La columna de hoy de Julio Hernández

Astillero
Julio Hernández López
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■ Los no recomendables

■ Reunidos en Tesorería

■ Savater: saber y no saber

No es mucho lo que se puede esperar de un encuentro de pesos pesados en materia de colusión que para hablar de la manera como hacen que combaten el gran negocio compartido del narcotráfico se reunirán en un salón denominado... Tesorería. Pero será en ese descriptivo sitio de Palacio Nacional donde hoy se realicen esfuerzos olímpicos para tratar de persuadir al respetable público de que se va avanzando en el cumplimiento de los pomposos compromisos de mejoría que 100 días atrás hicieron. Vanas ilusiones ceremoniales. Palabrería dicha en serio, como si de verdad... El mismísimo Elías Kuri, coordinador general de Iluminemos México, el ente organizador de la marcha blanca y veladora, ha advertido: “¿De qué sirve que nos hablen de avances porcentuales o de puntos cumplidos, cuando sigue habiendo personas secuestradas? (...) Si son 74 o 740 puntos, ¿de qué nos sirven, si los resultados siguen siendo muertes, secuestros y asaltos? No caigamos en la trampa de calificar el proceso, porque lo que importa son los resultados”.

Calderón sigue embalado en su impune caravana oratoria. Ayer, frente a restauranteros, dijo que a él no le interesa “cuántos años lleven coludidos” algunos servidores públicos federales con la delincuencia, pues “la verdad es que vamos a actuar como hemos actuado, con determinación”. Puso en seguida sobre la mesa algunos ingredientes de sus recetas exitosas: “hemos actuado contra todas las estructuras del crimen organizado en México, y agarrado una buena parte de sus liderazgos; si es el cártel de Tijuana, es el señor Eduardo Arellano Félix; o si es del cártel del Pacífico, el señor Beltrán Leyva, alias El Mochomo, o Reynaldo Zambada; o si es del cártel del Golfo, para citar los de las últimas tres semanas, es El Hummer, y es El Amarillo, y es El JC, y una serie de criminales que hemos puesto tras las rejas”. Ni siquiera se acordó del cártel de Sinaloa ni de Chapos inalcanzables, pero sí aportó estadística: “de la firma del Acuerdo por la Seguridad, del 21 de agosto a la fecha, hemos atrapado a una banda de secuestradores cada dos días en el país”.

En la tragicomedia nacional aparece Raúl Ortiz, hermano del chofer al que Nelson Vargas mencionó como probable responsable del secuestro de su hija y narra en radio a Carlos Loret de Mola cómo, luego de que le tomaron rayos X en el hospital de Xoco, y a pesar de estar oficialmente detenido, “los federales no estaban conmigo y la puerta estaba abierta. Salí caminando, los policías del hospital, de la puerta, jamás me dijeron nada, y tomé un taxi y me fui a mi casa”. Es evidente que Calderón se equivoca cuando dice que la mitad de las policías estatales y municipales no son “recomendables” pues, por lo que se ve, esa calificación es aplicable también a los federales y llega, en todos los niveles, a proporciones muy superiores a la mitad piadosa que dijo el michoacano.

Astillas

El filósofo español Fernando Savater debió haber sentido miedo si hubiera sabido el historial de los acompañantes inmediatos que tuvo en Puebla, el pasado miércoles, durante una conferencia magistral denominada El ciudadano sin miedo a saber. Su anfitrión (y amigo personal) fue Ricardo Velázquez, quien fue “asesor jurídico del gobernador Mario Marín para el caso Lydia Cacho” y ahora dirige un Centro de Estudios Mundiales sobre la Legalidad, según la nota de Alonso Fragua, en La Jornada de Oriente, quien agregó: “previamente a la participación de Savater, el director del Cemle ocupó cerca de 10 minutos para promocionar su organismo y presentar a los políticos que lo acompañaban en el podio, al lado del filósofo: Guillermo Deloya, secretario particular de Marín; Javier López Zavala, titular de la Sedeso; Juan José Salinas Pasalagua, hijo de Raúl Salinas de Gortari, y Alejandro Montiel Bonilla, secretario de Cultura del estado”. El hermano del ex presidente de la República estuvo entre el público durante la conferencia de Savater, en una comida con éste y, según Mario Alberto Mejía, en La Quinta Columna, “el célebre hermano incómodo (...) conversó con Savater en diversos momentos”. Marinismo y salinismo, ¡uy, qué miedo a saber!... El maestro del periodismo encubierto, Günter Wallraff, ha tenido una extraordinaria recepción durante su semana de estancia en México, que culmina el próximo domingo en la Feria Internacional del Libro de Guadajalara, donde participará a las seis de la tarde en una conferencia con Sanjuana Martínez, moderada por Rubén Martín Martín, sobre El periodista incómodo. El autor de Cabeza de turco y El periodista indeseable dijo en una sala de Bellas Artes, en la capital del país, que “el capitalismo rapaz llegó a su límite y será sustituido por un movimiento democrático”, y se ganó a los muchos jóvenes que abarrotaron la Manuel M. Ponce al pedirles que no lo trataran como un maestro, pues se considera “un aprendiz perenne” (nota de Mónica Mateos-Vega, en La Jornada del pasado miércoles). Por cierto, Sanjuana dará a conocer el 4 del mes en puerta, también en la FIL, su nuevo libro, Periodismo incómodo, editado por la Universidad Autónoma de Nuevo León y prologado y presentado por Elena Poniatowska... La Asociación Tech Palewi, una de cuyas directoras es Ana Gladys Vargas, y la Red Democracia y Sexualidad, coordinada por José Ángel Aguilar, han organizado un foro para rechazar la violencia ejercida contra mujeres, que consistirá en la participación de hombres (entre ellos, el autor de los presentes teclazos) que durante un minuto hablarán sobre el tema. El acto, denominado Un minuto contra la violencia y una vida por la equidad, se realizará este domingo, de las 10 de la mañana a las 11.30, en el antiguo hospital de Concepción Béistegui, que hoy es un asilo de ancianos con el mismo nombre, en Regina 7, entre Bolívar e Isabel la Católica, del Centro Histórico de la ciudad de México... México, territorio Slim, con un proyecto de nuevo aeropuerto, en Neza, tras el cual está el capital del expansivo multimillonario... Y, mientras Javier Bardem se decide a interpretar a Pancho Villa en una película de Emir Kusturica, ¡feliz fin de semana, con Medina Mora proponiendo tolerancia cero en la mártir Ciudad Juárez!