Ciudad de México. La presidenta de la Comisión contra la Trata de Personas, Adriana Dávila Fernández, del PAN, denunció ante el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, que desde el gobierno federal y algunos locales se apoya con recursos millonarios a la ex panista Rosi Orozco y su familia, quien ha hecho de la tragedia de muchas mujeres explotadas su millonario negocio particular.
Durante la comparecencia del funcionario ante el pleno del Senado, le entregó un expediente donde se detalla que la familia Orozco la Garza ha recibido en este sexenio contratos del gobierno federal por cerca de 14 millones de pesos para seis de sus empresas, además de 16 millones de pesos en donativos para tres de sus fundaciones, entre ellas Comisión Unidos contra la Trata y Camino a Casa.
Además, se le han financiado 119 viajes nacionales e internacionales, entre ellos a Dubai y al Vaticano, a Rosa María de la Garza, conocida como Rosy Orozco, a sus hijos y a otros integrantes de las fundaciones que utiliza para obtener recursos públicos, bajo el falso argumento de que ayuda a mujeres víctimas de trata.
Desde el pleno del Senado, la senadora Dávila dijo asimismo a Osorio Chong que Orozco tiene en su poder cinco inmuebles que obtuvo a través del Sistema de Administración de Bienes (SAE), tres de ellos con un valor de 11 millones 524 mil pesos, para atender a víctimas de trata de personas, pero que en realidad tienen un uso particular, según información oficial.
El propio SAE constató que en una de las casas habitan Emilio Orozco de la Garza y Mariana Ruenes, hijo y nuera de Rosy Orozco.
La senadora Dávila sostuvo que no es un asunto personal –es conocida su confrontación con Orozco, quién fue protegida por Vicente Fox y Felipe Calderón- sino de cifras y datos que están ahí y que hablan de las corruptelas que rodean a Rosy Orozco y su familia.
Preguntó cómo es posible que el SAE otorgue cinco inmuebles a una sola persona y diversas dependencias del gobierno federal le entreguen contratos, por adjudicación directa a tres empresas que tienen el mismo representante legal y que los donativos le lleguen a ella y no a las muchas organizaciones que realmente combaten la trata de personas.
“Eso se llama corrupción”, recalcó. Y dijo también a Osorio Chong que mientras Orozco viaja en una camioneta blindada, que le paga el gobierno federal o el del estado de México, defensoras de derechos humanos están desprotegidas y mueren asesinadas.
Expuso que Rosy Orozco consigue contratos, donativos y casas del gobierno federal por premiar a gobiernos y políticos que combaten, según ella, la trata de personas, “como lo hizo con Javier Duarte, Roberto Borge”, gobernadores priístas presos por corrupción.
Premió también a Eruviel Avila, aunque en el estado de México hay el mayor número de feminicidios. La legisladora pidió al titular de Gobernación investigar ese entramado corrupto y lo hizo responsable por su integridad física.
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