martes, 1 de septiembre de 2009

Descanse en Paz Margarita Suzan...Luchando te recordaremos

DF: estallan 2 artefactos en sucursal bancaria de Tlalpan; no hay heridos

La policía informó que tres sujetos lanzaron 2 latas de gas butano. La explosión dejó daños materiales.

Claudia Alvarez Laris
Publicado: 01/09/2009 08:48

México, DF. Dos artefactos fueron detonados durante la madrugada de este martes en una sucursal bancaria ubicada en la delegación Tlalpan sin que se registraran heridos.

Reportes policiacos señalan que las cámaras de seguridad instaladas dentro del banco BBVA-Bancomer, que se encuentra en el bulevar Picacho Ajusco, en la colonia Jardines del Ajusco, captaron alrededor de las 2:30 horas a tres sujetos que arrojaron dos latas de gas butano en el área de cajas.

Las primeras versiones de este hecho apuntan a que se trató de un acto vandálico, ya que no se encontró mensaje alguno de los probables responsables.

La sucursal, que se encuentra entre una escuela de inglés y un restaurante, fue la única que sufrió daños estructurales por la detonación, pues uno de los cristales del área de cajas se quebró por completo.

El lugar es resguardado por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) en espera de que arriben los peritos de la Procuraduría General de Justicia capitalina para realizar las investigaciones correspondientes.

Lo que el viento se llevó


Tomando posesión


Cumpliendo promesas

Astillero

Carlos Navaleta



Julio Hernández 


El chuchismo ha avanzado un grado en la toma de la burocracia política: Carlos Navarrete (versión masculina y políticamente mejor elaborada que la diputada Ruth Zavaleta, su antecedente en la otra cámara) ha arribado a la presidencia de la mesa directiva del Senado para dar muestra de institucionalidad, primero que nada, reconociendo a Felipe Calderón como presidente de la República (a pesar de los acuerdos de su partido en sentido contrario e irónicamente cuando el mencionado funcionario de facto está en sus peores momentos) y para servir de contraste envenenado que los medios de comunicación involucrados en la jugada habrán de descubrir y encomiar frente a las posturas de la otra izquierda, la rústica y atrasada, la que no sabe negociar y triunfar, la que derrocha su capital político a diferencia de los nuevos estadistas, modernos, dialogantes, de la magna y sabia escuela Chucha.

Pero Carlos Navaleta no llega a ese cargo solamente para extender un certificado de plena salud a los despojos del calderonismo. El horizonte de servicio a la carta pasa por las habitaciones del priísmo, en especial las del jefe político real del Senado, Manlio Fabio Beltrones, quien se ha hecho a un lado del máximo cargo formal de esa cámara para dejarla al buen colaborador que ha sido hasta ahora el mencionado perredista guanajuatense. Favor con favor se paga: Ruth Zavaleta se había hecho a un lado el 1º de diciembre de 2006 en San Lázaro para dar paso a Beltrones que así pudo cumplir con el ritual descuadrado que permitió a Calderón asumirse como gobernante legal y al priísta sonorense como vicepresidente virtual. Ayer por Manlio, luego por Ruth, hoy por Navarrete.

El manejo real de la política senatorial seguirá, obviamente, en manos del priísmo manliofábico, aunque el personaje Navaleta tendrá a su disposición un amplio catálogo de frases y actitudes teatrales que le permitan fortalecer la imagen del Buen Izquierdista Moderno. Entre más crezca Carlos (Navarrete), más se podrá explotar la comparación entre el destino de la oposición positiva y los malos resultados del izquierdismo activo en las calles y ríspido en los salones de la institucionalidad. Lo importante, en la estrategia del otro Carlos (Salinas), es restringir el ámbito de la competencia para que sólo queden participantes arreglados: sea Peña Nieto o Beltrones el candidato presidencial priísta, se necesita una oposición de izquierda domesticada para que convalide los resultados de la alternancia pripánica negociada. Una manera, elemental, de desplazar del escenario a la izquierda mala es inflando a la buena, dándole triunfos y concediéndole ganancias prácticas. Así sí gana la gente (de los Chuchos y del salinismo en sus dos principales precandidatos).

El Gran Caldero se prepara mientras tanto para su informe privado, en el salón de fiestas mejor conocido como Palacio Nacional, luego que los chicos malos del PRI le hicieron sufrir porque se le habían olvidado algunas lecciones básicas de constitucionalismo. Primero, al Congreso; después, al jolgorio particular, ha sido la plana que con lápices de tres colores le han mandado hacer en castigo por su acelere original. Y luego el niño Cesarín Nava, que le ha pedido a la oposición (es decir, a la mayoría en la cámara de diputados) que se porte bien, con altura de miras y que apoye el programa de reanimación económica que propondrá el lic. Calderón que según eso tiene el poder y no está en la oposición (no me defiendas, compadre, podría decir el arrinconado Felipillo). Por lo pronto, los medios electrónicos de comunicación acribillan al público con comerciales vacuos que pretenden dar cuenta de las presuntas grandezas cometidas en este año trágico, el último en que Felipe el Valiente se mandó sólo (a partir de ahora tendrá niñera de tres colores). Tan urgido está el citado Lipe que en la radio él es el locutor que narra las hazañas supuestamente realizadas por sí mismo. ¡Recuérdame!, pide el Gansito fuera de refrigerador.

López Obrador manda decir por medio de boletín que Juanito debe cumplir su compromiso, como si su desatada criatura estuviera para escuchar recomendaciones. Las andanzas del Hijo Desobediente son usadas, naturalmente, por los adversarios del precandidato presidencial de 2012 para enfatizar desviaciones y errores graves en la estrategia del líder máximo, y del lado del propio movimiento cívico no surge la autocrítica que permita remontar con decoro el pésimo momento que se vive por una traición lumpenesca. Juanito ha sido la exhibición descarnada, cínica y contundente del arribismo y el oportunismo que rondan en los altos círculos de ese movimiento y, sobre todo, en la asignación de cargos, candidaturas y responsabilidades. Juanito ha carecido del oficio político para enmascarar sus ambiciones y traiciones, pero la nómina de beneficiados electorales del lopezobradorismo tiene a otros juanitos, apenas encubiertos o abiertamente desertores.

Los indicadores económicos continúan, mientras tanto, dando forma a la tragedia que la gente sabe y vive en lo cotidiano. Pero las vías políticas se encuentran obstruidas a causa de tanta suciedad acumulada y la desesperación no encuentra una salida adecuada. No hay política real de izquierda ni compromiso social efectivo. Hay una sostenida vocación por lo electoral y una tendencia a las movilizaciones y los discursos. Las cosas van cambiando a gran velocidad y frente a la descomposición no basta lo masivo ni lo retórico, mucho menos las convocatorias juaníticas a formar otro frente amplio opositor, con los chuchismos tan sabidos y liderazgos de charrismo independiente. El proyecto Salinas de reconquista de Los Pinos va viento en popa, consolidando cacicazgos regionales y ofreciendo zanahorias de futuro a empresarios y grupos de poder. El PAN se allana, hundido en su corrupción explosivamente desatada y en la terrible ineficacia política. Y la izquierda... ¿hay, política y estructuradamente, izquierda? ¡Hasta mañana!

Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx




Informe del tiradero, o ¿el tiradero del Informe?


A Puerta Cerrada

Marcela Gómez Zalce



• Los chicharrones del PRI
• Revocación de mandato
Hacer (o decir) tonterías, mi estimado, no siempre es cosa de tontos. Abrumadora la campaña mediática de “logros” llevada a cabo vía telefónica por el (des)gobierno de Felipe Calderón para informar, aunque no lo parezca, que el país va a toda madre pese a la emocionante adversidad. Ahora, la descomunal espotiza que fastidió en medios electrónicos sumados al call center devela el inadmisible dispendio de Los Pinos para sacar a flote el barco de gran calado con una inundación de espots.
Hoy que se cumple un año más del sugestivo rito del 1 de septiembre, Calderón & his dumb squad siguen sin dar una. Cada vez son más las voces que señalan la torpeza, frivolidad e ineptitud con que opera el gymboree(con minúsculas) presidencial y la caterva de secretarios de Estado.
A semanas de un proceso electoral, donde perdieron hasta la risa, my friend, el partido en el poder (del no poder) y su jefe no acusan recibo del mensaje de la ciudadanía. Las alertas y los focos rojos tintinean enloquecidos en el tablero de la seguridad nacional, mientras se deslizan los aumentos que vienen chocando con recriminaciones sobre la inviabilidad de pedir más sacrificios, sobre todo cuando estos no aplican para los talentosos funcionarios, los gloriosos legisladores, los excelsos magistrados, los pasados consejeros y los caprichos presidenciales.
Hoy se debe dejar de lado la chunga que desencadenan los constantes traspiés y yerros que asombran, divierten, preocupan (y ocupan) a tirios y troyanos, y se le debe exigir a Felipe Calderón que explique cómo fue posible que el “catarrito” se convirtiera en el peor shock económico en los últimos 30 años.
Que aclare sus razones de haber escupido que en México no habría otra devaluación.
Que manifieste claramente por qué la caída tan estrepitosa en el PIB y por qué las escalofriantes cifras en el desempleo, que para diciembre podría alcanzar el techo de los 3 millones de mexicanos. De paso, que revelepor qué en sus dos primeros años de (des)gobierno cayó la producción petrolera en más del 50%. Queinforme sobre el estado de la economía y la mentada solidez del barco de gran calado —donde ya se mostraban signos de alarma mismos que, en aras de un proceso electoral, fueron subestimados, minimizados y por consecuencia mal aplicados— y cuáles son los pasos a seguir. Cuál es su estrategia puntual, clara y precisa ahora que entremos de lleno al peligroso oleaje de la tormenta perfecta.
Felipe está obligado a informar el balance de su mal llamada guerra contra el narcotráfico, que lo único que está acumulando son muertos y agravios en la población por el atropello a los derechos humanos. Que lo único que está solapando es una guerra sucia y una corrupción que trastoca hace tiempo a altos funcionarios civiles y de manera reciente y alarmante a nuestras fuerzas armadas.
Tres años de (des)gobierno son suficientes para entender los errores que desarrollaron el descomunal tiradero y comprender que, como en el béisbol, es hora de cambiar al pitcher basado en quiénes están en la lista para batear. Es hora de dejar de lado pasiones que afloran con los amigos que no han dado resultados y que, restando han dividido, arrastrando al país a la peligrosa caída libre aunque recete el sonsonete de que Méxicoestá sólido ante la crisis y la inseguridad.
Y ya encarrerados, mi estimado, ahora que el PRI envió el sugestivo mensaje —al obligar la cancelación del festejo del besamanos blanquiazul que se llevará a cabo mañana con confeti y globos— que sus chicharrones son los que truenan en el Congreso, epicentro indiscutible en la simetría del poder, quedó develada la disposición tricolor de pagar los costos políticos que vienen aparejados con el paquetón fiscal… que podría ser volátil detonador de conflictos latentes.
Atrás debe quedar también esa imperdonable ligereza federal de justificar que el futuro nos alcanzó mostrando la visión que estos inútiles tenían sobre el mañana colmado de contextos de debacle y catastrofismo.
Hoy que quede formalmente instalado el mentado ¿Honorable? Congreso de la Unión, es hora de que sus lacritas se pongan a trabajar, por ejemplo, en la figura de la revocación de mandato.
Hacer realidad para todo gobernante, my friend, que si no puede… renuncie.
¿Se atreverán…?
Por la Mirilla
El lucido (que no es lo mismo que lúcido) presidente (ooootro con minúsculas) del Senado Carlos Navarreteenalteció con su discurso el significado de la incongruencia y el absurdo…
gomezalce@aol.com

Despilfarros y abusos de Calderón

ÁLVARO DELGADO
MÉXICO, D.F., 31 de agosto (apro).- Además de la petulancia de hacer oír su voz y exhibir su rostro en radio y televisión, a toda hora y durante todo el día, Felipe Calderón agrede a los mexicanos con otra insolencia inaceptable: Invadir el espacio privado del hogar y del trabajo para imponer su desmesurada campaña de mentiras.

Desde centros de telemercadeo --denominados calls centers en ese deleznable afán de agringarlo todo-- se hacen llamadas telefónicas a los domicilios particulares con base en los directorios públicos, pero también --y esto es muy grave-- a números privados que deben estar reservados por las compañías telefónicas, como Teléfonos de México.

Sin que puedan descartarse delitos, son casos que vulneran el principio de respeto a la intimidad, un método cada vez más empleado por los políticos, como lo hicieron en la más reciente campaña Demetrio Sodi, el delincuente electoral que busca impunidad, y César Nava, otro panista que también cometió faltas que deben ser sancionadas.

Este reciente episodio de Calderón es un acoso a los mexicanos que mancilla los momentos más íntimos de una familia y distrae de la actividad laboral, aun si los logros del gobierno fuesen una epopeya.

Pero tan excesivo afán de Calderón de ser visto y oído sólo exhibe su verdadera condición: El fracaso.

Y es uno tras otro: Esta fórmula de encubrir con el maquillaje de la propaganda la ineptitud es también muy costoso, aunque para eso --y para los onerosos sueldos de la alta burocracia-- hay recursos de sobra.

Solamente en pago por asesorías, encuestas y grupos de enfoque, así como producción de spots para promover su imagen, Calderón gastó para esta campañita que acosa a los mexicanos por lo menos 241 millones 470 mil 238 pesos.

Es una cifra mayor al recorte del presupuesto que Calderón hizo a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que asciende a 200 millones de pesos.

Pero como Calderón es un fanático de la imagen, justamente para encubrir su ineptitud, pero además compra el silencio de las televisoras, de los grupos radiofónicos y de buena parte de los medios impresos, los gastos en materia de difusión son de escándalo.

Aquí ya se había consignado información al respecto, pero es preciso reiterarla por la desmesura en el gasto para la imagen gubernamental, y en especial de Calderón, que ya superó a Vicente Fox en la materia, que ya dice mucho.

En efecto, en dos años y tres meses de gestión, Calderón ha gastado 8 mil 779 millones 548 mil pesos en publicidad gubernamental, según cifras de la Secretaría de Gobernación que publica la revista Etcétera en su edición de agosto.
Etcétera, que ha hecho un seguimiento sistemático de la evolución de este gasto desde el sexenio anterior --siempre con base en la información oficial--, describe que el gasto de Calderón se incrementó 228.57% comparado con el sexenio de Fox.

Además del despilfarro, otra característica une a Fox y Calderón: Destinaron la mayor parte de esos recursos públicos a anunciarse en la televisión, particularmente en Televisa y en Televisión Azteca.

Por eso se entiende que el recorte de 85 mil millones de pesos al presupuesto federal, como consecuencia de la brutal crisis económica, no afecte mayor cosa a la Presidencia de la República.

Las cifras son nítidas: A las secretarías de Desarrollo Social, Educación y Salud se les recortó un total de 8 mil 603 millones de pesos –sí, casi lo mismo que Calderón ha despilfarrado en imagen en lo que va de su gestión--, pero al presupuesto presidencial le tocó un recorte realmente simbólico: Sólo 7.1 millones de pesos.

En efecto, es una burla.

Eso gasta el individuo que, por lo demás, hizo otro ridículo al convocar a un boato en el Palacio Nacional para mañana 1 de septiembre, sin reparar que primero se debe instalar la Legislatura del Congreso de la Unión. Lo tendrá el miércoles, como en 2007, y seguramente se repetirá el acarreadero de burócratas.

Con Calderón cobra vigencia --casi como en el caso de "Juanito" que tanto gusta a los amanuenses del poder-- aquel adagio de Enrique González Pedrero: El poder atonta a los inteligentes y a los imbéciles los vuelve locos…

Apuntes

El abuso presupuestal campea en toda la alta burocracia de México: La peor crisis económica después de la Revolución Mexicana, cuyas consecuencias gestan un movimiento análogo un siglo después --el temido estallido social--, exige de quienes integran los poderes del Estado un mínimo de sensibilidad para acompañar el monumental sacrificio que cotidianamente hacen millones de mexicanos, que van siendo acorralados por el hambre. Un esfuerzo en este sentido se impone ya no por estrategia, sino por simple sentido común y, en el extremo, por la propia conveniencia de seguir exprimiendo a los pocos que pagamos impuestos. Pero no. Quienes forman parte de la casta burocrática que impúdicamente saca provecho del presupuesto en los tres niveles de gobierno, los tres poderes del Estado y en los organismos "autónomos", ratifican, día a día, que podrá haber otra revolución, pero jamás una mínima moderación a sus privilegios. Unos ejemplos: El IFE anunció un ahorro de 104 millones de pesos, pero es una cifra insignificante ante los más de 9 mil millones para 2010: Más de 6 mil serán para gastos de operación y unos 3 mil millones de pesos para distribuirlos entre los partidos políticos. El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) anunció, por su parte, que también tendrá ahorros: Un total de 4 millones de pesos de 2 mil millones para 2010. Efectivamente, una burla tras otra…

Comentarios: delgado@proceso.com.mx

La diferencia

Pedro Miguel
Sabrá Dios cómo va a terminar eso, pero el asunto de Juanito será recordado, a lo sumo, como una anécdota menor. La descomposición del régimen y las bajezas personales fermentan en una suerte de picaresca sin humor poblada por muchos personajes como ese. Pero el dominio de la izquierda en la capital de la República, con todos sus errores y sus miserias, va mucho más allá de esos episodios tristes y exasperantes: se concreta en obra pública y vialidades, en pensión para adultos mayores, en promoción del desarrollo económico incluso en tiempos de crisis, en útiles escolares gratuitos, en la fundación de universidades, en cultura y recreación para las mayorías depauperadas, en dignificación de las personas. No es fácil eludir el nudo en la garganta cuando uno se entera que en el Festival por los Derechos LGBT (Lésbico, Gay, Bisexual, Travesti, Transexual y Transgénero), que tuvo lugar el sábado anterior en la glorieta del Metro Insurgentes, el Gobierno del Distrito Federal mandó poner una manta con esta leyenda: “Sal del clóset, el GDF te apoya”.

El hecho es conmovedor, en primer lugar, por razones locales: hasta hace cosa de una década, la autoridad capitalina, representada en patrullas de policía, no tutelaba los derechos de los ciudadanos no heterosexuales, sino que se dedicaba a cazarlos en razzias infames, a extorsionarlos en las barras del Ministerio Público, a tolerar y alentar la discriminación de género y de preferencia sexual, a sospechar por inercia que cualquier homosexual asesinado en un crimen de odio se merecía la muerte. Esos hábitos mentales horrendos distan mucho de haber sido erradicados de los niveles inferiores de la administración, pero se ha operado una revolución en las tendencias generales de la autoridad capitalina que obedece a la transformación cultural y cívica de la ciudadanía y acusa recibo de las añejas luchas sociales. El Distrito Federal conmemoró en abril pasado el segundo aniversario de la despenalización local del aborto. En los 28 meses transcurridos desde esa reforma legal histórica, la sociedad no se ha caído a pedazos, como auguraban los jerarcas eclesiásticos de varias religiones, las cifras de interrupción de embarazos no deseados se mantienen estables y siguen sin abrirse los restaurantes en cuyas mesas, según los peores augurios, habrían de ofrecerse fetos al orégano. En cambio, miles de mujeres se han salvado de una muerte injusta y estúpida, de las secuelas irreparables que solían dejar los abortos sucios de la vieja clandestinidad, y de la imposición, en sus vidas, de transformaciones indeseadas, prescritas por una moralina hipócrita y rancia.
Sin caer en la autocomplacencia y cerrar los ojos ante los rezagos, las insensibilidades, las injusticias y las corruptelas que prevalecen en las oficinas públicas del Distrito Federal: cuando la autoridad pública envía un mensaje de aliento y respaldo a un sector de la población que ha sido perseguido, despreciado y encarnecido por siglos, es momento de ver lo que hemos logrado. La opción preferencial por los diversos, por las oprimidas, por los desampara- dos de la economía y por los discriminados, es un logro institucional histórico del que pueden enorgullecerse los chilangos. Sería mezquino atribuir la obediencia de ese mandato social a uno solo de los gobiernos de izquierda que han administrado la ciudad a partir de 1997: todos ellos, independientemente de simpatías personales o de desvíos lamentables de sus protagonistas, ha hecho su contribución.

Esta manera humanista de gobernar es una seña inequívoca de diferencia frente a los gobernantes reaccionarios federal y locales –panistas y priístas son básicamente lo mismo– que pretenden negar, como si siguiéramos en el Virreinato, la soberanía personal y los derechos básicos (empezando por los reproductivos) de los individuos, que se roban el dinero de la obra pública y los programas sociales y que dejan al arbitrio de la beneficencia privada el reparto de patitas de pollo para que subsistan los más hambrientos.

Más allá de episodios miserables, está a la vista la diferencia de actitudes entre la siempre insatisfactoria y exasperante izquierda y una derecha multicolor que existe para el beneficio personal de sus miembros y para preservar el poder y el principio de autoridad. En quince estados de la República los legislativos estatales han creado o reforzado prohibiciones totales contra el aborto que, entre sus consecuencias más extremas, llegan a condenar a las mujeres violadas a escoger entre la cárcel o una maternidad forzada. Y todavía los panuchos, los tricolores y los verdes, se dan el gusto de horrorizarse ante los talibán afganos por lindar con la barbarie. Qué diferencia.

navegaciones@yahoo.com - http://navegaciones.blogspot.com

¿Salomónica decisión para Miguel Hidalgo?

Con sazón priísta se cocina solución en el TEDF

Miguel Ángel Velázquez
Será este fin de semana o en los primeros días de la que viene, pero no después, que el Tribunal Electoral del DF decida, ojalá con base en las pruebas que se le han presentado, el futuro político en las delegaciones Cuajimalpa y Miguel Hidalgo, pero sin trampa. Y esto porque en las entrañas del tribunal corre la especie de que, ante la imposibilidad de dejar pasar todas la anomalías cometidas por Demetrio Sodi, se piensa en descalificar también a Ana Guevara.

Hay quien dice que la suerte de esas dos demarcaciones ya está echada, que no habrá perdón para Demetrio Sodi en Miguel Hidalgo y que Cuajimalpa se quedará en manos azules. Las consideraciones hechas por los jueces de ese tribunal para el caso Miguel Hidalgo, así como hasta hoy se conocen, dejarían fuera a los panistas de la competencia, que tendría que reponerse en el bastión azul del poniente de la ciudad.

Resulta que las investigaciones del equipo legal de Ana Gabriela Guevara hallaron, hasta donde se nos hizo saber, más pruebas de las marrullerías que utilizó Sodi para lograr los votos que ni su campaña ni su experiencia le podían conseguir.

Para nadie resulta nuevo saber que la experiencia de que tanto presume Sodi empieza por el conocimiento profundo de cómo comprar voluntades y ésas, junto con otras linduras del mismo tipo, son las razones que usó el PAN para designarlo su candidato, amén de que sabían que dentro del panismo en el DF no existía un candidato con fuerza para una elección a favor, así que hicieron caso de la vieja conseja que dice: “más vale maña que fuerza”, y lanzaron a Sodi.

Lo que no previeron es que del otro lado un buen número de expertos lo vigilaban, que en algún momento las triquiñuelas quedarían a la vista de todos y serían remitidas al juicio del tribunal. Eso fue lo que pasó y es lo que tiene cada vez más preocupados a los azules.

Resulta que entre las pruebas de última hora que presentó el equipo de Ana Guevara está el dato irrefutable del juego sucio. Hasta donde se sabe, Sodi entregó 24 mil becas, de 800 pesos mensuales cada una, para jóvenes de la delegación, mismas que se harán válidas a partir del día primero de octubre. En pocas palabras, condicionó la ayuda al voto, es decir, si él no ganaba la elección las becas no podrían hacerse efectivas.

De ese tamaño se las gastaron los azules, que como se ha visto buscan quedarse en la delegación a como de lugar, aunque la población que pretende gobernar sepa que el panismo jugó sucio y no resulta confiable, lo que, como es obvio, le dará un muy pequeño margen de maniobra política a Sodi de la Tijera.
No obstante, sumergidos en la ilegalidad que les proporcionó 2006 y el tribunal electoral, los azules esperan que los jueces les favorezcan una vez más, y sin el menor recato consideran que los hechos que se les han presentado no son más que una travesura sin consecuencias.

Del lado de Gabriela Guevara se dice que esos mismos jueces no podrán obviar el número de actos ilegales que se cometieron en la delegación, que sería un suicidio político para la instancia de justicia electoral no declarar nulas las elecciones y descalificar al PAN en una nueva contienda.

Lo que no se tiene en cuenta en el cuartel de la Guevara es que dentro del tribunal hay corrientes que buscan impedir, a cualquier costo, que la delegación se pinte de amarillo, y que se han buscado todas las formas para perjudicar a la candidata del PRD.

De esa manera no sería extraño que los magistrados consideraran que la entrevista que concedió Ana Gabriela a un canal deportivo se sumara a los gastos de campaña de la corredora, lo que daría como resultado que ella también habría rebasado las erogaciones permitidas y su candidatura tendría que ser anulada, con lo que en una nueva contienda por la Miguel Hidalgo no se contaría con el PAN ni con el PRD.

La salomónica decisión, que dicen se cocina, cuenta con el sazón del PRI –se asegura que las más altas instancias del tricolor impulsan la idea de alguno de los magistrados–, que ya saborea el plato. Según los enterados, el fallo de esa manera haría que el tribunal se lavara la cara frente a la gente y en cumplimiento con sus compromisos. De lo que no se quieren dar cuenta es que, a estas alturas del camino de la ilegalidad, nadie se chupa el dedo. Así que cuidado, mucho cuidado.

De Pasadita

La noche de ayer, en reunión urgente del gabinete de trabajo de Marcelo Ebrard, se expuso con todos los datos y dramatismo el tema de la escasez del agua en el DF. El asunto es tan serio que será el gobierno de la ciudad el que empiece por establecer una estrategia de ahorro, en todas sus instalaciones. Lo malo es que en esa tarea, al parecer, no se tiene el apoyo del gobierno federal, que cuenta con un sinúmero de instalaciones en la ciudad. Si no hay ahorro, de enero hasta abril del año próximo las consecuencias serán terribles. Ojalá y la estrategia funcione.

ciudadperdida_2000@yahoo.com.mx • ciudadangel@hotmail.com

Rituales macabros. Editorial EL UNIVERSAL

Nuestra sociedad se va deslizando vertiginosamente de lo violento hacia lo siniestro. La guerra entre las hordas criminales ha permitido la ostentación de las mentes más desquiciadas y ha creado el contexto idóneo para que éstas den rienda suelta a su locura.
Los tétricos rituales incrementan su parafernalia con el tiempo: un día lanzan siete cabezas en un bar de Michoacán, otro día sumergen personas en tambos con cemento, más tarde un individuo confiesa haber desintegrado en ácido a 300 cadáveres. La carrera por hacer desaparecer al rival no conoce límites.

Apenas ayer nos encontramos con la noticia de que aparecieron pedazos de rostro, ojos, brazos, piernas y demás fragmentos de personas mezclados con carne de cerdo; una combinación destinada a mandar sabe Dios qué mensaje. A golpe de tan funestas noticias México se volvió un país en donde todo esto puede ocurrir sin despertar ya el asombro. Desde las muertas de Juárez hasta los desmembrados de ayer se traza una geometría en la que los asesinos en serie, los dementes sin remedio, los adictos a la violencia, los narcos, los secuestradores y los rateros se mezclan en una incontenible espiral de destrucción de lo humano.

Frente a esta realidad ya no basta con discutir acerca de la legalidad, las instituciones, la democracia, los derechos y otros conceptos propios de una sociedad con una base mínima de cordura. Esta circunstancia sin civilización ni norma habla de una ruptura del sujeto que actúa en sociedad mucho más honda de lo que estamos dispuestos a aceptar. Sus efectos sobre las poblaciones son aún incalculables, antropológica y sicológicamente hablando.

El ritual de lo macabro en México necesita urgentemente de un punto final.

Peor imposible. Ricardo Rocha


No es, por desgracia, una paráfrasis de aquella comedia cinematográfica deliciosa. Esto es tragedia.


Y es que justo hoy, a mitad del camino del gobierno de Felipe Calderón, nuestra situación como país no podía ser más desastrosa.


Ni pa’ dónde hacerse: en lo económico somos el más deficiente; el que peor ha enfrentado la crisis; el que caerá este año a un abismo de decrecimiento de hasta dos dígitos; el de 3 millones de desempleados, entre ellos 900 mil jóvenes tentados por el narco; el de casi 7 millones de mexicanos en cartera vencida, que no pueden pagar sus deudas porque se quedaron sin trabajo o simplemente el dinero ya no les alcanza.


Lo peor es que esa gigantesca Corte de los Milagros en que se convirtió a gran parte de la población ha de soportar cada día no sólo su pobreza, sino —en la acera de enfrente— la ineficiencia y el despilfarro de los poderosos: un gobierno que en sus primeros tres años ha incrementado su deuda interna y externa en un billón 150 mil 670 millones de pesos para llegar a una deuda global que ahora asciende a más de 4 millones de millones 500 mil millones de pesos.


En paralelo crece también el número de pobres —60 millones de un total de 107—, de los que 25 millones están en lo que las mañas eufemísticas oficiales denominan pobreza extrema y que en cristiano se llama miseria.



Lo más grave es que no hay la menor señal de quienes gobiernan sobre el reconocimiento de que el modelo neoliberal está colapsado. Mientras en el mundo todos lo han asumido aquí seguimos más fondistas que el Fondo y más banquistas que el Banco. Vaya, ni siquiera podríamos decir que seguimos genuflexos frente al Consenso de Washington porque a ese altar ya le cambiaron de santito.

Ahora el gobierno de mister Obama es socio de bancos, automotrices e hipotecarias para traerlos cortitos. Y ha dicho que “no se puede sustentar el desarrollo sobre los que menos tienen”; al tiempo que impulsa revolucionarios sistemas de crédito y de salud para reactivar la economía doméstica. Aquí, en cambio, el gobierno quiere minimizar el mercado interno y sigue pensando que apoyar a los pobres es populismo, mientras que favorecer a los ricos con escandalosas devoluciones de impuestos es rescate.


En suma, un estilo cavernario que en lugar de la inteligencia aplica el garrote lo mismo para combatir al crimen organizado que para mantener una paz cada vez más precaria y a cualquier precio.


Por eso, en lo social, todos hablan cada vez con más naturalidad de un estallido. Que, por si no lo saben, podría ser de proporciones desastrosas.

Subirían energéticos para tapar el boquete financiero

Provocarán irritación y descontento social, advierten senadores del PAN

Víctor Ballinas y Andrea Becerril

El secretario de Hacienda, Agustín Carstens, confirmó anoche a los senadores del PAN que el gobierno federal propondrá un incremento a las tarifas de electricidad, gas, gasolina y los demás servicios públicos para 2010, como parte de las medidas para cubrir el “boquete” de 300 mil millones de pesos en las finanzas gubernamentales.

El funcionario les recalcó que esa alza de tarifas –incluye peajes carreteros– permitirá al gobierno federal obtener 140 mil millones de pesos el próximo año, a los que se sumarían 20 mil millones que pretenden obtener vía mayor eficiencia en la recaudación.

La propuesta de Carstens no fue bien recibida por la mayoría de los senadores panistas, quienes de acuerdo con versiones de varios asistentes al encuentro le dijeron que tal medida provocará irritación y descontento social, además de presiones inflacionarias.

Sin embargo, el secretario de Hacienda insistió en que no hay otra salida y enumeró que el gobierno federal podría obtener otros 100 mil millones de pesos, vía endeudamiento, y los restantes recursos para cubrir el hoyo financiero a través de ahorros en el gasto público, la eliminación de gastos superfluos, pero también recortes de “personal innecesario” en la burocracia.

Entre reclamos y cuestionamientos de los panistas, la reunión se prolongó casi cuatro horas, en las que Carstens perfiló el paquete presupuestal que hará llegar el Ejecutivo al Congreso el próximo 8 de septiembre. Por su parte, los legisladores del blanquiazul rechazaron toda intención de aumentar impuestos y de incrementar las tarifas de bienes y servicios.

Los legisladores le exigieron al funcionario que haya realmente eficacia en la recaudación, se eliminen los regímenes especiales y se fiscalice el gasto de los gobernadores y presidentes municipales, a quienes se destina 60 por ciento del presupuesto. Su reclamo fue que Hacienda exija a los mandatarios estatales que vendan aviones, camionetas de lujo, y que también “se sacrifiquen”. Inclusive, algunos se manifestaron por que realmente se envíe a la cárcel a los evasores de impuestos.

En privado, los legisladores Rubén Camarillo, Adrián Rivera y Eva Contreras advirtieron que no van a aprobar una reforma fiscal sin conocerla a fondo, mientras otros reclamaron que Carstens no se hubiese reunido antes con ellos. Al final, en entrevista, el secretario de Hacienda sostuvo que el encuentro fue oportuno, de diálogo franco y abierto sobre la problemática que enfrenta el país.
“Yo les comuniqué las diferentes opciones que está analizando el Presidente para enfrentar el problema fiscal y, sobre todo, la creación de empleos y el abatimiento de la pobreza”. Reconoció que debió responder cuestionamientos y tomar nota de las sugerencias de los senadores del PAN.

Dijo que se hizo mucho énfasis en el recorte del gasto y en la recaudación, sin entrar en detalles, pero les pidió mantener estrecho contacto para continuar la revisión de las propuestas que se presenten.

Durante el encuentro, el funcionario detalló que la propuesta de Calderón parte de un crecimiento económico de 1.8 por ciento y un precio del barril de petróleo de 53.80 dólares. En cuanto al endeudamiento, les explicó que van por un déficit razonable, ya que algunas propuestas que se han escuchado de llevar ese endeudamiento a tres o cuatro puntos pondrían en riesgo la calificación de país en el ámbito internacional. Por ello, los escenarios que se analizan para solventar el hoyo fiscal en el paquete económico 2010 son: elevación de tarifas de bienes y servicios públicos, contratación de deuda, disminución del gasto y consolidación fiscal.

Los legisladores le demandaron un informe puntual de la recaudación por IETU, ISR e IVA, así como una explicación de los precios del petróleo, porque no quieren que ocurra lo de este año, que se calcularon mal.

Por la mañana, los senadores se reunieron con el presidente nacional del PAN, César Nava, quien les pidió apoyar las propuestas económicas que va a enviar Felipe Calderón al Congreso, y subrayó que no es momento de pugnar por el IVA en medicinas y alimentos ni nuevos impuestos.

Ahí, Nava manifestó a los legisladores que es necesario privilegiar la austeridad, recortar gastos innecesarios en todos los niveles de gobierno y sacar adelante las reformas estructurales. En el encuentro, el presidente nacional panista fue informado por los senadores que trabajan en un análisis para determinar por qué perdió las elecciones el PAN. “No fue por mala selección de candidatos, de eso estamos ciertos; puede ser que no hubo suficiente apoyo federal y hay que analizar si apoyamos al Presidente y si las políticas nos apoyaron”, dijeron.

Al final, en entrevista, Nava insistió: “Las familias mexicanas han sufrido ya los embates de la crisis económica, han sacrificado sus ingresos y han visto el impacto directo en sus bolsillos. No es el momento de pedirles más sacrificios”.