lunes, 15 de agosto de 2011

¡Ya chole con lo de Chaires!: Moreira


No soy el único rata, expresa entre líneas
 Redacción SDPnoticias.com

2011-08-15 16:35:00

Ciudad de México - El dirigente nacional del PRI, Humberto Moreira, se exasperó y exigió que ya no se hable del tema del enriquecimiento inexplicable de su colaborador Vicente Chaires.

"Yo espero que los legisladores ya saquen ahora el miércoles lo del tema de Chaires porque ¡ya! ¡Ya chole, a otro perro con ese hueso!" dijo Moreira de acuerdo con Reforma en conferencia de prensa cuando se tocó el tema de su colaborador, quien pese a haber tenido sólo puestos de de subalterno de Moreira, inexplicablemente ahora es millonario empresario de medios.

Según Moreira, el caso Chaires sólo ha sido un pretexto para golpear su imagen al calor de las elecciones de Coahuila para la gubernatura.

Moreira insistió en que el tema de Chaires es "polvos de aquellos lodos electorales" y alegó que sólo se habla del caso Chaires pero no de los vínculos de panistas con personajes del crimen organizado.

"Porque los polvos de aquellos lodos, de los aspirantes del PAN, no salen en ningún lado, cuando sí son graves aquellos vínculos con los mañosos y todo lo que salió y eso no lo hacen público", dijo Moreira.

El priista asegura que el escándalo por el caso Chaires es sólo en respuesta de caracter personal a las críticas que él ha realizado sobre temas nacionales.

AMLO : Mensaje del 15 de Agosto del 2011

Solicitud de ayuda


Metida de pata


"¡Que pase el agraciado!" Julio Hernández López

Astillero
Precandidatura ominosa
Corderón y Caldero
Ni besos ni abrazos...



Foto
GRANADAZO EN EL ACUARIO DE VERACRUZ. Socorristas atienden a víctimas heridas tras la explosión de una granada, que ocurrió a unos metros del acuario del puerto de VeracruzFoto La Jornada
 
Dado que, en caso de prosperar, constituirá la candidatura oficial de un grupo que en 2006 se hizo del poder mediante la abierta intervención del aparato gubernamental y a través de mecanismos de adulteración del proceso electoral, resulta particularmente ominosa la manera en que el calderonismo está construyendo, a marchas forzadas y sin mínimo cuidado de las formas políticas, la postulación presidencial del actual secretario de hacienda, Ernesto Cordero, personaje nada carismático, política e ideológicamente fofo, con facha de estar predispuesto a la manipulación de su jefe actual y con un evidente alto grado de dificultad para ser promocionado como genuina alternativa presidencial para el México de hoy.
Para empezar, Cordero corre en carriles sumamente polémicos, contrario su movimiento a principios éticos pero también susceptible de indagación y eventual castigo en el ámbito de los delitos electorales. Siendo secretario de hacienda, y en ejercicio de recursos públicos para sus traslados, actividades y protección, Ernesto Cordero aprovecha presuntas horas libres para realizar actividades de proselitismo partidista durante sus giras oficiales. Y, en sentido contrario, resta tiempo, atención y capacidad a sus tareas de secretario de hacienda (hoy tan importantes y trascendentes, en razón de la crisis mundial que se vive), por estar pensando y actuando como precandidato presidencial.
A ese evidente conflicto de intereses suma el impensado Cordero la descarada tarea de inflado desde cero que los gobernadores panistas están realizando en sus entidades, utilizando los programas sociales del gobierno federal como gancho persuasivo para llevar gente a los actos del precandidato desconocido, al mejor estilo del peor PRI: cargada, acarreo, tortas y refresco, pase de lista, castigo a los ausentes, funcionarios gubernamentales habilitados como operadores partidistas y dinero público para financiar esos actos. Este sábado le tocó a Guillermo Padrés, el gobernador de Sonora, echar el erario por la ventana para juntarle unas 6 mil personas en Hermosillo al todavía destanteado Cordero. Ayer fue en León donde el mandatario guanajuatense, Juan Manuel Oliva, se encargó de cumplir con las instrucciones centrales de arrimarle miles de presuntos simpatizantes al deslumbrado cachorro de Los Pinos que apenas unas horas después de darse esos baños partidistas se presentó en conferencia de prensa en la ciudad de México, ya habilitado como secretario de hacienda, para exprimir el cargo en términos de imagen personal, anunciando medidas y acciones sin mayor interés que el de posicionarlo como presunto heredero designado del poder felipista, en una cesión escenográfica mediante la cual el jefe formal, Felipe, deja los reflectores al delfín de apellido Cordero.
Contra esas maniobras de la dupla Corderón-Caldero se ha manifestado Santiago Creel, quien ayer fue a San Francisco del Rincón a buscar a su jefe de ayer y hoy, Vicente Fox, para trazar el camino de retorno del esposo de la señora Marta a la política panista, en específico al apoyo de quien fue su secretario de gobernación. Creel ha ido acerando su discurso, señalando una serie de circunstancias negativas que se ajustan a lo que están haciendo Felipe y Ernesto aunque sin citarlos por nombre. Fox y Creel quieren la revancha, pues en 2005 no pudieron quedarse con la postulación panista y debieron dar paso al rezagado Calderón que desde entonces recibió ayuda electoral de las brigadas Gordillo.
En la capital del país, Josefina Vázquez Mota realizó un peculiar informe de labores, enlistando avances logrados en la Cámara de Diputados como si provinieran de su iniciativa personal, siendo que muchos de ellos fueron empujados por PRI y PRD y siendo que el propio papel de la autora de Dios mío, hazme viuda por favor ha sido entre discreto, ausente y falto de compromiso real, atenta más la ex secretaria a no moverse en demasía para no generar olas que pudieran ahogar su hasta ahora imprecisa precandidatura, que igual puede servir para canjear posiciones federales a futuro (como lo hace el gobernador de Jalisco, imposible candidato que junta fichas para canjearlas en el casino 2012) o para ceder el paso a alguna propuesta femenina final del gerente Calderón.
En la vertiente poética de la política, Javier Sicilia encabezó una marcha a Los Pinos y el Senado, en demanda de que no se aprueben las reformas a la Ley de Seguridad Nacional actualmente a discusión. Además, se anunció que esta semana se reanudan los diálogos con el Poder Legislativo y se conminó a la delincuencia del horror a que deponga las armas y deje de actuar con crueldad y odio. En el camino, ese movimiento escuchó un coro proveniente de algunos de quienes participaban en un acto del colectivo No más sangre: ¡Ni besos ni abrazos acaban los balazos!
Astillas
De Laura de América a Felipe de México, en proceso descendente e inverso. En los prefabricados Diálogos consigo mismo (oficialmente denominados Ciudadanos), Calderón dice Que pase el agraciado y los participantes se pelean (es un decir) por felicitar al gran gobierno federal y sus excelentes programas a los cuales encuentran algunos detalles negativos que de inmediato son atendidos por el buen señor de Los Pinos... Santiago Creel dijo el sábado anterior a panistas de Lagos de Moreno que haberle puesto ese nombre al PAN sí tuvo razones gastronómicas. Relató que cuando él tenía trece años preguntó a Manuel Gómez Morín el sentido de las siglas del partido de blanco y azul pero, explicó Creel: Yo era un chamaco, pues no le entendí. Entonces se voltea y me dice: se me hace que no me estás entendiendo verdad; y le dije, don Manuel, no le entiendo y me dijo: Te lo voy a explicar de otra manera, le pusimos PAN al PAN porque México tiene mucha hambre (http://j.mp/qU1ED5 )... Y, mientras Cuauhtémoc Cárdenas asegura que el gobierno actual entregó el país a Estados Unidos, ¡hasta mañana, en espera de los siguientes diálogos del carrusel, dentro de dos semanas con Carpizo-UNAM!

Intrusión-Hernández


La mano dura con copete-Rocha


¡ No + sangre !

Calderón no entiende ...

“Si los narcos quieren más Ejército, se los envío, no me voy a dejar”

Dialoga Calderón con televidentes
Periódico La Jornada
Lunes 15 de agosto de 2011, p. 7
A unos días del quinto Informe de gobierno, la Presidencia de la República difundió ayer por la noche, a través de Canal 11, el programa Diálogo ciudadano, con el presidente Felipe Calderón, en el cual durante una hora el mandatario federal escuchó y respondió preguntas y peticiones de diversos temas que le formularon ciudadanos.

Juan Antonio Yáñez Palafox, de Torreón, Coahuila, preguntó a Calderón cómo mejorar la calidad de vida. El mandatario le respondió que una de las cosas a hacer ahí es mejorar la seguridad. “Torreón es una ciudad muy próspera, pero se ha visto afectada. Ahí hay un par de mafias: Los Zetas y gente de El Chapo. Exíjanle a sus gobernadores, a mí, a sus legisladores, a sus jueces, que cumplamos.”

Eleuterio de la Cruz, indígena huichol de Wirikuta, en San Luis Potosí, preguntó sobre la pavimentación de la carretera Ruiz-Zacatecas, sobre el Fondo Wirikuta y la protección a 42 mil hectáreas de reserva. El Presidente dijo que la carretera avanza en obra y ya se inauguró un tramo. Le informó que instruyó al titular de Comunicaciones y Transportes para “que se apure; espero terminarla en mi sexenio”.
A su vez, el Ejecutivo preguntó a su interlocutor: “¿Son 42 mil hectáreas de Wirikuta como reserva?”. Sí, le respondió De la Cruz. “Está grande entonces Wirikuta. Veremos que se proteja el área, que no entren depredadores.”

Carlos Alberto Garibay, de Sonora, le preguntó: “¿Por qué hay tanto narcotraficante?” Calderón le respondió: “Es difícil la respuesta a eso. Hay mucha gente mala. Esto se ha incrementado. Antes, el narco sólo pasaba la droga a Estados Unidos, pero de unos años para acá ya no les interesa sólo pasarla, sino venderla en México. Los narcotraficantes quieren tener control territorial, controlar las tienditas, los table dance, los centros nocturnos de buena y mala fama; quieren amenazar, extorsionar. Si entra otro grupo a la región, se matan entre ellos por la plaza.

“Estados Unidos también es culpable por su consumo de drogas y sus armas. Hemos decomisado 110 mil armas. Vamos a combatirlos con todo (a los narcos). Si quieren más Ejército, más Marina o más Policía Federal se las envío, pero yo no me dejo y no me voy a dejar, tenemos que acabar con esas lacras.”

AMLO: aguantamos la andanada oficial y traición del PRD

La cúpula del sol azteca sólo tiene el cascarón de la institución
En el interior, las bases dan su apoyo a Morena
Los autores del fraude ahora buscan imponer a Peña Nieto
Ebrard está en su derecho de aspirar; es un buen gobernante
Quizás soy el político más atacado; no soy como me pintan
Calderón, un inepto e irresponsable

Foto
Hoy el Morena “representa más que los partidos de izquierda”

Se equivocaron al pensar que nuestro movimiento no tendría futuro: AMLO
“Dentro del PRD las bases están con nosotros; sus dirigentes tienen el cascarón”


Foto: Carlos Ramos Mamahua
Rosa Elvira Vargas
Enviada
Periódico La Jornada
Lunes 15 de agosto de 2011, p. 2
Fortín de las Flores, Ver. La idea de crear un movimiento nacional ciudadano al margen de los partidos que impulsaron su candidatura a la Presidencia en 2006 surgió en Andrés Manuel López Obrador durante el plantón de Reforma. “Pensé que los dirigentes (del PRD, sobre todo) no iban a aguantar ni a resistir las presiones del gobierno y que nos traicionarían. Por eso rechacé ser coordinador del Frente Amplio Progresista y en buena medida por eso acepté la ‘presidencia legítima’. Sabía que nos darían la espalda, como sucedió.”

Convencido de tal razonamiento, hoy encara a sus compañeros en ese viaje político: “se equivocaron al pensar que lo nuestro no tendría futuro, que no aguantaríamos la andanada del régimen y que les convenía más deslindarse de nosotros, como lo hicieron y lo siguen haciendo. Se equivocaron porque hoy Morena (Movimiento de Regeneración Nacional) representa más que esos partidos de izquierda”.

Afirma tajante: “dentro del PRD, las bases están con nosotros. Sus dirigentes tienen los aparatos, el cascarón, pero Morena tiene vida propia”.

Se trata de un esfuerzo que, dice, “ha costado mucho”, y en pos del cual prácticamente no se ha detenido un solo día en estos cinco años.

Ha recorrido el país completo varias veces e invirtió dos años en visitar los 2 mil 38 municipios de elección directa y los 418 oaxaqueños regidos por usos y costumbres, y en más de una ocasión ha encabezado mítines en las plazas públicas de casi todas las ciudades y pueblos de la geografía nacional.

Para esa labor política virtualmente no dispone de recursos económicos y a lo sumo recibe aportaciones de diputados del Partido del Trabajo, de Convergencia y acaso de algunos del PRD. Salva por avión sólo las grandes distancias entre el Distrito Federal y los estados lejanos señalados en su agenda, pero sobre todo se mueve por carretera.

Viaja para promover la conformación del Morena y no disimula su optimismo por esta organización. Será, asegura, la “más importante en la historia de México, como no la ha tenido jamás ningún partido de izquierda” en este país.

Su propósito, remacha, es construir un movimiento “para transformar al país, para derrotar a la oligarquía en buena lid, de manera pacífica, establecer una verdadera democracia y enfrentar los grandes problemas nacionales. Prácticamente ya lo tenemos, ¡por eso no dejan de atacarme los voceros de la mafia del poder!”

López Obrador habla con La Jornada en el bello Fortín de las Flores –conurbado a Córdoba– y detalla su proyecto político, habla de la tragedia nacional derivada de la violencia, evalúa su gestión al frente del Gobierno del Distrito Federal e incluso ofrece algunos datos sobre su ámbito privado.

Así, de las expresiones referidas a su labor en la ciudad de México sobresale el porqué se decidió no cobrar por el uso del segundo piso del Periférico: “la gente ya paga impuestos”.

Asimismo, y apenas en un paréntesis suelta algunas frases sobre sí mismo, pues “un político no debe mezclar sus asuntos personales y públicos, más aun cuando se está tan expuesto”.

López Obrador insiste en su determinación de no pelear ni responder a los líderes del PRD o a los políticos “robaleros”, expresión con la que alude a quienes, como el robalo –dice–, se mueven en dos aguas. “Si peleo con ellos, le hago un favor a la mafia del poder. No contesto porque estoy trabajando en la construcción del movimiento, tengo esa responsabilidad.”

Tampoco quiere confrontar al cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Iñíguez, de quien ahora se sabe, gracias a los cables difundidos por Wikileaks (en La Jornada), que solicitó en 2006 la intervención del gobierno de Estados Unidos en su contra, ni refutar al escritor Carlos Fuentes, quien hace unos días marcó su preferencia por la eventual candidatura presidencial de Marcelo Ebrard.

“¿Qué debo decir más allá de respetar su opinión? Mi situación es muy difícil, porque cualquier cosa que yo diga ayuda a ciertos medios de comunicación a desacreditarnos.”

No parece tratarse de un gesto de desinterés o ingenuidad, pues de inmediato acota: “Tengo la vista puesta en los 30 –para él, quienes conforman la oligarquía nacional–, pero con el rabo del ojo estoy viendo a los otros. Veo a aquellos sin dejar de fildear, como se dice en el beisbol”.

Y es precisamente en los jardines donde ubica las repercusiones del acto realizado el pasado 31 de julio por la corriente perredista Nueva Izquierda (los chuchos) para apoyar las aspiraciones de Ebrard Casaubón:

“Es la más reciente manipulación de la clase dominante contra nosotros. Han empezado a decir que no respetaré el resultado del sondeo. Para empezar, en ninguna encuesta aparezco abajo en la pregunta de quién debe ser el candidato de las fueraza progresistas. Insisto: respetaré el acuerdo y será candidato el mejor ubicado. Pero el tema no es ése, sino que la mafia del poder y sus secuaces no quieren ver mi nombre en las boletas del 2012.”

Por lo demás, apunta, “Marcelo está en todo su derecho; es un buen amigo mío y lo considero un buen gobernante”.

–Mucha gente se desespera. No ve evolución en su discurso, en sus propuestas…

–Lo primero es que no se acepta mi punto de vista y no se internaliza porque choca con esquemas mentales prestablecidos. A lo sumo, los más benévolos lo ven superficial, lo batean, como se dice en el argot. Y a los de mentalidad reaccionaria, les molesta.

“Se olvida que a diferencia de un escritor o de un intelectual, un político tiene que repetir su discurso porque su objetivo es penetrar, formar, y más aún en las circunstancias actuales, donde no se garantiza el derecho a la información ni hay posibilidades de transmitir un pensamiento distinto porque los medios de comunicación están controlados por la clase dominante”.

En este punto, López Obrador se solaza sobre las diversas denominaciones que podría dar a los poderosos. “Me gusta más llamarles mafia, porque generalmente el término se usa con las bandas del crimen, del robo, pero no cuando es para hablar de los delincuentes de cuello blanco. ¡Y son iguales!

“Con mafia del poder caracterizo a un grupo que se ha apropiado de todo, que ha convertido lo ilegal en legal, ha llevado al país a la ruina, es responsable de la tragedia nacional, y ni siquiera por eso sus integrantes pierden respetabilidad.”

La ausencia de espacios para difundir su movimiento en los medios masivos de información y los denuestos que éstos le dirigen constantemente son temas recurrentes en la entrevista.

–Decía Carlos Monsiváis que desde Francisco I. Madero nadie como usted había sido agredido con tanta saña en México.

–Posiblemente soy en este país el político más atacado. Está mal que hable de eso, pero no soy como me pintan, han creado un estereotipo.

–¿Ha permeado eso en la gente?

–¡Claro! Ellos tienen los medios de comunicación y pueden crear una imagen en función de los intereses que representan. Es impresionante cómo han manipulado mi manera de ser y mis actos.

“Pese a esta campaña, no han podido destruirme. Pero hay gente susceptible de manipulación, y aquí no me refiero a la gente humilde, sino a muchos incluso con posgrados, a los adictos, por ejemplo, a los noticiarios de Televisa. Ellos están más dispuestos a ser manejados que un campesino o un obrero aficionado a estaciones de radio como La Z o la Ke Buena.”

Para ubicar cómo se tergiversan sus acciones e iniciativas políticas, López Obrador habla de lo ocurrido en Iztapalapa en 2009, con Rafael Acosta, Juanito. “Se insiste en que lo impuse, cuando lo verdaderamente importante es cómo, en 15 días, la gente votó por él para lograr por esa vía la llegada de Clara Brugada, a quien realmente querían como jefa delegacional.

“Entonces Televisa agarra el tema, me tilda de autoritario y da la vuelta al asunto verdadero: que la gente fue capaz de derrotar la imposición del tribunal electoral...”

–¿Eso ocurrió también durante el plantón de Reforma? ¿Ubica a los críticos de entonces como quienes hoy aplauden a los indignados en España?

–¡Sí, son los mismos! Porque son muy falsos y manejan un doble discurso: aparentan ser demócratas sólo en tanto no se afecten sus intereses, su forma de pensar. Me acusan de intolerante, pero ellos lo son más. Durante el plantón llegaron a acusarnos de antidemocráticos, cuando ¡nos habían robado la Presidencia! Si no hubiésemos actuado como lo hicimos, se habría generado violencia.

–Sectores de izquierda todavía le reprochan no haber ido más allá.

–Hubo quienes pedían apretar más, casi tomar las armas, y otros, que claudicáramos. Hoy se dice: “si López Obrador hubiese aceptado su derrota, estaría en los cuernos de la luna”. Pero actué como lo consideré más adecuado.

“Pero me siento satisfecho. La violencia no hubiera resuelto el problema. Ahí está el ejemplo de Egipto: 800 muertos, y el resultado es una junta militar en el gobierno y una revolución traicionada.

“No busco eso, sino una transformación auténtica. No se trata de quitar a uno para poner a otro igual o peor. Y sí, los efectos del fraude nos dañaron mucho en lo político.”

–¿Qué país, qué sociedad quedó después de 2006?

–El fraude precipitó la crisis. Sin esa imposición, nosotros hubiéramos realizado los cambios necesarios, pero al contrario, con Felipe Calderón se mantuvo el mismo régimen, la política de saqueo y de corrupción.

“Por si fuera poco, hoy quieren (los autores del fraude) mantener el actual estado de cosas y no están dispuestos a cambiar. Actuaron de manera perversa porque no les importó y sigue sin importarles el país.

“Buscan imponer a Enrique Peña Nieto; ya echaron a andar la operación de recambio. Como ya no les funciona el PAN ni les sirve Felipe Calderón, apuestan por el regreso del PRI, pero siempre con la idea de mantener el mismo régimen.”

–Se le critica también no enfatizar en el tema de la violencia.

–Sí lo hago, pero no lo consideran. Insisten en el uso sólo de medidas coercitivas, y yo estoy en contra de eso.

“Mi planteamiento consiste en cambiar un modelo económico con crecimiento, empleo y atención a los jóvenes. Pero eso lo ven como algo colateral. Si me conceden algo de razón, dicen: ‘sí, sí, pero eso es a mediano plazo’. Al contrario, si se va en busca de los jóvenes y se acude a sus casas para anotarlos e incorporarlos al estudio y al trabajo, el resultado se verá de inmediato. Ellos son tentados a diario para asumir conductas antisociales. Nunca hay vacíos, siempre se llenan, y si el Estado no los rescata, optarán por el camino de la ilegalidad.

“El complemento a mi propuesta es impedir la corrupción y nombrar en las instituciones de seguridad a gente honesta, que no es el caso –yo no tendría en la Secretaría de Seguridad Pública a un Genaro García Luna–, y desde luego profesionalizar a la policía, pagarle bien.”

–Hace poco se recordaba que usted también propuso llevar al Ejército a las calles...

–Sí, pero mi idea de su participación en el combate al crimen organizado tenía una diferencia central: reformar la Constitución primero y tras una consulta nacional. Hoy, su actuación es totalmente ilegal.

–¿Qué solución propone?

–Para mí, 75 por ciento de ésta consiste en crear una atmósfera de progreso y bienestar, pues la paz y la tranquilidad son frutos de la equidad y la justicia. El resto se relaciona con el aparato judicial, con la coordinación y la perseverancia.

“Cuando fui jefe de Gobierno en el Distrito Federal, diariamente acordábamos, muy temprano, con el gabinete de seguridad. Veíamos lo sucedido en las 24 horas recientes y tomábamos medidas. Se crearon 70 coordinaciones para reproducir ese sistema a nivel territorial: se reunían todos los días el Ministerio Público, el jefe de la policía preventiva del sector y de las otras corporaciones, un enviado de la Secretaría de Gobierno, y estaban también las 70 mujeres designadas por el jefe de Gobierno para representarlo ahí.

“Y dio resultado. Disminuimos los índices delictivos. En homicidios, el promedio era de dos diarios, y no puede haber cifra negra porque están las actas ministeriales. No había ajusticiamientos ni prácticamente asesinatos del crimen organizado aquí.”

–¿Comparte la censura al gobierno federal por su estrategia ante este problema?

–Felipe Calderón lo ha hecho muy mal: no ha atendido las causas, y al encarar sólo los efectos del fenómeno actúa con la ineptitud e irresponsabilidad muy propias de la derecha. Hay una contradicción en ellos, pues aseguran ser cristianos, pero olvidan el amor a sus semejantes.

“¿Calderón no advirtió el daño que causaría? ¿Cómo se lanzó a algo tan grave sin información, sin conocimiento de causa? ¿No sabía, o estamos ante una situación de irresponsabilidad extrema, que la delincuencia ya había penetrado a las policías municipales, estatales y federales? ¿No tenía un diagnóstico del tamaño del problema? ¿Ni siquiera sabía lo que iba a enfrentar?”

López Obrador regresa al Morena, la tarea que hoy ocupa todo su tiempo e interés. “Este movimiento no es únicamente para aspirar a los cargos públicos, no se agota en un proceso electoral, porque su objetivo es la transformación tajante de la vida pública, en la idea de que sólo ha habido tres en el país: la Independencia, la Reforma y la Revolución. Y nosotros queremos hacer la cuarta.”

Con esa idea, trabaja para fundar comités en las 65 mil secciones electorales y afiliar a 4 millones de quienes llama “protagonistas del cambio verdadero”.

El próximo 2 de octubre el Morena se constituirá en asociación civil. “Se construye con el esfuerzo de los ciudadanos progresistas. Hay ya dos millones de afiliados y será la organización social más importante de la historia nacional. Otras en el pasado han contribuido a transformar al país, pero, sin pretender compararnos, ésta se construye desde abajo.” Ya operan comités en todos los municipios, y se han establecido 34 mil representaciones seccionales.

–Con todo, el Morena no se ve, no aparece en los espacios informativos...

–En efecto, en los sectores medios se desconoce lo que hacemos, porque los grandes medios electrónicos no nos escuchan. Ahí es donde más se nos ataca y esto hace mella en mucha gente.

“A mí me pasa. Tengo que estar animando hasta a mis más cercanos, porque los confunden, los aturden, los desaniman.”

Insiste en que sí hay salidas, en “que podemos sacar adelante al país y que todos debemos participar y contribuir a que haya un cambio.”

López Obrador no habla mucho de ello, pero uno de sus equipos, integrado por intelectuales, académicos, políticos en activo y otros ya retirados de la vida pública, analiza la realidad nacional e internacional y ha producido el primer proyecto alternativo de nación. Tiene además la asesoría de especialistas en materia económica y financiera, con quienes prepara sus propuestas en ese renglón.

Con eso, transmite su convicción: “hay muchos mexicanos buscando opciones, alternativas. Por lo tanto, no se den por vencidos ni se depriman, pues si no luchamos, nuestros hijos nos pedirán cuentas”.

Precisamente su insistencia en aplicar políticas específicas para quienes menos tienen se basa en las de corte social que impulsó cuando fue jefe de Gobierno de la capital del país.

–¿En ese periodo cómo se relacionó con la iniciativa privada?

–Nunca tuve problemas. No hay un solo empresario que pueda quejarse de maltrato, de falta de oportunidades o de que se le pidió dinero para construir o para invertir.

Al final de la conversación, López Obrador accede a hablar de sí mismo, sólo con respuestas cortas, puntuales: “un dirigente político verdadero debe tener una doctrina, una ideología, una filosofía. No creo que sea bueno ventilar la vida personal ni mezclarla con la actuación pública”.

Se autodefine como un “luchador social, partidario de la justicia”, y dice ser cristiano “por lo que tiene que ver con la vida de Jesús”, más allá de las denominaciones religiosas.

Tres grandes pasiones hay en la vida de Andrés Manuel López Obrador y las confiesa: amor a sus semejantes, amor a sus hijos y a su familia… y el beisbol.

S.O. S. Naranjo



El rey del cateo. Helioflores