El silencio de lo priistas

Salvador García Soto
Serpientes y Escaleras
10 de noviembre de 2009

La escena ocurrió en una reunión privada, el sábado, entre diputados de PRI y PAN que integran las comisiones de Hacienda y de Presupuesto para tratar de aterrizar acuerdos sobre el presupuesto 2010. Los priístas, encabezados por su coordinador Francisco Rojas, presentaron su propuesta de recortes al gasto corriente del gobierno hasta por 80 mil mdp.

Junto a Rojas estaban David Penchyna, Lerdo de Tejada, Manuel Baltazar, entre otros diputados del grupo económico del PRI. Cuando hablaron de recortar 80 mil millones y mencionaron programas como Procampo y Oportunidades, además del presupuesto de la Sedesol, los panistas brincaron.

Julio Castellanos, secretario de la Comisión de Presupuesto, les espetó: “Eso (los recortes) no podemos aceptarlo. Nos sale más barato comprar a los diputados del PRI que aceptar eso”. El comentario acusador del panista no encontró respuesta.

Cuentan asistentes a la reunión que más bien se indignó otro panista, el presidente de la Comisión de Hacienda, Mario Alberto Becerra, quien se levantó de la mesa y abandonó la reunión: “No voy a quedarme en una reunión donde se hagan esas ofensas”, dijo y salió. Pero los aludidos, que eran los diputados del PRI, hicieron como que no oyeron la indirecta, muy directa, del secretario de la Comisión de Presupuesto y siguieron en la reunión.

El dato lo comentan en la propia bancada del PRI, en la que aún hay molestia e indignación contra el coordinador Rojas y su “burbuja”. Si ya tras la aprobación del aumento al IVA había dudas y comentarios sobre el grupo de economistas del PRI que negoció con Hacienda el paquete fiscal, el comentario no atajado de Castellanos sobre “comprar a diputados del PRI” cayó como bomba en la bancada tricolor.

Todavía no hay respuesta a una pregunta que muchos priístas, diputados y senadores, se siguen haciendo: ¿qué fue lo que negociaron Beatriz, Rojas y sus diputados economistas para aprobar el aumento al IVA y los nuevos impuestos en San Lázaro? O lo que es lo mismo: ¿a cambio de qué?

NOTAS INDISCRETAS… El 5 de noviembre, a las 8 am, los senadores del PRD deshicieron un acuerdo con el PRI para sacar el nombramiento de Luis Raúl González para la CNDH. “Vamos con Emilio”, dijo Navarrete a los enviados de Beltrones. Cuando los priístas le pidieron una explicación y le dijeron que lo único que harían sería allanar el camino a Raúl Plascencia, porque Álvarez Icaza no pasaría, la respuesta de Navarrete fue: “Pablo (Gómez) dice que no podemos darles el cargo a los barones de la UNAM”. Y así, al anular a González, voluntaria o involuntariamente, los perredistas facilitaron el ascenso de Plascencia.