sábado, 18 de octubre de 2008

La reforma se atora; evalúan omitir consenso


No descartan solución por mayoría; PRI, factor de ruptura


Pese al optimismo de los coordinadores del PRD, Carlos Navarrete, y del PAN, Gustavo Madero, de llegar este fin de semana en el Senado a un acuerdo consensuado en torno a la reforma energética, las negociaciones se complicaron ayer, ya que el PRI hizo un último intento por introducir el tema de las refinerías privadas, el cual había retirado días antes.

Madero no desacreditó los acuerdos por mayoría; sin embargo, insistió en que es mejor lograr “un respaldo más amplio” para la reforma a Petróleos Mexicanos (Pemex), y Navarrete dijo a su vez que está alerta, en pláticas sobre lo que aún no se concreta y en espera de que “todos honren su palabra” y se lleve “lo acordado” a dictámenes.

Ayer, durante la reunión de las comisiones, en la que se tenía previsto aprobar otros dos dictámenes, el que se refiere a la Ley para el Aprovechamiento de Energías Renovables quedó pendiente, ya que el PRD advirtió que viola la Constitución al establecer mecanismos para que trasnacionales generen electricidad a partir de fuentes alternas y reciban subsidio gubernamental.

Los senadores perredistas Pablo Gómez y Arturo Núñez advirtieron que no avalarán la ley en esos términos, y después de un largo debate, en el que expusieron los riesgos de que se profundice la privatización del sector eléctrico, entre reproches de los senadores del PAN y de Arturo Escobar, del PVEM, se decidió posponer la votación del dictamen para este domingo.

Hoy se discutirán los proyectos de las leyes Orgánica de Pemex y Reglamentaria del Artículo 27 en materia de petróleo, donde están las divergencias de fondo.

El proyecto del tricolor

Ayer, según informó el senador perredista Graco Ramírez, el PRI puso a consideración de PAN y PRD un proyecto para modificar la ley reglamentaria del artículo 27 constitucional para establecer un esquema especial de privatización de las refinerías vía la creación de empresas que importen crudo y produzcan gasolina para exportar.

“Para nosotros ello es inaceptable”, destacó Ramírez, ya que es el primer paso para impulsar el proyecto de filiales que los del tricolor ya habían retirado.

Al respecto, el senador panista Juan Bueno comentó: “alguien llevó a la mesa de discusión un documento en el que se plantea instalar en México empresas para refinar petróleo, aunque no fuera con producción nacional ni para el mercado interno”.

Meter esa propuesta en la discusión “echaría a perder” lo avanzado, dijo, aunque no descartó que si hubiera un acuerdo al respecto “en otro lado”, es decir, entre coordinadores, lo tendrían que discutir este domingo, cuando se reunirán los miembros de las mesas directivas de las comisiones de Energía y de Estudios Legislativos para concluir la revisión de los tres dictámenes pendientes.

El debate de ayer fue intenso e incluso el dictamen sobre la Ley de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) se aprobó con modificaciones, ya que Arturo Núñez hizo notar que se otorgaban facultades a ese organismo para intervenir en refinación, redes de distribución y almacenamiento de petróleo, como si esas actividades las fueran a realizar compañías privadas.

Recordó que en la iniciativa energética propuesta por Felipe Calderón se pretendía ceder al capital privado la maquila de refinación y los ductos, pero en las negociaciones se convino que permanecieran como actividades exclusivas del Estado, en concordancia con la Constitución, por lo que no tiene sentido que se incluyan “como facultades de promoción ni de regulación de la CRE”, como propone el PAN.

Esa comisión, recalcó, no puede ejercer funciones que sólo corresponden a Pemex. Con esas observaciones, que el presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Ricardo García Cervantes, recogió, se aprobó el dictamen. El PRD se reservó su voto, de acuerdo con la decisión original de esperar la conclusión de los siete dictámenes.

La cueva de Alí Baba

El debate principal se dio cuando se discutió el anteproyecto de dictamen para crear la Ley para el Aprovechamiento de las Energías Renovables y para el Financiamiento de la Transición Energética, elaborado con base en iniciativas de PRI y PVEM.

De entrada, Pablo Gómez planteó que en la pasada legislatura quedó en primera lectura en el Senado una minuta con un proyecto similar de reforma, a la que primero debía darse trámite, pero su planteamiento no prosperó.

Después, Núñez advirtió que aunque en la exposición de motivos se destaca que la intención es impulsar el desarrollo de energías renovables, lo que se busca realmente es que continúe la participación de la inversión privada en la generación de energía eléctrica, lo cual viola la Constitución.

El senador del PVEM Arturo Escobar y los panistas Fernando Elizondo y Rubén Camarillo sostuvieron que no hay inconstitucionalidad, debido a que la Ley del Servicio Público para la Energía Eléctrica permite la generación a particulares, e insistieron en la urgencia de impulsar fuentes alternas renovables.

Gómez Álvarez, sin embargo, desmenuzó el anteproyecto de dictamen, y precisó que se obliga a la CRE a expedir reglas para interconectar a las empresas privadas al sistema eléctrico nacional y se crea un fondo de transición “a fondo perdido” para financiar a cualquiera; por ejemplo, a una empresa extranjera que instale generadores de energía eólica.

Se refirió a los negocios que propiciarán que los gobiernos de estados y municipios firmen convenios con “los suministradores”, como se llama a las empresas privadas que generarán electricidad. Recordó el caso de un industrial “que regala botellas de coñac”, quien en una vieja fábrica textil de Veracruz, que contaba con una caída de agua, puso un negocio para producir electricidad, la cual vende a los ayuntamientos para alumbrado por conducto de la CFE. “Bueno, pues esto ya es la cueva de Alí Babá.”

Escobar, uno de los autores de la iniciativa, acusó a Núñez de no tener compromiso con las energías alternas y de no estar interesado en la protección del medio ambiente. El perredista le respondió que él también podría acusarlo, aunque no lo hará, de defender los intereses de las trasnacionales.

Como Escobar continuó con la misma línea de argumentación y Camarillo restó importancia a los planteamientos de los perredistas, Gómez Álvarez advirtió que el PRD no votará ese dictamen de no modificarse los artículos 17 y 18, los cuales señalan la obligación de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de comprar la energía generada por empresas privadas y su interconexión al sistema nacional.

Les advirtió además que si se imponen y aprueban esa ley que viola la Carta Magna, el PRD podría acudir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que en la pasada legislatura resolvió una controversia constitucional.

El presidente de la Comisión de Energía, el priísta Francisco Labastida, defendió la iniciativa y deploró que México tenga un potencial del orden de los 10 mil megavatios sin gastar hidrocarburos y lo desperdicie. Si se suman, insistió, todos los métodos alternos, el país cuenta con un potencial de cerca de 70 por ciento del tamaño del sistema eléctrico nacional.

Y advirtió que si para aprovechar ese potencial se debe modificar la Constitución, “yo diría que tenemos que revisar hasta dónde estamos dispuestos a llegar”.

No hay comentarios:

Escándalos de Luis Mendoza Acevedo