A pesar de que en su cuarta visita a la ciudad en lo que va de este año el presidente Felipe Calderón Hinojosa encontró un panorama social peor que el de febrero pasado cuando vino aquí por primera vez con la intención de reconstruir Juárez, su participación fue la misma que hace ocho meses: vino y escuchó la misma problemática, pero nada corrigió, ni respondió con planes o acciones inmediatas que permitan a los ciudadanos tener la esperanza de que la situación local puede mejorar.Por lo que la visita que hizo el Ejecutivo federal el martes pasado fue vista sólo como un acto protocolario para dar la bienvenida y dar el “espaldarazo” al gobernador César Duarte Jáquez y al presidente municipal Héctor Murguía Lardizábal, quienes recién asumieron sus cargos.
“De nada sirve que venga Calderón a la ciudad si no da respuestas concretas y viene a escuchar los mismos planteamientos que le hicieron por primera vez en febrero pasado porque nada corrige, porque nada atiende, porque ni él ni sus más cercanos colaboradores están enterados de lo que en realidad pasa aquí, así estamos fregados, así a qué viene”, consideró la analista política Edna Lorena Fuerte González.
Dirigentes de las cámaras empresariales criticaron que el presidente Calderón Hinojosa todavía desconozca la realidad de Juárez y base sus decisiones en datos que le presentan sus secretarios.
Federico Ziga Martínez, del Consejo Coordinador Empresarial, indicó que “hay una completa desinformación por parte del presidente de la República ya que sus secretarios no le dan datos precisos para que pueda tomar una resolución real”, señaló.
“No tiene información sobre por qué estamos pidiendo la amnistía, no sabe cómo está el problema de los autos y eso lo mostró al decir que la importación de un auto cuesta 2 mil pesos”, señaló Ziga Martínez.
“(Calderón Hinojosa) pedía información sobre el impuesto federal dando cifras distintas a la realidad, esto nos lleva a que las cosas no se hagan como se necesita porque el presidente no sabe cómo están”, indicó el líder empresarial.
Ziga Martínez añadió que “algunos de los secretarios nada más vinieron a hacer el oso”, pues pusieron en evidencia que no saben lo que está sucediendo, “fue el caso de cada uno de los temas”, señaló.
El activista social José Luis Flores advirtió que resulta grave que desde el Gobierno federal los indicadores cuantitativos de “Todos Somos Juárez” sean positivos cuando la realidad local se impone a la radiografía oficial que se le presenta al presidente.
“La evaluación está sobreexpuesta, es un rotundo deterioro de la vida comunitaria, de la vida social y comunitaria. Ciertamente hay mayor inversión en programas sociales y estamos en la agenda nacional, pero eso no quiere decir que vayamos mejorando”, afirmó.
Edna Lorena Fuerte agregó que si bien la primera visita del presidente generó esperanza en los ciudadanos, ahora la gente ya no cree porque no ha pasado de la etapa de escuchar.
“Sin resultados concretos las visitas del presidente se convierten incluso en una molestia para la ciudadanía y hasta en un insulto por la cuestión de gastos, porque la gente quiere que dé resultados”, sostuvo.
Durante la reunión del martes, el secretario de Economía, Bruno Ferrari García de Alba, dijo que los negocios y el empleo en Juárez están creciendo, mientras que, según datos del IMSS, en los dos últimos meses se han perdido casi mil empleos. El funcionario tampoco pudo responder al presidente cuánto cuesta la importación de un auto en Juárez.
Jorge Ruiz Garcés, presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Ciudad Juárez, indicó que los secretarios deberían de ocuparse más de la ciudad. “Que se metan más a la parte minúscula, la parte que en realidad cuenta para una ciudad como la nuestra”, señaló.
“Aquí un campo de futbol no va a solucionar de fondo las cosas… qué bueno que lo hizo y que tenemos un espacio más para los jóvenes, los necesitamos, pero esto es de ir más al fondo”, abundó el líder hotelero.
“Hoy siguen cerrándose empresas, tenemos extorsiones y secuestros, y eso no lo ven como una situación difícil para la ciudad, pero sí me gustaría que el presidente vea las cifras reales sobre cuántos comercios han cerrado tanto por la crisis económica, como por la delincuencia”, señaló.
“Y si eso no es suficente para conceder un régimen de excepción fiscal, entonces qué se necesita”, cuestionó Ruiz Garcés.
Guillermo Soria Magaña, director de la Canaco, dijo que los negocios en Juárez siguen con la misma problemática que tenían en febrero. “Es real la afectación económica en las empresas que al no tener ingresos y al mantener sus obligaciones fiscales mejor cierran… el Gobierno no quiere verlo así”, señaló Soria Magaña.
El activista social José Luis Flores expuso que, a su juicio, hace falta que el presidente ponga a trabajar a sus equipos, a sus secretarios, porque si bien resulta difícil conocer la situación social de Juárez hasta para los que aquí viven, en su caso tiene la posibilidad de tener información de primera mano, verídica y confiable para poder avanzar en la reconstrucción de la ciudad.
Ante la falta de resultados positivos, Fuerte González y Flores Cervantes coincidieron que la cuarta visita de Calderón en este año y la sexta de su sexenio fue más con fines protocolarios que para atender la problemática local.
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