martes, 30 de marzo de 2010

Pedidos a domicilio, un termómetro del miedo en Monterrey, NL

Este servicio aumentó 40% en una semana ante el temor a balaceras y narcobloqueos viales: estadísticas.

AFP
Publicado: 30/03/2010 08:55

Monterrey, NL. En la acaudalada Monterrey, tercera ciudad más grande de México, el temor a salir y toparse con una balacera o con vías bloqueadas por narcotraficantes, disparó los pedidos a domicilio de comida, medicina y provisiones, un termómetro del miedo de sus casi 4 millones de habitantes.

"Ahorita es mejor ya ni salir cuando está oscuro porque de repente empiezan los balazos", dice Darío Guzmán, de 53 años y obrero de una fábrica de electrodomésticos.

La capital del estado de Nuevo León, sede de firmas trasnacionales, vivió hace una semana 31 bloqueos de avenidas por pistoleros que también se enfrentaron con militares en el campus del prestigioso Tecnológico de Monterrey, donde murieron dos estudiantes.

La violencia no se ha detenido en Nuevo León. El jueves pasado seis presuntos sicarios cayeron al enfrentarse a militares en una comunidad rural a 96 kilómetros de Monterrey.

Guzmán dice que su familia suspendió las habituales salidas para comer tacos y tortillas. "Mejor las pedimos y que nos las lleven", afirma.

Esa reacción fue inesperada, incluso para los negociantes. "Para nosotros fue sorpresa ver las primeras estadísticas, de viernes al lunes hablamos de hasta 40 por ciento más de servicios (a domicilio), a comparación a otros fines de semana", comenta Ernesto Luna, presidente de la Cámara de Comercio en Pequeño.

Las mayores demandas se registraron a farmacias y restaurantes, agrega el representante de la asociación que reúne 10 mil pequeños negocios.

"Creo que se debe al miedo que todos tenemos de salir, ahora únicamente aprovechamos el tiempo (en la calle) para lo indispensable: trabajar o hacer pagos, pero las compras, incluyendo la comida, todo se puede hacer desde casa", comenta.

La secretaria de Seguridad de Nuevo León explica que los crímenes se exacerbaron las últimas semanas por disputas de Los Zetas, -ex soldados de élite reclutados por el narcotráfico- con sus antiguos patrones del cártel del Golfo.

Pero lo ocurrido el viernes 19 fue una inédita muestra de la capacidad de intimidación de los delincuentes.

Mientras militares realizaban detenciones en varios puntos del estado, escuadrones armados salieron a las calles de Monterrey, pararon a los automovilistas para obligarlos a bloquear el paso con sus vehículos y luego les quitaban las llaves o les pinchaban las llantas.

Nuevo León es uno de los seis estados fronterizos con Estados Unidos, los más afectados por la violencia en México donde se atribuye al crimen organizado 15 mil homicidios en tres años.

La situación de estas zonas fronterizas fue central en la agenda del encuentro de hace una semana entre autoridades mexicanas y una delegación enviada por Estados Unidos con la secretaria de Estado, Hillary Clinton, a la cabeza.

Los regiomontanos han optado por vivir puertas adentro.

El tráfico vehicular sólo se ve en las horas de ingreso a clases y oficinas, pero al caer la noche las principales avenidas lucen semivacías.

El incremento de pedidos a domicilio "ha sido más notorio en la zona sur de la ciudad", explica Hernán Pazos, director del sitio web 'atumesa.com' que reportó 950 clientes el fin de semana, frente a los 600 habituales.

Allí se ubica el campus del Tecnológico de Monterrey, donde cayeron los dos universitarios ese viernes en confusas circunstancias durante un choque entre militares y narcos.

Los alrededores de la universidad perdieron bullicio. "La zona se ha sentido sola, hay un (café) Starbucks y varios restaurantes, pero estos días han estado vacíos", comenta Nayhelli García, estudiante de relaciones internacionales de 19 años.

En cambio la Asociación de Tiendas de Autoservicio reportó que el promedio de pedidos por sucursal pasó de 20 a 150 diarios.

"Cuando ya no sabes con lo que te vas a topar en la calle, se dispara el servicio a domicilio", apunta Jesús Marcos Giacoman, vicepresidente de la asociación.

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