A ti que te has cruzado por mi vida:
Te escribo desde esta frontera a la que Carlos llama Ciudad Cárcel. Quiero contarte lo que he visto, pues ya no recuerdo la última vez que estuvimos juntos.
Sí, mucha gente ha abandonado la ciudad. Dice el Observatorio de Seguridad y Convivencia Ciudadana de Ciudad Juárez que nos han abandonado unas 230,000 personas. La cifra me parece tan grande que al igual que los ingresos brutos de un diputado, no me lo puedo imaginar. Si cuando Franco gobernó España, vinieron a México 25,000 exiliados; durante el gobierno de Pinochet salieron de su país 30,000 chilenos; y se calcula que 40,000 argentinos dejaron su patria después de los 70s por cuestiones políticas; pues el número de 230,000 suena simplemente abrumador.
Sabes que me gusta Sabina, y no puedo evitar recordar “Con la frente marchita”. Nunca he sabido bien de qué habla, pero me imagino que es de una exiliada argentina que anhela más regresar a su patria que el amor de una pareja... ¿Me pregunto si la gente que se ha ido también siente esas ganas de regresar?
“Buenos Aires es como contabas, hoy fui a pasear,
y al llegar a la Plaza de Mayo me dio por llorar
y me puse a gritar: ¿Donde estas?”
Así dice la canción. Así me siento cuando paso por los lugares que eran nuestros. Ahora pienso ¿dónde estas? mientras camino por una ciudad en ruinas. No tenemos una Plaza de Mayo, pero si el gobierno hiciera lo que debe podría llorar en el memorial de los famosos crímenes del campo algodonero.
Ya sé que pensarás que exagero. Pero ¿Recuerdas la Avenida Juárez? Esta abandonada. ¿Recuerdas ese mural que tanto te gustaba cuando ibas a pagar las multas a tránsito? Ese qué tenía a un auto rojo con fauces y que perseguía a un peatón. Siempre me recordó el deber de impedir que los autos sean más importantes que las personas. Bueno, pues ya no existe, lo derribaron por un proyecto de un centro comercial que nunca se construyó.
La zona más segura de la ciudad, tiene retenes de policías cada 100 metros, pero no hay nada que hacer ahí muchos lotes baldíos, edificios en venta, apenas un puñado de cantinas, hasta las oficinas de Aeroméxico cerraron.
La ciudad ha crecido tanto. Lo curioso es que incluso las zonas nuevas, están en ruinas. El sur-oriente, esta lleno de fraccionamientos nuevos que sin estar totalmente ocupados ya están bandalizados y abandonados. ¿No están ocupados y ya están abandonados? Parecen verdades incompatibles pero así es. La verdad no termino de comprender, cómo en medio de una crisis económica y sin empleo en la ciudad siguen construyendo nuevos fraccionamientos. Primero, porque sin empleo no hay manera de pagar los créditos de las casas. Segundo porque no se puede dar mantenimiento a la ciudad cómo esta pues menos si la hacen más grande. Y tercero, hay una cantidad enorme de casas abandonadas y lotes baldíos... con estos nuevos fraccionamientos sólo generamos más espacio ocioso en la ciudad. La falta de transporte y servicios es mala, pero que una empresa se mantenga incluso cuando no hay mercado es simplemente sospechoso. ¿Cómo vendes casas cuando no hay quien las pueda comprar ni ocupar?
Los centros comerciales pasan por una etapa similar de abandono (no de sospecha). Por ejemplo, el que debería ser tal vez el más bonito de la ciudad “Las Misiones”, nunca ha tenido todos sus locales ocupados. Al parecer las tiendas no alcanzan a competir con El Paso. Esa es la ironía, a pesar de que allá ganan más, los productos son más baratos. ¿Será que aquí quieren abusar con las ganancias? ¿Por qué nos quieren vender todo tan caro? De todas maneras pagan sueldos muy bajos a sus empleados.
Por eso la gente prefiere comprar productos piratas de mala calidad o de segunda mano. La cantidad de mercados informales que venden este tipo de mercancías se han multiplicado de forma increíble. Debo decirte que no me molestan, de hecho soy asiduo visitante de estos mercados, pero no puedo evitar el mal sabor de boca de que son la evidencia palpable de corrupción en la aduana mexicana, y en la dirección municipal de comercio. ¿Por qué voy entonces? Bueno, con lo que llevo a mi familia dos horas al cine comemos toda una semana, y el costo de las películas originales es abusivo. Lo que en El Paso vale 8 dólares, aquí alcanza hasta los 150 pesos. Bueno sí eso me pasa a mí ¿qué pasará con quién gana un salario mínimo?
Por cierto, “déjame que te cuente limeña”, ¿Recuerdas el centro lleno de comerciantes informales que habían pasado de las improvisadas mesas a puestos fijos que formaban un camellón central en la zona peatonal? Bueno, recordarás el conflicto en el 2006 dónde los sacaron de ahí con el uso de la fuerza pública. Recuerdas que el líder de los comerciantes de aquel entonces Géminis Ochoa declaró que había recibido ayuda de César Jaureguí (afamado panista) y que incluso su papá fue encarcelado por intento de homicidio. ¡Qué bronca aquella! Pues bien en el 2009 asesinaron a Géminis, y hoy en el 2011, los comerciantes regresan a tomar las calles, hasta juegos de apuestas hay... lo que no deja de llamar mi atención es que el mismo alcalde que sacó a los vendedores del centro, es quién ahora los apoya, hasta una manta tenían dándole las gracias... ¿Será que el asesinato de Géminis fue una forma de arrebatarle el liderazgo de los comerciantes? ¿Pero quién lo hizo?
Es que en realidad se han perdido muchos empleos en la ciudad y la gente tiene que buscar la manera de sobrevivir. Fíjate, según el Plan de Desarrollo Municipal en el 2008 se perdieron 55,378 empleos, y en el 2009 fueron 23,843... bueno ahí mismo dice dos párrafos después que en el 2009 se perdieron 50,251, pero imagina la menor cifra para que no digas que soy exagerado, de cualquier manera es escandalosa y parece ser que la alternativa más viable para sobrevivir ha sido la informalidad, que tal vez sólo sea una manera distinta de llamar a la ilegalidad. Se le llama informal para no aplicar la ley porque el gobierno no puede garantizar las condiciones para que la economía se mantenga en la legalidad.
Esos del gobierno, de verás que han de pensar que la ciudadanía es estúpida, o al menos así la quisieran, de qué otra manera te explicas que sostengan un sindicato tan corrupto como el de Elba Esther. Fíjate, la semana pasada un tal Facundo Rosas dijo que los asesinatos (mal llamados ejecuciones) habían disminuido en un 45 %, ese día asesinaron a 15, al siguiente 14 y para el sábado otros 19... total que concluimos con el fin de semana más sangriento de los últimos tres años... ¿creerán que somos estúpidos?
Ja Ja Ja... todavía el presidente municipal se ofende porque dice que todo es de gente que le quiere hacer mala fama a Juárez, qué rápido olvidó el asesinato de su escolta a manos de un policía federal, claro, él esta en campaña y protegido, lo que no podemos decir el resto de la población. El caso es que el Presidente Murguía confrontó abiertamente a alguien que le pregunto: ¿Por qué no quieren hacer públicas las reuniones de los regidores? Dijo que la participación ciudadana se daba, pero no dijo por qué lo regidores discuten asuntos públicos de manera privada... ¿tienen algo que ocultar? ¿cómo vamos a confiar en ellos si arreglan cosas en lo oscurito? Entiendo que la política es llegar a acuerdos, pero ¿por qué ocultarlos?
En fin Murguía se preocupa por la imagen negativa de la ciudad, pero no se ocupa de resolver los problemas. Por ejemplo, quiere demandar a una compañía de software porque han elaborado un juego donde el tema central es la violencia en Juárez relacionada con el narcotráfico. Igual pasó cuando hicieron un videojuego donde una lucha contra terroristas se daba en esta ciudad. Pero a fin de cuentas son juegos y fantasías, además están clasificados para adultos.
A mí, el video juego que me gusta y me asusta, es otro llamado Fall Out, se trata de un mundo posterior a una catástrofe nuclear. Se supone que eres un personaje que va pasando aventuras por una tierra sin ley y en ruinas. Me gusta porque la verdad está muy bien hecho, pero me asusta porque en muchas ocasiones las imágenes se parece terriblemente a Juárez. Igual que en el juego, aquí hay fraccionamientos y calles cerradas donde los vecinos buscan un poco de seguridad pero temen salir de sus refugios, con esto le quitan a la ciudad toda la ventaja de vivir en comunidad. Una ilusión de seguridad a cambio de la libertad.
Pero los juegos a fin de cuentas son meras fantasías. Que por cierto, hablando de fantasías, ¿viste lo que comentó el Secretario de Hacienda Ernesto Cordero Arroyo? Ahí te va: “Hay familias mexicanas que con ingresos de seis mil pesos al mes tienen crédito para una vivienda, tienen crédito para un coche, se dan tiempo de mandar a sus hijos a una escuela privada y están pagando las colegiaturas”. ¡No juegues! Gracias a Dios (aquí es cuando me sale lo creyente) gano más que eso, y no me alcanza para nada.
Imagínate el año pasado anunciaron un aumento gradual del agua de hasta el 20 % y cuando llegó enero ¡SOPAS! A muchos nos llegó el recibo hasta con el 150 % de incremento. No preguntes por el gas, imagínate recibos de 3,000 a 4,500. Todo por que la empresa se da el lujo de cobrar lo que quiere sin respetar los precios internacionales. Algunos dicen que es por un decreto que se firmo para que en caso de que los precios internacionales se disparen pues la empresa cobre un precio máximo y no dañar a los usuarios. No entiendo, pasa exactamente lo contrario. Yo creo que nos llegan estos recibos porque las autoridades no quieren dañar los intereses de unos particulares sin importar que esto nos afecte a muchos otros ciudadanos. Total, con lo que ellos ganan si les alcanza para pagar el gas. A mí, ya no me alcanza para mucho, ya hasta me estoy atrasando en pagar la pensión de mi hija... y eso duele.
No puedo evitar acordarme de Lalo, sabes, él pensaba que protestar en contra de los altos cobros del gas sería algo que podría unir a los juarenses. Nos pega en el bolsillo y es una lucha justa. Pero no, no sé si sea la apatía o que basta regalar unos boletos para el mundial y organizar un maratón en la ciudad para olvidar cómo nos joden el bolsillo.
¿Tan mal esta la cosa? Sí. ¿Se puede arreglar? Claro, no lo dudo ni por un instante. Tal vez me engaño, y de nueva cuenta culpo a Sabina. Por ejemplo cinco párrafos:
Tenemos memoria, tenemos amigos,
tenemos los trenes, la risa, los bares,
tenemos la duda y la fe, sumo y sigo,
tenemos moteles, garitos, altares.
Tenemos zapatos, orgullo, presente,
tenemos costumbres, pudores, jadeos,
tenemos la boca, tenemos los dientes,
saliva, cinismo, locura, deseo.
Tenemos el mal de la melancolía,
la sed y la rabia, el ruido y las nueces,
tenemos el agua y, dos veces al día,
el santo milagro del pan y los peces.
Tenemos poetas, colgados, canallas,
Quijotes y Sanchos, Babel y Sodoma,
abuelos que siempre ganaban batallas,
caminos que nunca llevaban a Roma.
Más de cien palabras, más de cien motivos
para no cortarse de un tajo las venas,
más de cien pupilas donde vernos vivos,
más de cien mentiras que valen la pena.
Tenemos tanto que defender, y cuando veo a mis hijos a los ojos me doy cuenta de que el esfuerzo vale la pena. Muchos han sido amenazados para que guarden silencio y “muchas golondrinas huyen de la ciudad” pero la amistad y la confianza que ha quedado en la búsqueda de justicia no se ha ido y gente que se ha ido esta regresando, eso sí, con sus precauciones y enfrentando sus temores.
Sabes, me ha sorprendido ver que cada vez más gente diferente se une. Hace poco organizaron un ayuno de 18 horas para exigir justicia. Fue en el parque del monumento. Había jóvenes, cristianos, católicos, empresarios, estudiantes, conservadores, zurdos, feministas, artistas y gente muy diversa. Mientras estuve ahí, uno de los comentarios que escuché era que podíamos dejar algunas diferencias de lado y estar unidos en nuestras coincidencias. ¿Será posible? Yo creo que sí, pero no creo que sea instantáneo.
Para que te des una idea, déjame te comparto lo que dice Sergio, un amigo, y en lo que yo coincido. Dice que cuando escuchas hablar a Miguel Fernández, Presidente de Plan Estratégico de Ciudad Juárez, de formación netamente empresarial; y a Gero Fong, líder estudiantil de clara formación e ideología marxista; escuchas lo mismo, ambos buscan justicia y saben que el gobierno encargado de garantizarla no lo hace y que es necesario un cambio que se logrará por medio de la participación.
Coincidencias ya existen, ahora debemos aprender a dialogar y vivir con nuestras divergencias.
Hay tantas cosas que contarte y la vida no me da, pero... cuéntame tú, ¿cómo has estado? Te extraño.
Déjame despedirme, de nuevo con Sabina.
Más vale que no tengas que elegir
entre el olvido y la memoria,
entre la nieve y el sudor.
Será mejor que aprendas a vivir
sobre la línea divisoria
que va del tedio a la pasión.
No dejes que te impidan galopar
ni los ladridos de lo perros
ni la quijada de Caín.
Que no te dé el insomnio por cantar
las gaviotas del desierto,
las amapolas de París.
Te engañas si me quieres confundir
esta canción desesperada
no tiene orgullo ni moral
se trata sólo de poder dormir
sin discutir con la almohada
dónde está el bien, dónde está el mal.
La guerra que se acerca estallará
mañana lunes por la tarde
y tú en el cine sin saber
quién es el malo mientras la ciudad
se llena de árboles que arden
y el cielo aprende a envejecer.
Y sal de ahí
a defender el pan y la alegría.
Y sal de ahí
para que sepan que
ESTA BOCA ES MIA.
Hernán Ortiz
jhiiio@hotmail.com
jhortiz@uacj.mx
No al despojo de la tierra.
PARTICIPA:
http://noalcercoenlomas.wordpress.com
Hernán Ortiz, Maestro en Ciencias Sociales por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez y antropólogo por la Universidad Veracruzana. Actualmente desempeña como Docente Investigador en la UACJ y es director de la Organización Ciudadanos por una Mejor Administración Pública (http://www.cimap.org.mx)
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