La clase política está totalmente dividida del pueblo; mientras los mexicanos padecen aislamiento y marginación, los senadores tienen elevados ingresos, denunció.
Ciro Pérez, enviado, y La Jornada
Chínipas, Chih. La alta burocracia se ha convertido para la sociedad mexicana en una “rémora”, con un gran costo para el país que en el mejor de los casos visita a las comunidades cuando su partido requiere el voto, pero que una vez conseguido no vuelve a cumplir sus promesas, sostuvo aquí Andrés Manuel López Obrador.
“Eso que se llama la clase política está totalmente divorciada del pueblo, mientras los mexicanos padecen aislamiento y marginación, ellos se dan la gran vida, con salarios que en el caso de los ministros de la Corte son del doble de los que gana el presidente de Estados Unidos, Barack Obama; o en el de los senadores, cuyos ingresos son de dos a tres veces superiores a los de legisladores europeos”, denunció.
Eso, agregó López Obrador, “es lo que queremos que ya no siga pasando , ya no queremos que ese grupo se mantenga a costa del retroceso del país, donde hay más pobreza, desempleo y carestía de la vida, orígenes de la violencia, esta clase política ha cobijado también a un grupo de potentados que ya acapararon todo, un puñado de personas que se apoderó de la presidencia de la República y del presupuesto federal”.
López Obrador denunció un fenómeno que se repite en prácticamente todo el país, “el de un pueblo pobre y un gobierno rico. Aquí en Chihuahua, tanto el gobierno como las empresas mineras comparten la responsabilidad de la situación de pobreza e inseguridad, en el caso de las empresas porque la explotación minera no es equitativa, ellos se lo llevan todo y la gente se queda con muy poco, mientras que el gobierno es incapaz de poner freno a la voracidad de estos empresarios”, concluyó.
En la asamblea informativa indicó que los barones del dinero tienen acaparado el presupuesto público, de aproximadamente 3 billones de pesos para este año, y lo utilizan para apoyar y rescatar a banqueros y grandes empresarios. De ahí la necesidad de avanzar hacia la transformación del país, “porque no queremos que México sea país de unos cuantos”, urgió.
Si los 3 billones de pesos del presupuesto público se repartieran con justicia entre las 26 millones de familias mexicanas, a cada una le correspondería un promedio de 10 mil pesos mensuales, abundó. “La grave crisis económica y de bienestar social que padece el país no es por el destino ni por la fatalidad, tampoco porque así nos tocara vivir, sino por el mal gobierno de Calderón”, enfatizó.
Durante el penúltimo día de gira de trabajo por los 2 mil 38 municipios del país, que corresponden al régimen de partidos, sostuvo que no es posible que México esté pasando por una etapa de decadencia, si cuenta con suficientes recursos naturales como oro, plata, cobre, petróleo, gas, tierra para la producción agrícola, litorales y un pueblo trabajador.
Y recordó que, a partir del fraude electoral del 2006, tomó la decisión de encabezar un movimiento que lucha por un cambio real de México y sus instituciones y para hacer realidad el principio de “arriba los pobres y abajo los privilegios”.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
-
La historia de la familia Ramírez es casi como de película. El matrimonio Ramírez compuesto por Enrique Ramírez Miguel y María Villalón...
-
El encargado de despacho de la PGJEM, Alfredo Castillo, explicó que el cuerpo de la niña tardó en emitir un olor fétido debido a que su cue...
-
El voto de castigo. Cartón: Rocha MÉXICO, D.F. (Proceso).- México es un claro ejemplo de la indisociable relación entre una demo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario