Bajo Reserva
06 de febrero de 2010
La muy probable salida de Miguel Ángel Yunes de la dirección del ISSSTE, para ir por su anhelada candidatura veracruzana, abre una enorme interrogante en los círculos presidenciales. ¿Le será respetada esa posición al grupo político de la maestra Elba Esther Gordillo, como fue el caso cuando cambió la Lotería Nacional? Si así fuera, ¿quién será el designado de ese grupo para ocupar el cargo ? Algunos mencionan desde ya al yerno más poderoso del país, el subsecretario Fernando González (Alonso Lujambio aplaude efusivamente). Otros creen que Felipe Calderón aprovechará la ocasión para tomar distancia y recuperar esa posición para los panistas. Todo puede suceder, pero lo cierto es que el creciente coqueteo de la líder del SNTE con el gobernador Enrique Peña Nieto deja al Presidente en duro aprieto: o endurece su posición frente a la maestra para mostrarle su disgusto o, por el contrario, redobla las canonjías y espacios políticos para el magisterio y su Panal.
La presentación la próxima semana del proyecto de reforma política por parte de los senadores del PRI, abrirá un “pulso” en la cumbre entre los más poderosos del partido tricolor. El senador Manlio Fabio Beltrones ha hecho de este proyecto la niña de sus ojos, pero Beatriz Paredes, presidenta del partido, no traga algunas de las propuestas: la reelección de legisladores, por ejemplo. Ambos intentarán mover las piezas claves que son los gobernadores y sus valiosos votos encarnados en los diputados. Paredes tiene a su favor el peso que le proporciona ante los mandatarios estatales un año electoral como es 2010. Beltrones tiene a su favor... casi todo lo demás (entre lo que se encuentra su relación estratégica con los poderes de facto del país). Esta confrontación deja en el aire una pregunta ociosa, pero útil para las charlas de sobremesa de este fin de semana: si por alguna razón el tren de Enrique Peña Nieto se descarrilara, ¿quién tendría más posibilidades de quedarse con la candidatura presidencial, Beatriz Paredes o Manlio Fabio Beltrones?
Leonel Godoy, gobernador de Michoacán, aprovechó la oportunidad que le confirió la celebración del 93 aniversario de la Constitución para, en su calidad de orador oficial, darle una “machucada” al secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont. “Nadie pone en duda que en un país pobre la educación pública, el sistema de salud, la seguridad social y el sistema de justicia basado en la presunción de inocencia deben prevalecer, pues le dan certeza a los más pobres y evitan riesgos de inestabilidad social y política. Hoy invito a velar por el respeto irrestricto a nuestra Constitución, tal como juramos al rendir protesta en nuestros cargos”. El dato reviste singular importancia, pues lo dijo con Felipe Calderón como testigo y en medio de la controversia por los funcionarios michoacanos que fueron detenidos bajo una gran exposición mediática y luego dejados en libertad al no comprobarse su vínculo con el crimen organizado. La herida sigue abierta por las declaraciones de Gómez Mont en el sentido de que nadie le debe una disculpa a los funcionarios incriminados sin pruebas.
Apunte final: sobre la controversia generada por las alianzas entre partidos con signos ideológicos o plataformas distintas, el consejero nacional del PRD Juan Carlos Krausse ofrece toda una cátedra de pragmatismo: se trata de ganar; entonces se pueden hacer alianzas con el PAN o hasta con un priísta despechado para ganarle al PRI, “alianzas hasta con el diablo”. Así, o más claro.
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