jueves, 8 de agosto de 2013

No hay esperanza de que el progreso signifique una alternativa para resolver los problemas

El ex rector de la UNAM es considerado uno de los grandes creadores mexicanos del siglo XX
Foto
El Stunam realizó un homenaje sorpresa al ex rector Pablo González Casanova en Ciudad UniversitariaFoto Carlos Cisneros
Emir Olivares Alonso
 
Periódico La Jornada
Jueves 8 de agosto de 2013, p. 11
Destacado humanista y estudioso del fenómeno social, sociólogo de gran renombre a escala internacional, referente de la izquierda y uno de los grandes creadores mexicanos del siglo XX.
Así fue descrito Pablo González Casanova (Toluca, estado de México, 1922), ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), durante un homenaje sorpresa que le rindió el sindicato de trabajadores de esa casa de estudios.
En emotiva ceremonia, donde fue reconocido por sus importantes aportaciones a la educación, la sociología y la política, González Casanova ofreció una conferencia magistral en la que aseguró que la crisis actual del capitalismo no es una más, no es cíclica ni de larga duración, sino que se trata de una crisis terminal, ante la imposibilidad de ese modelo de continuar dominando el mundo sin acabar con él.
Reconocido internacionalmente, el universitario cursó sus estudios en la UNAM, El Colegio de México y la Escuela Nacional de Antropología e Historia; realizó una maestría en ciencias históricas y después obtuvo el doctorado, con especialidad en sociología, por la Universidad de París. Ocupó la rectoría de la máxima casa de estudios entre 1970 y 1972, desde donde creó el Colegio de Ciencias y Humanidades y el sistema de universidad abierta.
Es investigador emérito del Sistema Nacional de Investigadores. En 2003 fue condecorado por la Unesco con el Premio Internacional José Martí, por su defensa de la identidad de los pueblos indígenas de América Latina. En septiembre de 2011 fue investido por la UNAM con el doctorado honoris causay en octubre de 2012 fue galardonado con el premio Daniel Cosío Villegas de El Colegio de México.
En su conferencia, titulada La sociedad del conocimiento y el desconocimiento en América Latina,advirtió que en el panorama mundial la justicia, la democracia, la paz y los derecho humanos están derogados y negados para la mayoría de la humanidad, sin esperanza o proyecto de que la civilización, el progreso y el desarrollo signifiquen una alternativa para resolver los problemas.
El también investigador y profesor emérito de la UNAM indicó que esto se fortalece debido a que hoy el desarrollo científico y tecnológico está guiado por la lógica de la acumulación del capital, a costa no sólo de la explotación de la mayoría de la humanidad, sino del desempleo creciente.
Avances tecnológicos como la cibernética, dijo, con el desarrollo de robots –que cuentan con sistemas de autorregulación, adaptables y creadores capaces de funcionar de manera muy parecida al cerebro humano– han generado que a niveles mucho mayores que en el siglo pasado las corporaciones sustituyan a los trabajadores por máquinas.
Estos desarrollos salen muy baratos y no se necesita pagar salarios, prestaciones ni jubilaciones, señaló González Casanova ante miembros del Sindicato de Trabajadores de la UNAM (Stunam) y figuras del pensamiento de izquierda que lo acompañaron en este homenaje, como Miguel Concha, Gilberto López y Rivas y Miguel Álvarez.
Proyecto emancipador más rico en la historia de la humanidad
Autor de La democracia en México,acotó que frente a esta realidad se levanta el proyecto emancipador más rico en la historia de la humanidad, en el cual se vincula la participación de los ciudadanos y las comunidades en la toma de decisiones, y la idea de que el interés social es primordial y debe prevalecer en las determinaciones que tomen las comunidades de las naciones y del mundo.
Dos objetivos que se creyeron antagónicos se han juntado de tal manera que no se concibe uno sin otro: el socialismo y la democracia (que no es sólo el derecho a ejercer el voto, sino a decidir). No hay posibilidad en ningún socialismo si no hay democracia y no hay posibilidad de democracia sin socialismo.
Agregó que las luchas contra el imperialismo y la independencia, así como la de clases se mantuvieron separadas, pero hoy se juntan. La primera se consideró que era de la burguesía, mientras que la lucha de clases no se debía mezclar con ninguna otra. Ahora este tipo de antagonismos metafísicos han sido abandonados y nos damos cuenta de que hay países donde a la vez se tiene que escuchar en el terreno de la lucha de clases, con los trabajadores, y en el terreno nacional, contra la opresión colonial.
El dirigente del Stunam, Agustín Rodríguez, destacó las contribuciones, labor social y trayectoria de González Casanova, pero en particular aplaudió su concepción –durante su administración al frente de la máxima casa de estudios– para no considerar a la Universidad Nacional como la parte patronal en la relación con los trabajadores, lo que propició el desarrollo que hasta hoy ha alcanzado este gremio.

No hay comentarios: