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| La sesión de los diputados en el Centro Banamex. Foto: Tomada de Twitter @Maria2veces |
MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- Por primera vez en la historia y luego de haber perdido el territorio político de San Lázaro, 257 diputados del total de 500 que conforman la LXII legislatura federal, protegidos por decenas de elementos de la policía federal, iniciaron esta noche en el Centro Banamex, con intercambio de acusaciones y la toma de la improvisada tribuna, el segundo periodo extraordinario de sesiones.
Ante la sorpresa de la mayoría de diputados, la legisladora del PAN, Esther Quintana, propuso, en el arranque del debate camaral, recuperar la discusión de la Ley del Servicio Profesional Docente, punto que fue retirado de la discusión por el PRI y que es uno de los principales argumentos que se han esgrimido en la protesta magisterial y que ya derivó en enfrentamientos entre maestros y elementos de seguridad pública.
La diputada del PAN reclamó que se haya sacado de la lista ese punto y que se haya cedido a las presiones de los maestros. “Pedimos al presidente de la mesa directiva (Francisco Arroyo Viera) que la incluya. No se vale ahora salir con que no se va a discutir. Fíjense en donde carambas estamos sesionando por culpa de un grupo de vándalos que están en San Lázaro. Cuáles son los motivos de este cambio de sede, estamos en un estado de anarquía”, arengó.
Al concluir la participación de la panista, la bancada panista exigió a gritos “fuera Arroyo, fuera Arroyo”.
Entonces subió a la tribuna el líder de la fracción del PRD, Silvano Aureoles quien fue recibido por los gritos de ¡cómplice!, ¡cómplice”, de los panistas que también acusaron a los perredistas de proteger a los maestros.
En respuesta a las agresiones de los legisladores de Acción Nacional, los del PRD tomaron la improvisada tribuna.
El desacuerdo entre legisladores se dio porque cediendo a las presiones de los maestros, los priistas acordaron que esta noche sólo se discutiría y en su caso, aprobaría, la Ley General de Educación y la creación del Instituto Nacional de Evaluación haciendo a un lado la Ley del Servicio Profesional Docente.
La caótica sesión camaral inició con una improvisada mesa directiva, cuatro banderas de México y el sello en cartón del Congreso de la Unión.
Debido al bloqueo que maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantienen en San Lázaro, legisladores declararon al Centro Banamex como sede alterna de sesiones.
Ambas cámaras –con 311 diputados y 85 senadores– acordaron usar la sede del Senado para realizar ahí la sesión del Congreso General con la que este miércoles se instala el periodo extraordinario.
Arroyo Vieyra, abrió la sesión del Congreso General e hizo la declaratoria de la nueva sede donde trabajarán los diputados que no pudieron ingresar a San Lázaro.
Las bancadas determinaron desahogar la agenda del periodo extraordinario en el Centro Banamex, ubicado en la avenida Conscripto.
La ceremonia duró aproximadamente ocho minutos, tras la cual las cámaras iniciarán los trabajos por separado.
Los maestros de la CNTE advirtieron que si los legisladores cambiaban de sede los seguirían hasta donde fuera necesario para evitar que aprueben las leyes en materia educativa.
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