Calderón se lanzó a la guerra sin medir debilidades, critica experto

PEDRO MATíAS
OAXACA, Oax., 13 de marzo (apro).- A pesar de la multimillonaria inversión destinada para conformar un sistema de seguridad moderno y eficiente, el Estado mexicano ha sido incapaz de combatir al crimen organizado, afirmó el director general de Consultoría en Seguridad Comunitaria, Iván Corro Labra.

En entrevista, el exdirector adjunto de Colaboración de la Secretaría de Seguridad Pública federal admitió que los 20 mil millones de pesos gastados en la última década no han servido para combatir la violencia y, mucho menos, para evitar la corrupción y la impunidad dentro de las propias esferas del gobierno.

Corro Labra cuestionó la política presidencial en materia de seguridad porque, según él, Felipe Calderón declaró una guerra al narcotráfico sin conocer las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas del Estado mexicano.

Detalló que, al proclamar su política de "cero tolerancia", Calderón contaba con 45 mil efectivos militares y 450 mil elementos policiacos, agrupados en mil 661 corporaciones, todas ellas, acotó, sin coordinación y con diferentes marcos jurídicos, procedimientos y metodología.

Del lado del crimen organizado, señaló, se estima una cifra aproximada de 300 mil delincuentes, agrupados en diferentes organizaciones: del Golfo, Sinaloa, Juárez, Tijuana y Los Zetas, sin contar a la delincuencia común, que comete el 95% del total de delitos registrados en el país.

Y no obstante las cuantiosas inversiones y el número importante de efectivos policiales y militares, los mexicanos de hoy viven una violencia inusitada y una inseguridad creciente, dijo.

En la entrevista, el exsecretario de Protección Ciudadana en Oaxaca hizo un breve recuento de datos y de los últimos acontecimientos que han cimbrado la estructura gubernamental y la tranquilidad social.

Puntualizó:

"Lo preocupante son las deserciones militares, ya que según el informe de la Comisión de Defensa Nacional de la Cámara de Diputados, en estos dos años emigraron de las Fuerzas Armadas más de 46 mil efectivos, de los cuales 11 mil 515 pasaron a la reserva, 3 mil 970 a retiro, 2 mil 890 solicitaron su baja por motivos personales y 393 fallecieron. En tanto, los 27 mil 381 que desertaron en ese lapso representan el 59% del total".

Así mismo, señaló que el número de exmilitares que en esos dos años pudieron haber sido reclutados por las bandas es mayor que la cifra de pandilleros ejecutados en las guerras territoriales ocurridas en el mismo lapso: dos mil 773 en 2007 y cinco mil 660 en 2008.

Y mencionó que sólo siete de cada diez desertores (muchos se van a Estados Unidos) se dedican a ocupaciones lícitas (algunas relacionadas con seguridad pública y privada) para ganar más dinero.

De acuerdo con Corro Labra, hay hechos que revelan que las bandas del narcotráfico "no están jugando porque ya atacaron a la sociedad civil y se metieron en una disputa por el poder con las instituciones democráticas".

Además, reconoció que más de 80 presidentes municipales de distintos partidos políticos han sido extorsionados y algunos de ellos admiten que han pagado la extorsión con recursos públicos.

El director general de Consultoría en Seguridad Comunitaria mencionó que la edad de ingreso al consumo de drogas ha disminuido de los 10 a los 8 años de edad, y no hay una política gubernamental para su atención y canalización.

No obstante, dijo, en la Cámara de diputados siguen con sus disputas, en el marco de los próximos procesos electorales, y no llegan a los acuerdos necesarios para concluir las reformas legales que permitan contar con un nuevo marco jurídico que permita al Estado contar con más herramientas para frenar la delincuencia.