Pedro Echeverría V.
1. ¡Increíble!: en México de cada 10 mil trabajadores sancionados y en la cárcel, de pronto aparece un empresario o gobernante millonario que se le juzga y hasta suele ir por algunas semanas a la cárcel. Obvio, no es solamente en México sino en todos los países donde manda el dinero o el capital. Es el caso de un señor Gastón Azcárraga, que ha hecho mil negocios, que gastó muchos millones de pesos en la campaña presidencial del panista Vicente Fox y luego recibió como pago la compra a bajo precio de la Compañía Mexicana de Aviación. Así se arreglan los acuerdos políticos en México entre gobiernos y empresarios: “ayúdame a llegar y luego tendrás lo que quieras”.
2. Gastón Azcárraga –accionista mayoritario del Grupo Posadas- es un empresario que en agosto de 2010 se deshizo de las acciones de Compañía Mexicana de Aviación (CMA) y 16 empresas que la integran, en una operación que fue notificada fuera de tiempo a la Comisión Federal de Competencia (CFC) y a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) ¡Inconcebible!: “fue notificada fuera de tiempo” y se fueron a la calle varios miles de trabajadores (8,500?), mientras Fox, Calderón, Azcárraga, no reciben castigo algunos y se les da oportunidad de seguir gozando de sus millones. ¿No les parece que en el momento de notificar un caso grande como éste, se debe investigar de inmediato?
3. Desde aquel año la Coalición de Trabajadores de Mexicana de Aviación junto a más de ocho mil quinientos asociados que habían en 2010, ha venido denunciando ante la Procuraduría acerca de los enormes fraudes y negocios del empresario y al mismo tiempo no ha descansado en su lucha por recuperar su empleo. ¿Por qué no desde entonces se obligó a Azcárraga a declarar? Se solicitó a Hacienda en un momento que los 1,500 millones de pesos existentes no sean absorbidos por los nuevos inversionistas sino que se le cobren a Azcárraga para usarla en la reestructuración de la empresa. ¿Qué hacer ahora ante tamaño desfalco y el despido de trabajadores?
4. Que los ex presidentes Fox y Calderón expliquen sus relaciones y negocios obvios con Azcárraga; que se investiguen los despilfarros y malos negocios que se hicieron con el dinero de la empresa y que sea rescatada la misma para que los más de ocho mil trabajadores recuperen su empleo. Pero al mismo tiempo los multimillonarios de Interjet (Miguel Alemán), de Volaris (Pedro Aspe) y de Aeroméxico –que aprovecharon (o impulsaron) el problema, tendrán que devolver las rutas que corresponden a Mexicana. Nunca ningún capitalista deberá salir beneficiado sacrificando a los trabajadores.
5. ¿Será que con ello Peña Nieto y su procurador pretendan demostrar que también están dispuestos a castigar a los multimillonarios para conquistar el apoyo de los trabajadores? ¿Podría pensarse que ahora sí viene la justicia a favor de los profesores de la CNTE que llevan un año de luchas en las calles; de los 46 mil trabajadores electricistas despedidos por Calderón, de los 8,500 empleados de Mexicana y otros trabajadores? Nada de eso: parece que la investigación contra Azcárraga no prosperará porque siempre hay acuerdos de “valores entendidos” entre la clase dominante. ¿No es acaso la argamasa que los une?
6. La misma mezcla de argamasa debería unir las luchas de los trabajadores. Si así fuera, tendría mucho miedo la burguesía, terror en tocarlos, puesto que ante cualquier agresión habría un paro general y un bloqueo total realizado por uno o dos millones de trabajadores. Tan solo la CNTE, López Obrador y los zapatistas tienen la capacidad de reunir esos dos millones si superaran su caudillismo y sectarismo. Así como la burguesía jamás permite que su gente sea castigada, asimismo los trabajadores tienen la capacidad para paralizar el país cuando la clase dominante obre de manera incorrecta contra el pueblo. (20/II/14)
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