La relación del asesor con el hampa se descubrió tras una llamada de El Rey Zambada al ex policía federal: “Ven a salvarme”, le exigió minutos antes de ser detenido. La PGR guardó silencio sobre el caso.
Mar, 20/01/2009 - 05:01
El funcionario federal. Foto: Javier García México.- Édgar Bayardo del Villar, ex policía judicial federal, presunto informante del cártel de los Zambada y de la agencia antinarcóticos de Estados Unidos (DEA), hoy testigo protegido de la PGR, fue consultor de Eduardo Medina Mora cuando éste fue secretario de Seguridad Pública el sexenio pasado.
Según contratos en poder de este reportero, dados a conocer por primera vez ayer por la mañana en W Radio, en febrero de 2006, poco después de que Medina Mora llegara a esa dependencia, Bayardo fue contratado “por honorarios”, directamente por el oficial mayor.
Su labor sería “efectuar actividades consistentes en apoyo en análisis de información confidencial, procesamiento de documentos relevantes, diseño de estrategias, logística de operación e investigación y apoyo a funciones de control y evaluación de personal”.
Esas labores, que normalmente realizan funcionarios de planta de las dependencias de seguridad (sujetos a procesos de control, evaluación y responsabilidades administrativas), eran responsabilidad del consultor externo que en esas fechas, según sus propias declaraciones, ya colaboraba con los Zambada.
Para la SSP de Medina Mora, el historial profesional de Bayardo lo hizo candidato idóneo para desempeñar esas tareas. El ex agente federal fue subprocurador de Tlaxcala y fiscal de delitos graves en Guerreo; en dichos contratos declaró ser abogado por la Universidad Cristóbal Colón.
De manera inusual, uno de los contratos señala que los reportes confidenciales realizados por Bayardo serían entregados sólo a Norma Mayagoitia Padilla, entonces coordinadora administrativa del titular de la SSP, mismo puesto que ocupa hoy en la PGR. Los contratos fueron firmados por Rafael Ibarra Consejo, entonces oficial mayor de la dependencia federal.
Uno de los tres convenios que se hicieron públicos con la resolución del IFAI tuvo una vigencia de febrero a marzo de 2006, con una ampliación de abril a noviembre de ese mismo año. En los documentos se pactó un pago de 770 mil pesos. La relación laboral fue rescindida anticipadamente en agosto, después de las elecciones y antes del cambio de administración.
Auxilio comprometedor
En respuesta a una petición de los editores de este diario, la PGR, por medio de Sara Salas, directora adjunta de Comunicación Social, informó que “por el momento no habría ninguna posición de la dependencia” y que la situación de Bayardo y de los contratos “se explicará en su momento al responsable de haber dado a conocer los datos”, lo cual podría ocurrir este martes en el noticiario matutino Hoy por Hoy, de W radio.
Bayardo —quien según el diario Reforma no será acusado de ningún delito por la PGR y en cambio lo hizo testigo protegido— fue detenido el 23 de octubre pasado; tres días antes, agentes de la AFI y de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal catearon una casa de seguridad para detener a Jesús Zambada García, Jesús Zambada Reyes y Ricardo Flores Quintana, hermano, hijo e hijastro, respectivamente, de El Mayo Zambada.
Al tiempo que sus lugartenientes se batían a balazos, según la averiguación previa del caso, Jesús Zambada García, El Rey, hermano de El Mayo, hizo una llamada urgente a quien desde la policía llevaba años protegiéndolo: “Ven a salvarme”, le exigió el narcotraficante a Bayardo del Villar.
En octubre pasado, el ex consultor trabajaba como inspector de la PFP. Bayardo no llegó, pero la llamada lo hundió. El responsable de tenderle una trampa para que lo detuvieran en el Ministerio Público federal fue Víctor Gerardo Garay Cadena, entonces comisionado interino de la Policía Federal.
Junto con Bayardo, Garay Cadena entregó al MP a dos subalternos en la SSP federal: Fidel Hernández y Jorge Cruz Méndez, a quienes Bayardo hizo cómplices de los Zambada.
Dos días antes de la detención de los Zambada, el 18 de octubre, Garay había encabezado la detención de una céula de narcos colombianos en una lujosa casa del Desierto de los Leones. Ya capturado por la PGR y habiendo pactado su nuevo estatus de testigo protegido, Bayardo se convirtió en el informante que contó cómo, presuntamente, Garay había organizado una fiesta que incluyó abuso de las mujeres y robo en la narcomansión.
Bayardo también aceptó ser informante de la DEA. Es habitual y legal para esa agencia estadunidense pagar a delincuentes para obtener información.
Actualmente todos los funcionario acusados por Bayardo del Villar están bajo proceso, pero su denunciante, cómplice confeso del narco, informante de la DEA y ex consultor de Medina Mora, está, según reportes publicados, a punto de ser trasladado a Estados Unidos para compartir todo lo que sabe y tener una vida tranquila de testigo protegido.
Carlos Puig
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