas y lo más importante: hizo amarres con la nomenklatura financiera.
El dinero fluyó al PRI como no sucedió con Roberto Madrazo, político que se enfrentó al gobierno federal en 1994, y recursos que tampoco fluyeron con Francisco Labastida cuando creyó que le bastaría el dinero de la caja chica, Pemex, para ganarle al entonces carismático, –antes de ser negado más de tres veces por quienes propalaron  y ejercieron el voto útil–, Vicente Fox.
El encargado de distribuir lo que el otro par de luises obtenía, fue Luis Vega. Era quien tenía el billete en mano para pasarlo a otras.
Para la operación de los ríos de dinero hacía falta que Videgaray  pusiera en marcha sus pactos con la nomenklatura financiera. Sin ellos Videgaray y Vega no hubieran podido alcanza la meta: la Presidencia de la República que podrá atascarse de los beneficios por sus servicios.
Me refiero por supuesto a los bancos. A los dueños de los bancos que son los mismos propietarios de los supermercados (Soriana), que son los mismos dueños de las televisoras (Televisa y TV Azteca), que son los dueños de los hospitales, de las constructoras, en suma, los que se creen y ejercen como dueños de México.
Esa es la parte visible de esta nomenklatura, los que forman parte de los consejos de administración de los bancos.
Estos prestaron sus servicios, como Monex, Banamex-Soriana, HSBC, etcétera, haciendo transferencias (transa…cciones le llaman otros) bancarias electrónicas vía SPEI. El ejemplo más claro está en aquel que denunció el diputado Ricardo Monreal y que consistió en la transferencia de una cuenta del estado de México a un particular por 50 millones de pesos. Y que lo “particular” de éste joven, Marco Antonio González Pak, es que su liga llegó hasta la Fundación priista Isidro Favela.
La operación se realizó a través de Scotiabank, –seguramente el banco del sexenio como lo será Soriana–; el gobierno del Edomex la negó de manera insistente, hasta amenazó con denunciar a Monreal. Para enterrar el error se borró el nombre del joven y se puso Edomex. El hecho lo denunció Monreal y advirtió que por alterar el documento denunciaría al gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, una de las cabezas de esta nomenklatura financiera.
Scotiabank tuvo que asumir el error y decir que se había equivocado. ¡Vaya equivocación de 50 millones de pesos! ¡Poco más de la décima parte del tope de campaña!
Hasta aquí podemos hablar de simple cinismo, por qué quién va a creer un error de esa millonada. Pero el regalo mayor para los reporteros fue el desliz del secretario de finanzas del Edomex, Raúl Murrieta, quien apenas el jueves pasado “aceptó” que hubo esa transacción, pero que por un error de “algoritmo” se mandó casualmente a un muchacho que llevaba hasta la fundación priista Isidro Favela.
Pero no solo eso, reveló que hubo otras dos transacciones que tuvieron errores. No dio montos ni nombres. Ante tal revelación a uno le vienen a la mente otras transferencias, vía SPEI, que sumaron 8 mil millones de pesos, operadas por Videgaray, como documentó el Movimiento Progresista.
Mismo banco, Scotiabank, misma vía SPEI. ¿Habrán sido otro error los 8 mil millones de pesos que también negó tres veces el Edomex?
Esa otra parte de la nomenklatura financiera de la cual el propio Videgaray forma parte, salió a la luz cuando Agustín Carstens decidió que no se le tocara por denuncia alguna. A esta pertenecen también Alfredo Gutiérrez Ortíz Mena, titular del Sistema de Administración Tributaria; el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, Guillemo  Babatz Torres; Francisco Gil Díaz; los Murrieta Cummings (unos están en Edomex otros en Pemex); José Suárez Coppel (casi hermano de Gil Díaz); Enrique de la Madrid (ex funcionario de HSBC); Pedro Aspe; los hermanos Werner.
Esta nomenklatura financiera se fue entrelazando con la nomenklatura política, aquella a la que tanto culpó de las desgracias familiares el expresidente Carlos Salinas de Gortari.
El claro ejemplo de esa simbiosis es Luis Videgaray, de ahí que haya sido él la pieza clave para llevar a Peña Nieto a la silla presidencial.
Los otros grupos de apoyo, sólo fueron eso; pero que sin duda alguna también cobrarán a un precio alto el favor; igual lo hará esta fortalecida nomenklatura financiera… para reclamo y coraje de los otros, la ciudadanía.

Terminará esquizofrenia política si AMLO deja el PRD: Ortega

 

 
MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- El exdirigente nacional del PRD, Jesús Ortega, dijo este sábado que si Andrés Manuel López Obrador deja ese partido para conformar uno nuevo, se acabará la esquizofrenia política.
Ortega señaló que no sabe con certeza si mañana el tabasqueño dejará las filas del PRD para fundar un nuevo organismo político.
Consideró que llegó la hora de que en el sol azteca se acaben las tribus, que el partido tenga una sola visión y un solo comportamiento.
Dijo que desde el Congreso, el PRD impulsará que la educación deje de ser patrimonio particular de la líderesa vitalicia del SNTE, Elba Esther Gordillo.
Ortega ofreció hoy una rueda de prensa en Xalapa, Veracruz, acompañado del dirigente estatal del PRD, Juan Vergel y el diputado Rogelio Franco Castán.

¿Qué sigue? . Jaime Avilés



 
En todos los periódicos mexicanos --otrora llamados “de circulación nacional”-- que leí ayer, detecté síntomas de esquizofrenia. Aunque en sus páginas interiores publicaron testimonios de ciudadanos comunes y corrientes, que escucharon disparos y vieron a individuos anónimos pero también a patrullas policiacas azuzando a la gente para que se metiera en sus casas, todos culparon a los usuarios de Twitter y Facebook de la psicosis colectiva que afectó al estado de México y a las delegaciones de Iztapalapa y Tlahuac y de alguna manera al resto del Distrito Federal.
   
 La forma en que se condujo en sus ediciones papeleras y electrónicas del viernes la “gran prensa” es lamentable, explicable y preocupante. Lamentable porque revela,en unos casos más claramente que otros, la sintonía de los empresarios de las noticias con el “nuevo” PRI y Enrique Peña Nieto, que por medio de Antorcha Campesina, crearon el pánico en una amplia extensión geográfica.
    
Explicable porque entre esos empresarios hay periodistas que antaño ejercieron su oficio con vocación crítica y que, por desgracia, hoy se muestran incapaces e indispuestos para comprender la irrupción de los usuarios de Twitter como nuevos actores políticos, en un sistema de control social que si bien se ha endurecido tras el fraude que encumbrará al poder a Peña Nieto, al mismo tiempo se ha debilitado por el monumental descrédito de la televisión y de sus “líderes de opinión pública”, hoy rebajados por motu proprio a la categoría de vendedores de tónicos contra la calvicie. 
   
 Preocupante es, por lo anterior, el futuro inmediato que nos aguarda. Si la televisión con sus culebrones, sus inmisericordes sobredosis de intoxicación futbolística, sus piadosas colectas a favor de los pobres para que los ricos no paguen impuestos y su derecho divino para extenderle certificados de autenticidad a ciertos aspectos de la realidad y negárselos a otros –por el sencillo procedimiento de transmitirlos o ignorarlos por completo--, si la televisión, resumiendo, nos mantenía tranquilos en casa, tragando papitas y cerveza y opinando sin ideas propias, hoy nos indigna y nos repugna.
    
Sin el auxilio de la televisión, ¿qué le queda al sistema? La violencia directa. Y los hechos que desestabilizaron miércoles y jueves a millones de personas en el estado de México y el Distrito Federal, parecerían eso, la aplicación de la violencia directa contra la violencia simbólica –de la que tanto hemos hablado aquí últimamente-- desarrollada por las diversas expresiones de rechazo al fraude electoral del primero de julio.
   
 Los que hacen las primeras planas de los periódicos pero no leen las páginas de adentro, deberían recordar que en 2011, el engendro salinista llamado Antorcha Campesina reunió a 130 mil de sus aguerridos militantes en el Estadio Azteca para celebrar sus primeros 35 años de vida y tuvo como orador central a Peña Nieto. Hoy, Peña Nieto trabaja codo a codo con el general colombiano Oscar Naranjo, para poner en marcha una política similar a la que el presidente Alvaro Uribe impuso con saldo de decenas de miles de muertos en sus país –la creación de ejércitos de paramilitares-- y los antorchistas aparecen pero que ni mandados a hacer, por su inserción en el medio rural, para desempeñar esas funciones. 

    Antorcha Campesina, el gobierno del estado de México, el PRI y antes y después de todos ellos Peña Nieto, realizaron el experimento del miércoles y el jueves, para avisarnos que si queremos jugar a la revolución con los performances de #YoSoy132, ellos tienen usos y costumbres menos poéticos y llevan inscrita en la frente la consiga que el anciano Fidel Velázquez –el para mucho ya olvidado líder máximo de los sindicatos domeñados por el PRI-- musitó cuando estaba ya tan chocho que no se le entendía casi media palabra: “A balazos llegamos al poder, y sólo a balazos podrán sacarnos”. Hablaba, obvio, de la Revolución Mexicana de 1910. 

    Quienes no fuimos capaces de arrebatarle el poder pacíficamente a la olinarquía en julio, insisto, tampoco lograremos nada por la fuerza en estos momentos. Ya lo dijo en su cuenta de Twitter el miércoles Andrés Manuel López Obrador: “La decadencia continuará y debemos seguir luchando para proteger al pueblo”. De esta afirmación no cabe esperar que mañana, ante un Zócalo que volverá a llenarse a tope, el máximo dirigente opositor del país convoque a acciones espectaculares.

    ¿Qué sigue?, preguntan los carteles en los muros, los desplegados en los diarios y los mensajes en las redes sociales, así como en los autobuses que ya se acercan al DF por todas las carreteras del país. ¿Qué sigue? ¿Qué creen ustedes qué sigue? ¿Un nuevo plantón en el Zócalo? Yo no apostaría a esa carta. ¿Un llamado a la huelga general hasta que renuncie Peña Nieto? Tampoco. ¿Medidas como el no pago de impuestos y tarifas de gas, electricidad y etcétera? Lo dudo. ¿Otro boicot a los productos de las empresas que favorecieron a Peña Nieto? No sirvió de gran cosa cuando lo intentamos en 2006 contra Calderón. 

    ¿Un repliegue táctico? Imposible. Andrés Manuel no puede pedirle al pueblo que se resigne, como lo hizo Cuauhtémoc Cárdenas tras el fraude de 1988, porque dejaría solo a #YoSoy32. ¡Vaya pregunta! ¿Qué sigue? Mañana en el Zócalo, o desde el Zócalo, lo sabremos. Hoy, para no variar, también estaré en Twitter, en la cuenta @Desfiladero132, por si ocupan, y nos volveremos a leer aquí el lunes.

Jaime Avilés