La redacción de proceso.com
NUEVO LAREDO, Tamps., 16 de julio (apro).- Al menos 12 personas muertas y 21 heridas fue el saldo que dejaron tres enfrentamientos entre sicarios del crimen organizado y elementos del Ejército Mexicano en esta ciudad, informó hoy la Secretaría de Gobernación.
Por medio de un comunicado, la Secretaría que ahora encabeza José Francisco Blake Mora, dio a conocer que dos civiles y un militar, así como “nueve delincuentes” perdieron la vida en las balaceras. Asimismo, informó que los 21 heridos son civiles que no tienen relación alguna con la delincuencia.
La Secretaría de Gobernación condenó “enérgicamente los actos cobardes” de las organizaciones críminales que atentan contra la vida y la integridad de la sociedad y de las autoridades mediante la violencia.
Además, manifestó sus “más sinceras condolencias” a los familiares de los dos civiles y del militar que fallecieron durante los enfrentamientos.
En respuesta a los ataques del Ejército, la delincuencia organizada realizó diversos bloqueos de vialidades en distintos puntos de esta ciudad fronteriza.
Pese a que la información se divulgó por medio de las redes sociales y de internet, ninguna autoridad estatal o local confirmó los hechos.
Sin embargo, el consulado de Estados Unidos en esta ciudad emitió un comunicado en su página web para advertir a sus connacionales de lo que estaba ocurriendo en la ciudad:
“Hemos recibido informes creíbles de violencia que se está registrando ahora entre las organizaciones de tráfico de drogas y el Ejército Mexicano en Nuevo Laredo. Tenemos informes fidedignos de que se están utilizando granadas”, señaló el consulado estadunidense.
Asimismo, el consulado alertó sobre los bloqueos de avenidas cometidos por los grupos delictivos: “Los narcotraficantes habrían bloqueado al menos una avenida principal, López de Lara, y robado varios vehículos. Otras calles también pueden ser bloqueadas.”
De acuerdo con testigos, los enfrentamientos entre soldados y sicarios se iniciaron en la colonia Infonavit Fundadores, y luego se extendió a distintos puntos de la ciudad,
Como respuesta, los narcotraficantes recurrieron a bloquear diversos tramos de las avenidas César López de Lara, Revolución y Eva Sámano, así como la carretera que conduce a Anáhuac, Nuevo León.
En todos estos puntos, como ya ha ocurrido en las ciudades de Monterrey, Reynosa y Matamoros, los conductores de tráileres, autobuses, camiones urbanos o carros particulares que pasaban en esos momentos por las calles, eran obligados a detenerse y a entregar sus unidades para que sirvieran como obstrucción de esas arterias.
Ni agentes de tránsito, ni policías municipales acudieron a la zona para retirar los vehículos que bloqueaban las calles, ni para advertir a los automovilistas que evitaran la zona donde se registraba el enfrentamiento.
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