Gustavo Iruegas : Descanse en Paz

MÉXICO, D.F., 22 de octubre (apro).- El embajador Gustavo Iruegas, diplomático con 38 años de carrera, falleció en La Habana, Cuba, donde se atendía de cáncer desde hace poco más de dos meses.

Nombrado secretario de "Relaciones Internacionales del gobierno legítimo" que encabeza Andrés Manuel López Obrador, Iruegas inició su carrera diplomática precisamente en La Habana, donde contrajo nupcias con una cubana.

En el servicio exterior, Iruegas sirvió también a México en Argentina, la Organización de Estados Americanos (OEA), Brasil, Nicaragua y El Salvador. Fue embajador en Jamaica, Noruega y Uruguay; y cónsul general en San Diego, California.

En Nicaragua, durante la dictadura de Anastasio Somoza, Iruegas abrió las puertas de la embajada a cientos de nicaragüenses que se refugiaron ahí ante el riesgo que corrían sus vidas por su disidencia.

Entre los personajes rescatados de la dictadura somocista están Rubén Aguilar, quien se desempeñó como corresponsal de la agencia Notimex y, paralelamente, como jefe de prensa del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Años más tarde, Aguilar fue vocero en el sexenio de Vicente Fox.

Iruegas fue reconocido por su papel como encargado de negocios de la embajada de México en El Salvador, desde donde se encargó de denunciar los crímenes de guerra que cometía el ejército salvadoreño, así como por dar asilo a revolucionarios, hasta que se emitió la Declaración Franco Mexicana, por la que se reconoció internacionalmente al Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN) como "fuerza combatiente".

Durante el gobierno de José López Portillo (1970-1976), gestionó un encuentro entre el presidente mexicano y Fidel Castro, en un yate en las costas de Cozumel.

A Iruegas se le atribuye la organización de la primera Cumbre Iberoamericana, celebrada en Guadalajara en 1990, a la que asistió Castro.

Como director general para América Latina, el embajador fallecido en Cuba, tomó el papel de anfitrión en las negociaciones de paz de El Salvador y Guatemala, que culminaron en México en 1992 y 1996, respectivamente; además de haber propiciado encuentros con el gobierno colombiano y las fuerzas guerrilleras de ese país, las FARC.

En la Secretaría de Relaciones Exteriores, Iruegas desempeñó varios cargos; el último como subsecretario para América Latina y el Caribe, durante el gobierno de Vicente Fox, cargo al que renunció en 2003, tras varios desencuentros con el entonces canciller Jorge Castañeda Gutman.

Dos años después de su dimisión, Gustavo Iruegas reveló en un artículo titulado, "La traición del güero", publicado en el diario La Jornada el 20 de octubre de 2005 --tiempo en el que Castañeda Gutman recorría el país en un intento por participar en la contienda presidencial de 2006" la manera como se fraguó un intento de rompimiento de relaciones con Cuba, y la deslealtad del excanciller hacia Fox.

"Fue alevosamente desleal al presidente Fox y cometió una felonía contra el Estado mexicano", afirmó Iruegas.

En el texto, el embajador detalló la manera en que se orquestó el diferendo con el presidente Fidel Castro que lo obligó a abandonar la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Financiamiento del Desarrollo, realizada en Monterrey, Nuevo León en 2002, y que hizo famosa la frase "Comes y te vas".

Después de este incidente, vendría el voto de México contra Cuba, el 19 de abril de ese mismo año, en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, y tres días después todo el mundo conocería la famosa frase dicha por Vicente Fox al presidente Castro, antes de la cumbre de Monterrey: "Comes y te vas".

La situación "mostró a un presidente de México azorado, turbado y achicado", señaló Iruegas en el texto.

Después del incidente cubano, Iruegas permaneció en el gabinete foxista hasta el 14 de abril de 2003, cuando presentó su renuncia ante el sucesor de Castañeda, Luis Ernesto Derbez, quien la aceptó sin problemas.

Se convirtió entonces un crítico de la política exterior del gobierno foxista, hasta que en 2005 empezó su acercamiento con Andrés Manuel López Obrador, tras otro desatino de Fox: el juicio del desafuero contra el entonces jefe de Gobierno del Distrito Federal.

Durante la campaña presidencial, a Iruegas se le vio en varias reuniones y foros que tuvo López Obrador con especialistas y académicos, durante el diseño de su proyecto de nación.

Luego del conflicto postelectoral, nombrado "presidente legítimo" por la primera Convención Nacional Democrática, el 16 de septiembre de 2006, López Obrador incluyó a Iruegas como parte de su "gabinete", con el cargo de "secretario de Relaciones Internacionales".

De acuerdo con la página del "gobierno legítimo", las funciones de Iruegas -quien tenía, como todos los secretarios, un sueldo de 50 mil pesos" eran "fomentar una relación de amistad y cooperación con Estados Unidos que permita continuar un fructífera sociedad sin lastimar la soberanía ni la dignidad nacional; desarrollar una política exterior orientada a promover la cooperación, la paz, la seguridad y la vigencia y progreso del derecho internacional; y reconstruir las relaciones fraternales de México con las naciones de América Latina y el Caribe" como tarea prioritaria.

Este miércoles, Andrés Manuel López Obrador pidió a sus seguidores que se concentraron en el Hemiciclo a Juárez para definir acciones en torno a la reforma de Pemex, un minuto de silencio por "un gran hombre": Gustavo Iruegas.