Maestros incendian sede del PRI en Chilpancingo, Guerrero.
Foto: AP / Alejandrino González
Foto: AP / Alejandrino González
CHILPANCINGO, Gro., (proceso.com.mx).- Agentes de la Policía Ministerial y Preventiva estatal instalaron retenes en entradas y salidas de esta capital para evitar que los dirigentes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), Gonzalo Juárez Ocampo y Minervino Morán, salgan de la ciudad, informaron a Apro fuentes oficiales.
Durante la madrugada, este reportero constató que los agentes policíacos que merodean el perímetro donde se encuentra el plantón y la sede de la CETEG, sobre la calle Rufo Figueroa, al sur de esta capital, portan las fichas técnicas que incluyen fotografías de los principales dirigentes del movimiento magisterial.
Lo anterior, en acatamiento a la disposición del gobernador, Ángel Aguirre Rivero, quien desde ayer ordenó a la procuradora estatal, Marta Garzón Bernal, ejecutar las órdenes de aprehensión que existen en contra de los dirigentes cetegistas, luego de las acciones violentas protagonizadas ayer por los integrantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG), quienes destrozaron e incendiaron sedes partidistas y oficinas gubernamentales, indicó la fuente consultada.
Por su parte, el vocero de la CETEG, Minervino Morán, anunció que juntó al resto de los dirigentes del magisterio disidente, los profesores analizan la posibilidad de ampararse en contra de cualquier orden de aprehensión y advirtió que las movilizaciones del MPG continuarán durante estos días.
Incluso, este día se prevé una nueva marcha en esta capital del MPG, donde convergen integrantes del magisterio disidente, normalistas y diversos sectores sociales, para protestar en contra de la liberación de dos agentes ministeriales que estaban presos en el penal capitalino, acusados de haber asesinado a los dos normalistas de Ayotzinapa durante el desalojo de diciembre de 2011 sobre la autopista del Sol.
Los agentes ministeriales Ismael Matadamas Salinas y Rey David Cortés Flores fueron liberados este martes 23, a través de un amparo otorgado por un tribunal colegiado del Poder Judicial de la federación, por considerar que no había pruebas suficientes para inculpar a los policías por el homicidio de los normalistas Gabriel Echeverría de Jesús y Jorge Alexis Herrera Pino.
La acción impulsada por los normalistas de Ayotzinapa contempla dirigirse al punto donde fueron abatidos a tiros los estudiantes, en la parte sur de la importante vía.
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