Encuestas: La corrupción –El INE como convocante CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Les ocurre lo que al alcohólico que no asume su enfermedad o al asqueroso que esconde la basura debajo de la alfombra, aunque también es cinismo extremo, pero los encuestadores están como si nada hubiera pasado, como si no hubieran cometido el peor fiasco de la historia de las encuestas en México. La mayoría de las encuestas preelectorales, y sobre todo las de salida, fallaron de manera grotesca este 5 de junio, y la respuesta de los empresarios del sector es, otra vez, ignorar el asunto, como no se habla –diría Julio Scherer García– de una enfermedad sucia. Con el aval del Instituto Nacional Electoral (INE) –onerosa ý facciosa institución–, los encuestadores, en especial los que publican en medios, han venido errando desde las elecciones estatales de hace seis años, en 2010, y en 2012 hicieron un ridículo espectacular en su apuesta por Enrique Peña Nieto y el PRI. Recordemos: Buendía y Laredo,