Una entidad que se precie de estar gobernada por un gobierno de izquierda debe contar con programas sociales a favor de la sociedad (como hizo Andrés Manuel López Obrador con el programa de asistencia para las personas de la 3ra. edad) y también debe enarbolar como principio fundamental y lógico el respeto a los derechos humanos.
La manifestación en las calles es, guste o no a los mexicanos de meñique levantado (pero con plato de frijoles en la mesa), un derecho de la sociedad. Si los representantes de dicha sociedad no responden cuando la sociedad hace uso de los canales institucionales, entonces salir a las calles a exigir dichos derechos es lo que queda como camino.
Marcelo Ebrard ha traicionado ese fundamental derecho (y ha traicionado muchas más cosas desde que tomóla jefatura de gobierno del DF en 2006) y tiene tiempo haciéndolo. Ergo: Marcelo Ebrard es un traidor a la verdadera izquierda que muchos ciudadanos buscamos instaurar en nuestra nación.
Los hechos no mienten. Hagamos retrospectiva:
2 de octubre de 2010. Marcha anual en conmemoración a los caídos en la matanza de Tlaltelolco en 1968 y Marcelo Ebrard tenía preparado a todo un contingente apostado sobre Eje Central para recibir a los estudiantes de diversas instituciones que marchaban rumbo al Zócalo Capitalino.
Los estudiantes no son delincuentes, antes bien, son uno de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad y es una obligación civil (nuestra obligación) velar porque no sean reprimidos, ni vejados. Todos los estudiantes por igual son las generaciones que vienen detrás de nosotros, son el futuro de este país.
Aquel 2 de octubre, según me contarían después estudiantes que asistieron a dicha marcha, la policía intentó provocarlos a través de los jóvenes anarquistas (que acompañaban a la marcha) para que ellos respondieran y hubiera móvil para ser reprimidos. Afortunadamente, estudiantes de otras escuelas y facultades cerraron filas en torno a los agredidos y no cayeron en la provocación. Este es el verdadero rostro de Marcelo Ebrard Casaubón...
En las imágenes se ve la manifestación escoltada por la policía capitalina hacia las inmediaciones de la estación del metro Insurgentes. Con el levantón frustrado, la policía buscaba diluir la manifestación de estos muchachos. ¿Razón para intentar amedrentarlos? Marcelo Ebrard estaba recibiendo a Felipe Calderón en el Monumento a la Revolución, inaugurándolo ese día después de la remodelación (que nos habrá salido en quién sabe cuántos millones de pesos de nuestros impuestos) por los patéticos y costosísimos festejos del bicentenario.
Por supuesto: Marcelo no podía permitir que un grupo de rijosos jóvenes (seguramente porros y drogadictos que no estudian y tienen cara de ser delincuentes de alta peligrosidad) enturbiara la visita de su distinguido personaje, cuyo pseudo-gobierno, por cierto, reconoce y avala y así se veía Eje Central mientras la marcha conmemorativa del 2 de octubre se acercaba...
Por supuesto, Laura es una de las fichas más que tiene Marcelo para lanzarla como candidata al Gobierno del DF; por supuesto: están presionando a los locatarios para que hagan el cambio de cédula...
10 de noviembre de 2011. Marcelo Ebrard manda a la policía capitalina a reprimir -y con lujo de violencia- el movimiento pacífico de trabajadores de Mexicana exigiendo se resuelva su situación para regresar a trabajar. Saldo: 11 pilotos detenidos, 4 lesionados (fotos tomadas de: Carlos Bungy y Aspa Pilotos [facebook] y Patto Lucas [@Twitter])...
Marcelo Ebrard es un traidor a la izquierda.
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