Mucho se le atacó a Andrés Manuel López Obrador en la campaña del 2006 –y en la de 2012 también– sobre su supuesta similitud con el comandante Hugo Chávez, así como de un supuesto financiamiento a su campaña por parte de Chávez, a pesar de que nunca se conocieron personalmente. Incluso en una entrevista para Elena Poniatowska, Hugo Chávez señaló: “me hubiese gustado, lo confieso, haberlo conocido”.
Dejando atrás las falsas acusaciones de la derecha, en ese entonces encabezada por Fox, como presidente del país, y por Calderón, como candidato de Acción Nacional, hay una serie de similitudes reales entre ambos líderes de izquierda, por supuesto, que diferencias entre ambos personajes hay muchas más.
Tenían casi la misma edad, se llevaban solo unos meses de diferemcia, López Obrador nació en noviembre de 1953, mientras que Chávez en julio de 1954.
Una de las grandes pasiones que tuviera el venezolano Hugo Chávez durante su niñez y juventud fue el jugar béisbol, sus compañeros le apodaban “el zurdito de oro”, pasión que Andrés Manuel también comparte hasta el día de hoy.
Hasta el día de su muerte en 2013, Hugo Chávez fue el político venezolano con mayor covocatoria en su país, innumerables actos públicos con plazas totalmente llenas encabezó el comandante. López Obrador, a la fecha, es igualmente el político que mayor convocatoria tiene en México, incluso más que el propio presidente, pues en el último acto que realizó en defensa del petróleo el año pasado, el Zócalo de la Ciudad de México lució más lleno aún que cuando Peña Nieto dio su primer grito de independencia en septiembre de ese mismo año.
Ambos grandes apasionados de la historia. “Historiador empírico” declaró Adán Chávez a su hermano Hugo. Mientras que a Chávez siempre le gustó profundamente el estudio de la historia de su país y escribió un sinnúmero de textos, López Obrador se ha declarado también un apasionado de la historia de México y ha escrito varios libros sobre ella. En su último libro publicado “Neoporfirismo, hoy como ayer” Obrador asegura que su gusto por la historia le ha ayudado en su trabajo como dirigente político.
La austeridad en sus vidas también forma parte de las coincidencias entre ambos líderes, Hugo Chávez se caracterizó, al igual que López Obrador, por su congruencia en el actuar y el hacer, así como en su austeridad como forma de vida.
Por si fuese poco ambos compartieron el gran amor por sus pueblos, y dicho amor fue y es recíproco, “amor con amor se paga”.
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