La reforma a la seguridad social, está dirigida para abrir los servicios médicos públicos a las aseguradoras, elevando la transferencia de fondos a los negocios privados de la salud y eliminar de manera gradual las jubilaciones y pensiones, para establecer la jubilación universal de mil 090 pesos para todos los trabajadores mexicanos, denunció Antonio Vital, integrante de la Alianza de Trabajadores de la Salud y empleados públicos.
Por ello, urgió en la necesidad de promover la más amplia confluencia de organizaciones sociales, académicos y ciudadanos en defensa del derecho a la salud y la seguridad social, hoy amenazadas por la reforma del "Sistema Universal de Salud" que pretende cancelar la atención medica integral en el IMSS, ISSSTE, reduciendo los servicios de salud al paquete básico del Seguro Popular.
Explicó que la mercantilización de los servicios médicos además de representar un alto costo para los mexicanos, significará la mayor precarización y explotación de los trabajadores de la salud.
Antonio Vital destacó que el negocio de la salud descansa en el alto cobro a los pacientes ya convertidos en "clientes" y en la disminución del costo laboral, que se aprecia en el desmedido crecimiento de las cuotas de recuperación en los servicios de salud del seguro popular y los institutos nacionales.
Aunado a lo anterior, puntualizó, se suma el ataque en la última década contra el contrato colectivo de los trabajadores del Seguro Social y el empleo en el seguro popular de más de 90 mil trabajadores con salarios 50 por ciento inferiores a los del sistema de salud, sin estabilidad en el empleo, sin seguridad social y prestaciones.
Pero la reformas a la seguridad social de los últimos meses del año, sobre el seguro de desempleo a costa del fondo de vivienda de los trabajadores, el establecimiento de la pensión universal y los cambios administrativos financieros en la ley general de salud no avanzaron en su totalidad a las propuesta gubernamental de usar el 20 por ciento del fondo de vivienda y en los cambios al IMSS e ISSSTE para armonizar el pensión universal con los regímenes pensionarios de la seguridad social.
En este sentido, consideró importante la realización de la evaluación de las reformas a la seguridad social y vincular la campaña en defensa de la salud y la seguridad social con el rechazo a las reformas neoliberales que están desmantelando las instituciones públicas y los derechos económicos y sociales de los mexicanos como son la reforma laboral, educativa, energética, entre otras.
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