Más allá de los resultados de la consulta pública, el próximo jefe del Ejecutivo debe cancelar la obra, sostienen ambientalistas
René Ramón y Alma E. Muñoz
Corresponsal y Reportera
Periódico La Jornada
Domingo 21 de octubre de 2018, p. 12
Domingo 21 de octubre de 2018, p. 12
Este sábado, más de cien ciclistas llevaron a cabo una rodada que partió del Monumento a la Revolución y concluyó con una protesta en la autopista Peñón-Texcoco, frente a los terrenos donde se construye el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), como parte de una serie de movilizaciones de organismos sociales y defensores de derechos humanos que pretenden
frenar el desastreambiental que implicará esa obra.
Hacemos un fuerte y urgente llamado a expresarnos con un enérgico no a la construcción del NAIM en la consulta que se realizará del 25 al 28 de octubre, como una muestra más del rechazo a ese megaproyecto, que representa
uno de los más grandes ecocidios del país, viola gravemente los derechos de los pueblos y pone en riesgo su existencia, afirmaron los manifestantes en la explanada del Monumento a la Revolución.
Organizaciones como Familiares en Búsqueda María Herrera y Movimiento Popular de Pueblos y Colonias del Sur, entre otras, acompañados por el obispo de Saltillo, Raúl Vera, demandaron que más allá del resultado de la consulta, el presidente electo (Andrés Manuel López Obrador)
asuma como un acto de decisión política la cancelación del proyecto del nuevo aeropuerto.
El obispo Vera sostuvo que el NAIM es
una fuente de ganancias millonarias para unos cuantos, porque lo que ahí interesa es todo lo que va a haber de mercado alrededor, no lo ocultan. A cambio de ganancias para unas cuantas familias, la destrucción del hábitat, de la naturaleza, afectaría enormemente esta ciudad.
La rodada partió de la Plaza de la República y recorrió más de 25 kilómetros hasta llegar a la puerta siete del NAIM. A los ciclistas capitalinos se sumaron integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT).
▲ Integrantes de grupos civiles y del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, así como el obispo Raúl Vera, ratificaron su rechazo a la construcción del nuevo aeropuerto en Texcoco.Foto María Luisa Severiano y Cuartoscuro.com
A bordo de sus bicicletas y con machete en mano, al pasar por la caseta de cobro de la autopista que conectará con el NAIM los campesinos –encabezados por Ignacio del Valle, dirigente del FPDT– gritaron consignas exigiendo respeto al derecho al agua, a la tierra y a los campos de cultivo.
En tanto, en la zona norte de Nezahualcóyotl el ayuntamiento celebró una sesión pública de cabildo para debatir el tema. Los síndicos regidores determinaron que Ciudad Neza sufrirá el mayor impacto en materia de servicios públicos y urbanos por las obras alternas a la construcción del aeropuerto.
Es especialista Ramón Ojeda Mestre lamentó que el gobierno federal no haya incluido a las autoridades locales en el proyecto, el cual ocasionará un grave impacto en términos de movilidad, servicios públicos y medioambiente.
En tanto, el urbanista Roberto Eibenschutz llamó al gobierno federal a aplazar tres meses el proyecto con el propósito de que pueda adoptarse la mejor decisión.
Para el arquitecto, lo más viable es cancelarlo y pensar en usar como alternativa otros aeropuertos del centro del país que están subutilizados; un claro ejemplo de ello es el de Toluca, que opera a la décima parte de su capacidad, señaló.
La próxima semana el gobierno electo de Andrés Manuel López Obrador realizará la consulta pública para determinar si se cancela el proyecto impulsado por la administración del presidente de Enrique Peña Nieto.
En días recientes se han realizado foros en varios municipios de la zona oriente del estado de México, en los cuales los participantes han manifestado su rechazo al megaproyecto por los daños ambientales que está provocando la obra que se ejecuta en terrenos del ex lago de Texcoco.