lunes, 22 de octubre de 2012

Ponencia al Congreso de Morena BJ : César Vargas López

MORENA: ¿Herramienta del pueblo trabajador mexicano o un trampolín para oportunistas mas?

El llamado del 9 de Septiembre en el Zócalo capitalino del compañero Andrés Manuel López Obrador a discutir distrito electoral por distrito electoral el futuro del movimiento más importante del país MORENA ha generado una gran expectativa entre todos aquellos que aspiramos a la transformación del país a favor de los que menos tienen y de los oprimidos.
Así es que frente al próximo Congreso en el Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) algunos compañeros señalan la necesidad de que MORENA se convierta en un Partido; otros, que debe permanecer como asociación civil; el compañero Paco Ignacio Taibo II opina por ejemplo que MORENA debe ser solamente un movimiento social con registro.
El desprecio que una buena parte de las bases de MORENA tiene para con la idea de que el movimiento se constituya en Partido Político tiene una raíz muy sana. La gran desconfianza que instintivamente tienen respecto a la experiencia con los actuales Partidos (corrupción, burocratización, y al final del día “mas de lo mismo”). Esta situación sin lugar a dudas es muy sana. El temor a no seguir los pasos del PRD es evidente.  Sin embargo es necesario que tengamos claridad sobre lo que es un Partido Político, la idea mas difundida es que es una estructura para ganar votos. Bajo esta dinámica se tiende a generar una camarilla de burócratas “especialistas u operadores electorales” en la dirección de dicho movimiento, que tiende a pensar en la obtención de votos como fin principal sino que único del partido. Esto hace caer, más temprano que tarde, en las viejas prácticas del priismo, a saber: Clientelismo, compra y coacción de votos y corrupción de las autoridades electorales. Esto producto de las condiciones de pobreza de gran parte de la población que vende su voto por unas migajas de los grandes partidos de la burguesía.
¿Que podemos anteponer ante esta situación? ¿Estamos condenados como mexicanos a ver la política únicamente como una guerra de clientelas políticas? Nosotros nos negamos a renunciar a la política como herramienta de liberación humana y social.
Necesitamos organizar al MORENA de tal forma que acompañe a todos los movimientos sociales de nuestro país, que los profundice y colabore activamente a sus victorias, a las victorias populares.
Para esto es necesario no encasillar la dinámica del MORENA en lo electoral. ¿Y cómo logramos esto? Una burocracia partidista trataría de hacer lo mínimo únicamente para “cumplir el requisito” y fijar postura ante las luchas populares, pero las bases sociales son las que sienten las injusticias y las que están más preocupadas por la transformación del país, las que si tienen necesidad de dicha transformación. Necesitamos que las bases sean la garantía de la lucha eficaz y audaz que realice el partido.
Es por ello que en la organización de MORENA se deben generar los mecanismos para que sean las bases las que tengan el control sobre la dirección del Partido.
¿Como lograremos esto? En Izquierda Socialista tenemos dos claras propuestas para garantizar el control político del Partido a las bases:
Todo miembro de MORENA que ocupe un cargo de representación popular deberá entregar su salario integró a la organización quien le retribuirá con el salario de un obrero cualificado, no mayor a los 10 salarios mínimos. El Dinero excedente de salarios se utilizará para apoyar la lucha del pueblo mexicano por su emancipación. Si el MORENA requiere pagar a compañeros que trabajan de tiempo completo para la organización tampoco podrán tener un salario mayor de 10 salarios mínimos.
Cualquier dirigente a cualquier nivel puede ser revocado de su mandato en cualquier momento cuando la base de la organización lo considere pertinente.
Con estas dos claras propuestas eliminamos a los oportunistas y arribistas que quieran utilizar al Partido como trampolín político únicamente para enriquecerse a costa de la lucha del pueblo por su emancipación. Además garantizamos que la dirección tenga que tener siempre en cuenta el estado de ánimo de las bases así como su deseos y el programa político que emane de las mismas, evitando así que morena que “chuchice”
    Para nosotros un Partido no es una estructural electoral. Es ante todo  un conjunto de ideas políticas organizadas de forma estratégica, es decir un programa político, con unos métodos y estatutos, que retoma y  genera tradiciones y se propone la toma del poder. Es decir, es un generador de conciencia política a nivel colectivo. Es también un recopilador de las experiencias políticas pasadas para evitar cometer los errores del pasado y para enriquecer la práctica colectiva para la acción en grandes momentos coyunturales o en la vida cotidiana del ciudadano para la toma del poder por parte de los intereses que defiende. El pueblo trabajador debe tomar el poder que detenta la oligarquía, y su instrumento es un partido político suyo, propio, que obedezca al pueblo trabajador.
Un partido con gente preparada en la formación política, que no es lo mismo que la preparación académica, la mayor parte de la formación política se obtiene en la militancia “constante y sonante”, un partido así habrá de superar los sectarismos y unificar las luchas donde quiera que se den éstas, y profundizándolas para alcanzar la victoria. Un Partido así utilizaría toda su capacidad organizativa en la práctica para ayudar a los movimientos sociales, y no solamente haría declaraciones de apoyo desde la cómoda distancia.
Esto solamente será posible si existen comités de base “constantes y sonantes” y no viles simulaciones para cumplir los requisitos. Es por ello que consideramos que no se deben organizar estos comités con una perspectiva electoral, sino que la organización debe partir de la lógica de los centros de trabajo, de los centros de estudio y los barrios, es decir, donde son los espacios naturales de la población de convivencia, de problematización y sobretodo de acción. De lo contrario estamos dando un paso adelante hacia la burocratización, hacia la “chuchización” del MORENA.
Es en estos comités de base donde existe la iniciativa, donde se discutan las propuestas de la dirección del Partido y, si es debido, se corrijan.
Con estas medidas podemos evitar caer en los errores del proceso del PRD en que degeneró. Serán la mejor vacuna contra el chuchismo. Y construirá a MORENA como una alternativa real de combate por la transformación del país, el abandono del neoliberalismo y eventualmente del capitalismo rumbo a una sociedad mas justa donde las aspiraciones sociales de la humanidad se puedan ver reflejadas en una realidad material que nutra la experiencia humana de toda su potencialidad. Es decir, una sociedad socialista.
Es por ello que nuestra organización tiene la clara idea de que el siguiente paso para hacer de MORENA el instrumento de lucha social por una transformación real del país y no solamente un cambio de colores en la administración, es necesariamente la conformación de un partido político del pueblo trabajador mexicano, que este orgánicamente conectado con la dinámica social de las mayorías trabajadoras y sus comités ejerzan el control sobre una dirección formada en la lucha social y política por la emancipación.
Un partido que sea ante todo un ente pensante y reflexivo de la realidad y no un generador de propaganda sin ton ni son. Que sea capaz de pasar a la acción y de perfeccionarse con una activa vida democrática interna, que no estará supeditada a las buenas voluntades de los liderazgos burocráticos, sino que será norma de oro para evitar la chuchización del MORENA y hacer de nuestro movimiento el organizador de la esperanza nacional contra el capitalismo y su lógica deshumanizante y voraz.
Nos pronunciamos a favor de MORENA como partido político, pero exigimos sean las bases el corazón y empuje del movimiento y que en los estatutos esté asegurado dicho control. También tener en los estatutos la imposibilidad de los representantes populares de ganar mas de 10 salarios mínimos, lo cual ayudará a que dicha dirección no pierda su esencia de lucha colectiva al ganar y vivir con los mismos recursos de un este pueblo trabajador que ahora se empieza a levantar de su letargo y pronto encontrará las formas de para librarse de los parásitos que ahora tanto molestan.
¡Hasta la victoria siempre!

César Vargas López


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