“No podemos ser tan cerrados", consideró la panista y sostuvo que el acto simbólico del pasado fin de semana en Monterrey fue a título personal.
(Foto: Facebook)
La presidenta municipal de Monterrey, Nuevo León, Margarita Arellanes -quien el pasado fin de semana entregó las llaves de la ciudad a Jesucristo- afirmó que el acto fue “a título personal” y no violentó la Constitución.
“Hay que ser respetuosos y tolerantes ante aquellas personas que tenemos o creemos en un ser supremo y me parece que es válido así como también es válido respetar aquellas personas que tienen una creencia distinta”, dijo en entrevista para Milenio Radio.
“Al momento de hablar de Dios hay quienes se escandalizan, pero cuando ven en cuestiones de violencia o se trata de construir, ahí enmudecen”, expuso.
“No podemos ser tan cerrados para negarle a cualquier persona esa manifestación”, señaló.
La alcaldesa consideró que las críticas deben hacerse contra “las cosas que no tienen un fin bueno o una causa noble”.
“¿Quién no quiere que a nuestra ciudad le vaya bien?”, cuestionó.
“El 12 de diciembre, cuando vamos a la Basílica, ahí los ves sentaditos (a los políticos) y ahí no dicen nada de violación a la Constitución”, remató.
No hay comentarios:
Publicar un comentario