México, DF. El representante del consorcio internacional que certificó la Línea 12 del Metro, Mario Alberto Lezama, afirmó a la Comisión de Investigación de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal que se detectó falta de mantenimiento para corregir el fenómeno ondulatorio observado, particularmente en las curvas 11 y 12, entre las estaciones Nopalera y Zapotitlán, cuando se hizo un estudio a petición del Sistema de Transporte Colectivo (STC) por el desgaste acelerado que se estaba presentando en el sistema de vías.
En su exposición y al responder a las preguntas de los legisladores, explicó que había un año de garantía en que las empresas constructoras debieron haber dado ese mantenimiento, pero al entrar a hacer el estudio observaron que no se contaba con el herramental, maquinaria y refacciones para hacer el trabajo de reperfilado que se requería.
Con ese trabajo preventivo, aseveró, no se hubiera llegado a la etapa correctiva en que está ahora la Línea, teniendo que suspender el servicio.
En representación de las empresas DB International GMBH, ILF Beratende Ingenieure A.G., TÜV SÜD Rail GMBH y Hamburg Consult GMBH, Lezama sostuvo que no correspondió al consorcio la certificación de los trenes y la compatibilidad o incompatibilidad de estos con las vías.
Sobre ese punto, fueron reiterados los cuestionamientos de los legisladores acusando al consorcio de haber hecho una certificación “de buena fe”, solamente con el dictamen que le proporcionó la misma empresa que suministró los trenes, CAF, misma que se apoyó en otra empresa para hacer la certificación correspondiente.
“CAF presentó a través del LCTCMF los estudios y pruebas que aseguraban que los trenes podían circular en seguridad sobre las vías”, apuntó, y consideró aventurado afirmar que no existe dicha compatibilidad.
Refirió que dicho fenómeno ondulatorio se presenta en el 50 por ciento de los sistemas en el mundo, en el caso de la Línea ferrea A del Metro refirió que no tiene curvas y por esto no tiene ese problema, y tiene una fase en la que se puede controlar, mediante un trabajo de reperfilado, pero cuando entra en una fase exponencial se debe realizar trabajo correctivo.
“El problema que existe es un desgaste ondulatorio, ese desgaste ondulatorio hay que vigilarlo y, sobre todo, hacer el mantenimiento adecuado cuando aparece en el riel y determinar en el momento que es lineal para poder desgastar el riel y dejarlo en su condición normal, revisar las ruedas, de forma que este no crezca a una parte exponencial, o sea es mantenimiento finalmente, pero es un mantenimiento predictivo, que lleva a un mantenimiento preventivo, para que no se haga un mantenimiento correctivo, que ya es lo que se tiene ahora, un mantenimiento correctivo fuerte”, señaló.
No hay comentarios:
Publicar un comentario