Laura Poy y César Arellano
Periódico La Jornada
Domingo 4 de septiembre de 2011, p. 5
Con un total de 96 nuevas instituciones públicas de educación superior y la ampliación de 50 campus ya existentes, la administración calderonista benefició a 90 mil jóvenes entre 2007 y 2010. En contraste, al reducir en 2 mil 700 millones de pesos los recursos destinados al sector universitario para este año, se impactó a una matrícula nacional estimada en 3 millones de estudiantes.
A pesar de que el gobierno federal anuncia como uno de sus objetivos prioritarios fortalecer la cobertura, equidad y calidad de la educación superior en México, los fondos extraordinarios destinados a ampliar y diversificar su oferta educativa cayeron este año 48.5 por ciento, al pasar de mil 784 millones de pesos invertidos en 2010, a 956 millones de pesos en el presente ejercicio fiscal, lo que representa una caída de 899 millones de pesos.
La reducción afecta tanto a universidades públicas estatales como a estatales de apoyo solidario, interculturales, tecnológicas y politécnicas, las cuales vieron reducidos los recursos que se destinan a financiar sus proyectos.
De acuerdo con el anexo estadístico del quinto Informe de gobierno del presidente Felipe Calderón, las acciones para pro- mover un financiamiento “responsable y eficiente” de los recursos públicos que se destinan al sector incluyeron invertir 800 millones de pesos al fondo para apoyar al saneamiento financiero de las universidades públicas estatales, que están por debajo de la media nacional en el subsidio por alumno.
Sin embargo, dicho monto fue igual a lo aprobado en 2010, por lo que en realidad decreció si se considera el impacto de la inflación. Esto afectó a 14 universidades estatales, entre ellas las de Chiapas, Chihuahua, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, México, Michoacán, Nayarit, Oaxaca, Sinaloa, Tabasco, Zacatecas y el Instituto Tecnológico de Sonora.
En cuanto a la inversión federal destinada a las universidades públicas estatales y federales, cabe destacar que de 2009 a 2011, de acuerdo con un análisis de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies), el Ejecutivo federal ha propuesto sistemáticamente un proyecto presupuestal a la baja.
En 2009 propuso una reducción, en términos reales, de 0.8 por ciento de los fondos públicos para el sector. Un año más tarde, recortó en 6.7 por ciento su inversión, y este año disminuyó en 0.7 por ciento. Esto obligó a rectores de universidades e instituciones públicas de educación superior demandar un incremento presupuestal ante la Cámara de Diputados, la cual aprobó ampliaciones presupuestales por 7 mil 87 millones de pesos en 2009; de 9 mil 401 millones de pesos para el siguiente ejercicio fiscal, y de 3 mil 784 millones para 2011.
En cuanto al crecimiento de la matrícula por tipo de subsistema, se destaca que en el ciclo escolar 2010-2011 seis nuevas universidades tecnológicas iniciaron labores, pero sólo atendieron a 735 alumnos. En otras cinco universidades politécnicas fundadas en este periodo se inscribieron mil 950 jóvenes, y otros mil 350 decidieron estudiar en institutos tecnológicos de nueva creación.
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