Durango y su jeferío…

• Morir en La Laguna
• El costo detrás de 175 mdd

Indudable que el escenario político se le complica cada vez más al gobernador Ismael Hernández Deras. Durango, en tiempo récord, se ha convertido en el foco de impunidad, corrupción y, como cereza del contaminado pastel, de atropellos e ilegalidades como las llevadas a cabo por funcionarios —que hasta amparos tramitaron— de su administración en los pasados comicios del 4 de julio, donde surgieron las peores prácticas del distintivo manual tricolor.
En medio del huracán poselectoral —que pronto será original epicentro en la Permanente–, cuyo accidentado camino aún está por definirse, my friend, al buen Ismael se le soltaron sus demonios carcelarios que cumplían con dos simpáticos trabajos de esa doble vida que acompaña ese doble discurso y el cinismo que ya caracteriza al desgastado mandatario… que por cierto no ha recibido un divertido espaldarazo de la cúpula priista que ve con recelo el atractivo desmadre de su ilustre correligionario.
El escándalo de los reos-sicarios o sicarios-reos que salían sin problema alguno de las llamativas instalaciones provoca la típica (e ingenua) pregunta de ¿cuántas veces se habrán ausentado del Cereso 2 este grupito de delincuentes para andar levantando… datos o llevando a cabo sugestivas órdenes? Porque para estar cruzando fronteras estatales e ir por un objetivo claro, como fueron las personas ejecutadas en Torreón, Coahuila… se necesita tener una, digamos, estructura criminal y una amplia red de complicidades para aventarse el delicado numerito, yes?
Esa red que, but of course, abarca varias autoridades y que encendió de inmediato los focos rojos bilaterales y federales. Porque las explicaciones y justificaciones esgrimidas por el controvertido gobernador no sólo fueron lamentables, sino literalmente de risa loca.
El asunto, amable lector, sigue in crescendo en el terreno de la seguridad y en paralelo... en el ámbito electoral. Sobre todo si se leen con cuidado las recientes declaraciones de Max Cortázar, el nuevo vocero de la PANdilla, exigiéndole a Hernández Deras indagar los contubernios en su administración con la “ridícula minoría” que, en la cadena de mando estatal, tripulaba a la directora del reclusorio, Margarita Rojas, quien tenía jefe… que tiene jefe. Léase como que en el blanquiazul (de Los Pinos) le están demandando una investigación del jeferío duranguense.
No vaya a ser que en una de ésas comience a conocerse out of the blue (institution) la cadenita (del retrete) de la corrupción que puede comprometer aún más al buen Ismael, que suma peligrosos taches a su desgobierno con la lindura señalada ayer por la CNDH de que levantaron a cuatro reporteros en la región lagunera.
Cuatro periodistas. Cuatro comunicadores. Un reportero de Multimedios y otro del periódico El Vespertino y dos camarógrafos de Televisa.
Chingón.
La capacidad de la sorpresa es diariamente rebasada por los hechos que acompañan esta irreflexiva guerra, perdón, lucha, que devela una inédita impunidad y corrupción estatal. Sicarios que se hacen pasar por reos y reos que trabajan de sicarios en una larguísima serie de encubrimiento y cohecho. Levantones. Terror en La Laguna mientras su mandatario da señales de autorizar el robo de urnas y la intimidación a electores con tal de no perder… lo que ya perdió.
Hoy su gestión muestra el fracaso de políticas públicas, sociales y de seguridad ,está última en el ámbito de su responsabilidad.
No sorprende que ante tal descontrol de regiones enteras y zonas fronterizas donde la ley es la aplicada por esa “ridícula minoría”, la Cámara de Representantes de los Estados Unidos haya aprobado otorgar 175 mdd este año para ayudar a Vivir Mejor a Felipe Calderón peeero… (siempre hay un pero)
El texto aprobado le solicita al Departamento de Estado que explique cómo va esa tenebrita del traslado de las responsabilidades en seguridad pública por parte de nuestras fuerzas armadas hacia las corporaciones policiacas.
Ni más, my friend, pero ni menos. Mexico, we have a problem.
Mmmta.
Por la mirilla
¿Y Diego Fernández de Cevallos, apá...?
gomezalce@aol.com