domingo, 6 de julio de 2014

Confirma estudio oficial el pésimo servicio del Seguro Popular

Estudio de satisfacción revela que no se realiza adecuado control de enfermedades
Hasta dos horas de espera y falta de medicinas en el Seguro Popular
En el primer nivel de atención, cuatro de cada 10 pacientes, en riesgo de sufrir complicaciones
De los afiliados, 38% calificó las instalaciones de salud como regulares a muy malas
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Sólo 19.57 por ciento de los pacientes calificó la atención proporcionada por el Seguro Popular como muy buena, según el Estudio de Satisfacción de Usuarios del Sistema de Protección Social en Salud 2013Foto Carlos Ramos Mamahua
Ángeles Cruz Martínez
 
Periódico La Jornada
Domingo 6 de julio de 2014, p. 33
Hasta dos horas de espera para recibir atención en clínicas y hospitales que se encuentran en condiciones de regulares a muy malas y la tercera parte de los pacientes no logra surtir por completo su receta, son algunas de las características de los servicios médicos que reciben los afiliados al Seguro Popular. El de la calidad sigue siendo un tema pendiente, reveló el Estudio de Satisfacción de Usuarios del Sistema de Protección Social en Salud (SPSS) 2013.
La investigación realizada por primera vez por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) también detectó que la atención clínica es deficiente, pues no se realizan los procedimientos para el adecuado control de enfermedades. Resalta el caso de los pacientes con diabetes que acuden a consulta pero no les miden la presión arterial, pese a que el control de este indicador forma parte de las metas de tratamiento.
De los derechohabientes entrevistados al acudir a la clínica u hospital para atenderse por diabetes, a sólo 68.3 por ciento les midieron los niveles de azúcar en la sangre, a 8 por ciento no le tomaron la presión y 34.6 por ciento registró niveles elevados de este indicador. Es decir, señala el estudio, en el primer nivel de atención, cuatro de cada 10 pacientes está en riesgo de descontrol y, por lo tanto, de sufrir alguna complicación.
En el segundo nivel (hospitales generales) se encuentran en ese mismo riesgo tres de cada 10 usuarios y dos de 10 entre los que acuden a hospitales de alta especialidad.
Otro servicio revisado por los investigadores fue el de vacunación. Entre quienes acudieron a la clínica para solicitar su aplicación, 11 por ciento no la recibió, la mitad de las veces porque no tenían el biológico.
En cuanto a la atención médica, 16 por ciento de los entrevistados, en promedio, dijo que no recibió explicaciones sobre su estado de salud o no las entendió completamente. En el tercer nivel, el porcentaje se elevó hasta 22 por ciento.
Desde la creación y entrada en vigor del SPSS y su brazo operativo, el Seguro Popular, uno de los retos ha sido garantizar la efectiva prestación de servicios médicos de calidad para todos los afiliados. A 10 años, éste sigue como un asunto pendiente.
De ello da cuenta, también, la calificación de los usuarios a la atención recibida. Sólo 19.57 por ciento la catalogó como muy buena, aunque con diferencias entre los niveles de atención.
Entre estados también se observaron diferencias significativas. Mientras en Baja California Sur y Guerrero, sólo 8.4 y 9.5 por ciento de los pacientes, en ese orden por entidad, consideraron que recibieron muy buena atención, en Sinaloa y Nuevo León dieron esta calificación 39 y 38 por ciento de los entrevistados, respectivamente.
Sobre los tiempos de espera, para 69.4 por ciento de los derechohabientes fue de regular a muy largo. El promedio fue de 78 minutos (lo recomendable son 30).
Respecto de las condiciones en que se encuentran las clínicas y hospitales, el INSP concluye que es uno de los aspectos estructurales que requieren atención, pues 38 por ciento de los afiliados consideró que las instalaciones son de regulares a muy malas. Así se reportó con mayor frecuencia en Baja California Sur, Chiapas y Guerrero. Las entidades con menores porcentajes fueron Chihuahua, Jalisco y Tamaulipas.
En cuanto al abasto de medicamentos, 72.4 por ciento de los pacientes pudo surtir su receta completamente. En promedio, 28.8 por ciento de las personas se declaró insatisfecho o muy insatisfecho con este servicio. La percepción fue peor en Veracruz, con 41.4 por ciento de los usuarios en esta condición.
En cambio, la mayor proporción de personas muy satisfechas con el abasto de medicinas se ubicó en Sinaloa (17.6 por ciento), Baja Califormia (13.48) y Tamaulipas (13.25).

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