Da a conocer el documento denominado Gobierno de Coalición Sexenios panistas, fuera de la crítica del sol azteca sobre el neoliberalismo

Alonso Urrutia

 

Periódico La Jornada
Lunes 26 de junio de 2017, p. 5

El documento Gobierno de Coalición 2018, que aprobó la dirigencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD) para impulsar un Frente Amplio Democrático (FAD), considera que a 35 años de instauradas, las políticas neoliberales se han agotado, se ha ampliado la concentración de la riqueza y profundizado la pobreza, por lo que llama a las fuerzas políticas sociales y políticas democráticas y progresistas a la unidad para superar la condición actual del país, donde el ‘‘Estado ha sido debilitado en extremo’’, y alcanzar un gobierno democrático de coalición.

Sin embargo, el documento sólo responsabiliza al Partido Revolucionario Institucional (PRI) de instrumentar esas políticas neoliberales, sin aludir a los gobiernos panistas, definiendo que en la actualidad hay tres ofertas electorales.
Una, impulsa el ‘‘extremismo y la polarización social y política del país’’; otra, la del PRI, ‘‘representa la continuidad, el status quo y defiende el modelo de desarrollo neoliberal y sus reformas estructurales’’. Y la tercera, plantea ‘‘la construcción de una nueva mayoría política y social que represente la pluralidad democrática de México’’.

Se enfatiza en la incorporación de sectores de la sociedad y partidos políticos en la construcción del FAD, el cual ‘‘podría evitar que se dé un resultado cerrado entre los candidatos presidenciales, lo cual generaría confrontación, lucha en tribunales y no habría estabilidad en el próximo gobierno’’.
Como propuesta de plataforma, el PRD busca que el FAD fortalezca al Estado para promover el crecimiento económico; replantear la reforma energética; aplicar políticas de cero tolerancia a corrupción e impunidad; consolidación del mercado interno; nuevas políticas sociales, industriales y agroalimentarias para revertir la pobreza; una estrategia de seguridad basada en mando coordinado, y garantizar el respeto a los derechos humanos.
Plantea mesas de diálogo para construir un programa común y diseñar un gobierno democrático de coalición, así como definir el método de selección del candidato estableciendo los mejores perfiles de aspirantes.