La Contraloría General del GDF investigará las denuncias de saqueo que han realizado al menos seis jefes delegacionales, prometió Miguel Ángel Mancera Espinosa. Foto: Cuartoscuro
Los perredistas, dicen delegados del PAN y Morena que les arrebataron demarcaciones en el Distrito Federal, no la vieron venir: nunca pensaron rendir cuentas a representantes de otros partido y, por ello, descuidaron todo, incluso dejaron huellas marcadas de corrupción y peculado.
Ciudad de México, 11 de octubre (SinEmbargo).– Antes del 1 de octubre pasado, cuando los nuevos jefes de las 16 delegaciones de la capital del país tomaron sus cargos, ya había reclamos, particularmente de los representantes del Partido Acción Nacional (PAN) y del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que le arrebataron gobiernos al Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Ahora, ya como delegados, las denuncias de estos políticos contra los ex delegados perredistas se acumulan en la Contraloría del Gobierno del Distrito Federal (GDF), en la Procuraduría General de Justicia capitalina y ante diversos ministerios públicos. Las actas incluyen desvío de recursos públicos, robo, peculado… Todo, dicen ellos, apunta a redes de corrupción de gobiernos que nunca pensaron pasar la estafeta a un partido diferente al PRD y, por lo tanto, rendir cuentas de sus actos.
El Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa, informó que la Contraloría General capitalina investigará y documentará las denuncias de esos delegados por saqueos en diversas áreas de sus administraciones.
“Vamos a atender todo lo que esté documentado, hay actas entrega recepción, si se firma un acta entrega recepción lo que nosotros tendremos que analizar qué falta de esa entrega recepción. Cuando firmas una entrega recepción tienes un inventario, ese es el inventario que recibes”, dijo Mancera Espinosa a la prensa.
Una de las primeras en alzar la voz fue la panista Xóchitl Gálvez Ruiz, quien en las elecciones de junio pasado triunfó en la Delegación Miguel Hidalgo, gobernada hasta hace unos días por Víctor Hugo Romo y luego por el encargado del despacho Humberto Morgan Colón, ambos perredistas.
En una entrevista con SinEmbargo, Gálvez Ruiz advirtió que la administración del Sol Azteca le estaba dejando la Delegación Miguel Hidalgo con “elefantes blancos” a medio construir, con poca información sobre los contratos y los contratistas, y presuntos “cochupos” entre funcionarios delegacionales y empresas constructoras, con la amenaza de que varias de las obras se caigan porque simplemente están mal hechas.
La ahora Delegada se quejó de que las autoridades delegacionales perredistas le ocultaban información sobre obra pública, padrones de programas sociales, padrones de comerciantes ambulantes y el pago de la nómina.
“Me he encontrado con cosas mal hechas, pocos datos, la información que nos dan es insuficiente, porque creo que ni la tienen, la están preparando… y a veces tengo la impresión de que la preparan los constructores”, dijo entonces.
El Jefe Delegacional electo en 2012, el perredista Víctor Hugo Romo, gobernó la demarcación hasta el 15 de enero de 2015, fecha en que emprendió la búsqueda de su candidatura para obtener una curul en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF). Por ello, como encargado de despacho, quedó Humberto Morgan Colón, quien fue el responsable de hacer la transición con la administración panista entrante.
“Tenían un desastre administrativo, porque mucha de la información que estamos solicitando debería estar en la página de transparencia: el monto de los contratos, lo ejecutado, lo pendiente por ejecutar. Esa información que debería tener cualquier gobierno que presume de ser transparente, como el de Miguel Hidalgo”, explicó Xóchitl Gálvez.
“Yo tengo la impresión de que no estaban preparados para entregar la Delegación a un gobierno de oposición”, destacó la mujer que ganó la elección del pasado 7 de junio con un amplio margen sobre su más cercano rival, el perredista David Razú Aznar.
TAMBIÉN LOS DE MORENA
Pero las quejas de la panista por el estado en que el gobierno perredista de Miguel Hidalgo le dejó esa demarcación no son las únicas. Los cinco delegados de Morena que le arrebataron delegaciones al PRD también han levantado la voz.
El 3 de octubre pasado, el presidente nacional del Movimiento de Regeneración Nacional, Martí Batres Guadarrama, denunció que los cinco jefes delegacionales emanados de ese partido recibieron las instalaciones “saqueadas y en condiciones deplorables”.
De acuerdo con el dirigente, al momento de tomar posesión, los jefes delegacionales de Morena “encontraron todo patas pa’ arriba”, sin escritorios, sillas, ni teléfonos y con la información escondida”, y acusó a los ex delegados del PRD de haber desmantelado y destruido las instalaciones.
DELEGACIÓN CUAUHTÉMOC
Amenazas de muerte contra Ricardo Monreal, Delegado en Cuauhtémoc. Foto: Especial
Luego de su toma de posesión, el nuevo Jefe Delegacional en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal Ávila, denunció que de las oficinas fue extraído mobiliario y a través de un video expuso las condiciones en que supuestamente las recibió.
Por ello, dijo, presentó cuatro denuncias penales por supuestos saqueos en la sede de la demarcación, describió que recibió como oficina una mesa y una silla de plástico que no quitará para mostrarlas como “un monumento a la corrupción” de parte del ex Delegado perredista Alejandro Fernández Ramírez.
La pasada administración, relató Monreal Ávila, se llevó escritorios, teléfonos, entre otras cosas. Por esto, añadió, presentó denuncias penales: “No vamos a permitir que sea borrón y cuenta nueva. Este saqueo no puede quedar en el olvido. Siempre es lo mismo, pero yo no soy igual que todos. Ya presenté cuatro denuncias penales por peculado, por enriquecimiento inexplicable. No me he detenido y no me voy a detener”.
Apenas el viernes pasado, Monreal se encontró con otra sorpresa dentro de la propia sede de la Delegación Cuauhtémoc: cinco cartulinas “profiriendo amenazas de muerte en su contra, y en otras solicitándole desistirse de estos procesos de control, así como invitándolo a mantener estas prácticas establecidas en anteriores administraciones”, como informó en un comunicado.
Al respecto, el Delegado de Morena atribuyó los mensajes a la resistencia de quienes no quieren cambios en la administración.
“Yo sé que va a seguir esto, pero sí ya subieron de tono porque ayer me dijeron desde temprano que habían puesto cartelones cerca de la… muy curioso porque está la oficina del sindicato y a un lado o sea a plena luz… No les gusta que ande checando, no les gusta que me levante temprano, no les gusta que ande yendo a las oficinas [...] como diciendo: ‘Nomás robe pues, ya no haga nada, no destape la cloaca’”.
DELEGACIÓN TLALPAN
Fotografías del estado del mobiliario en la Delegación Tlalpan, y protestas de vecinos por desalojos de la pasada administración. Foto: Especial
Claudia Sheinbaum Pardo, nueva Jefa Delegacional de Tlalpan y también integrante de Morena, dijo que realiza un inventario de lo detallado en el acta de entrega-recepción de las oficinas primeramente ocupadas por la ahora ex Delegada Maricela Contreras Julián, y posteriormente por Héctor Hugo Hernández –ambos perredistas–, para así presentar una queja formal ante la Contraloría General y una denuncia ante el Ministerio Público por saqueó y robo de documentos por contratos de obras públicas, que podrían sumar millones de pesos.
En entrevista con SinEmbargo, Sheinbaum Pardo dijo que en las áreas de obras y gobierno de esa Delegación faltan expedientes y contratos, por tal motivo la nueva administración no ha hecho los pagos a diversos proveedores, puesto que no sabe cómo se realizaron esos convenios. La próxima semana, adelantó, se realizarán las denuncias penales y ante la Contraloría General del Gobierno del Distrito Federal (GDF) por esos hechos, y las acusaciones apuntarán a su antecesor Hernández Rodríguez, quien reemplazó este año a Contreras Julián.
“Todo esto es corrupción. Aquí había una total falta de vigilancia y pulcritud en el servicio público. Esto es un desorden administrativo sumamente grave”, dijo. La Delegada agregó que el monto del mobiliario robado podría ser de miles de pesos, pero en el caso de los documentos se estima que se trate de contratos millonarios.
AZCAPOTZALCO
El nuevo Delegado de Azcapotzalco, Pablo Moctezuma Barragán, también denunció “graves” graves irregularidades, abandono en la demarcación, y saqueo en las oficinas del edificio sede. “Estamos buscando todos los elementos y vamos a actuar conforme a la Ley; no se puede hablar de una buena relación con este tipo” dijo en referencia al ex Delegado perredista Sergio Palacios Trejo.
Moctezuma Barragán describió que, entre otras cosas que dan pistas de corrupción, encontró un spa de lujo en el Deportivo Santa Rosita que era de uso exclusivo del Delegado Palacios Trejo y de quienes integraban su equipo de béisbol. En el spa, añadió, hay vestidores, baños y hasta una cama de masaje.
Pero en las oficinas de la Delegación, agregó, se llevaron las computadoras y hasta sillas y archivos de la oficina. Tampoco pagaron gas ni energía eléctrica, los vehículos delegacionales están completamente deteriorados y hay camiones que no tienen factura, entre otras muchas irregularidades.
TLÁHUAC
Rigoberto Salgado Vázquez, Delegado de Morena en Tláhuac, detectó faltantes que pueden sumar millones de pesos, y encontró mobiliario dañado porque se llevaron el que estaba en buenas condiciones. Lo peor, añadió, son las irregularidades en 19 obras públicas de la anterior administración, por lo que denunció ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGDF) y ante la Contraloría General del GDF contra la ex Delegada electa, la perredista Angelina Méndez Álvarez.
A su vez, Tomás Noguerón, director Jurídico y de Gobierno, también expuso: “Lo más grave es que en las arcas sólo tenemos dinero para pagar la primera quincena de octubre al personal de base y hasta ahí”, afirmó.
XOCHIMILCO
Avelino Méndez Rangel, Delegado en Xochimilco e integrante de Morena, denunció que la administración anterior, encabezada por el perredista Miguel Ángel Cámara Arango, le dejó un desastre administrativo, al grado que no tiene información de la nómina y de los recursos financieros.
Todo el equipo, expuso, está en mal estado: de cinco ambulancias sólo una sirve, el personal de seguridad trabaja con radios dañados y hay un abandono general en todas las áreas.
