TOLUCA, Edomex. (apro).- Alfredo del Mazo se autoproclamó vencedor de la contienda en el Estado de México en medio de un festejo al más viejo estilo priista, con mariachis, comida y decenas de militantes que apenas ocuparon una cuarta parte del enorme auditorio de la sede estatal del partido.
Al dar su mensaje, Del Mazo agradeció a los suyos y sostuvo que salieron a la calle a defender y cuidar al PRI “y lograr un gran triunfo”.
Del Mazo dijo que triunfó pero en ningún momento dio números o cifras para sustentar la victoria.
Fue una jornada “ejemplar, libre y democrática”, calificó el priista y pidió a los partidos que participaron en la contienda trabajar por la entidad.
“Mi gobierno será de inclusión, de unidad, donde caben todos”, dijo.
Hizo un reconocimiento a las instituciones electorales y dijo que el resultado será respetado. Afirmó que hicieron un trabajo limpio.
Del Mazo señaló que su campaña fue de propuestas, de respeto y que no cayó en las provocaciones y que por eso los mexiquenses votaron por él.
El priista agradeció a toda la estructura del PRI, a los militantes y legisladores que trabajaron en su campaña.
Y a pesar de que se declaró triunfador, el festejo fue deslucido, casi de trámite. Un grupo de jóvenes vestidos de rojo dieron la bienvenida al aspirante priista. Una banda de música norteña animó la fiesta priista. En las bocinas el volumen ensordecedor rebotaba en el techo de lona cuando el candidato priista declaró su triunfo.
La maquinaria priista vestida de rojo aplaudió una victoria con el puño en lo alto y el grito de “¡sí se pudo!”.
Sin embargo, el anfiteatro estuvo a la mitad, vacío, y la música estridente de la cumbia lo hacía sentir más solo.
“¡Ánimo!”, gritaba una y otra vez el cantante de la banda norteña que se desgañitaba echándole porras a la gente reunida en el enorme patio. Pero su grito rebotaba en el eco de la soledad.
Habían pasado casi seis horas de que Alfredo del Mazo se había declarado ganador cuando cerraron las casillas, pero en la sede priista el ambiente era todo lo contrario al festejo.
“¡Ooe ooe ooe…el PRI!, ¡arriba ese ánimo, arriba el PRI señores, arriba el ánimo!”, gritaba el cantante tratando de animar a los priistas dispersados en grupos en el patio de cemento con gradas completamente vacías.
“Los priistas salimos a convencer para construir proyectos viables”, dijo al final Del Mazo haciendo un reconocimiento al PRI. “¡Es un orgullo ser parte de este, el gran partido de México!”, clamó.
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