domingo, 5 de mayo de 2013

Cruzada contra el hambre, el basurero de Nestlé y Pepsico


Les presentamos aquí lo que contiene una despensa de la Cruzada contra el Hambre de Rosario Robles. Lo primero que puede verse es que, excepto la soya y la pimienta, todos los productos son patrocinadores oficiales del Teletón.

En un país que ocupa el primer lugar de obesidad infantil y la diabetes está al orden del día, la señora Robles nos ofrece productos con bajo o nulo contenido nutricional, pero además entrega una bolsa con granos de soya, ¿cómo se prepara, de qué manera se aprovecha mejor?

Por si eso fuera poco, prácticamente todos los productos están caducados. Ya decíamos que la cruzada contra el hambre era una farsa de la señora de la reputación ahumada, y eso que no sabíamos todavía que la rapacidad de las empresas patrocinadoras había llegado al grado de entregar productos caducados que, además, no saldrá gratis.

Recordemos, además, que Pepsico fue descubierta in fraganti robando luz y agua (ilícitos que fueron perdonados por el gobierno federal; no hay tos), y de Nestlé, basta recordar cómo acabó con los productores de leche de la comarca lagunera.

Recordemos también que Rosario Robles, en entrevista con Carmen Aristegui, aseguró categóricamente que lo único que proporcionaría Pepsico a la cruzada contra el hambre sería una galleta, cero refrescos. Pues aquí se cayó solita... otra vez.

Y aquí les va la lista de productos y fechas de caducidad de una grandiosa despensa contra el hambre entregada el 27 de abril de 2013 en San Martín de las Pirámides:

1 Mirinda de 600 ml, caducada el 18 de marzo de 2013.
1 Leche en polvo Nido de 840 g, caducada el 31 de marzo de 2013.
1 Paquete de harina para hacer pasteles, caducada en febrero de 2013.
2 Paquetes con 8 galletas María cada uno, caducadas en febrero de 2013.
1 Lata de duraznos en cubitos en almíbar, caducados el 16 de marzo de 2013.
1 Tableta de chocolate Abuelita, caducada el 3 de abril de 2013.
1 Sobre de pasta La Moderna.
1 Paquete de ocho sobres de Nescafé Moka.
1 Bolsa con semillas de soya, sin etiquetar (se calcula que es aproximadamente 250 g).
1 Crema para café Nestlé de 170 g.

¿Te parece que las grandes empresas evasoras de impuestos, que roban luz y agua a todos los mexicanos, pueden venir a usarnos como basureros y, además, cobrarnos por darnos sus productos chatarra caducados?

Rosario Robles merece ir a la cárcel, a todas luces, y desde esta tribuna solicitamos su dimisión de Sedesol.

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