“Letalidad desproporcionada” de fuerzas armadas en México: ‘NYT’

"Las fuerzas armadas matan a sus enemigos porque no se puede confiar en el sistema judicial", asienta el diario.

Las fuerzas armadas mexicanas matan con una eficiencia abrumadora y apilan cuerpos a gran velocidad, publicó este jueves el diario estadounidense The New York Times.

“Las autoridades mexicanas dicen que sus soldados están mejor entrenados que los miembros de los carteles con los que se enfrentan. Pero los expertos que estudian el tema dicen que la tasa de muertos de las fuerzas armadas mexicanas no tiene comparación y que revela algo mucho más oscuro”, apuntó el medio.

Según datos revisados por NYT, el Ejército mexicano mata a ocho enemigos por cada uno que hiere.

En tanto, la Marina mata a 30 combatientes por cada uno que hiere.

Ante este escenario, el diario apuntó que “durante la última década, a medida que los marinos y soldados mexicanos han sido enviados a la línea de combate, las violaciones a los derechos humanos se han disparado”. 

Sin embargo, de las 4000 denuncias por tortura revisadas por la Procuraduría General de la República (PGR) desde 2006, sólo 15 han terminado con una condena.

El medio recordó que de acuerdo con Juan E. Méndez, relator especial de Naciones Unidas, “la tortura no solo es generalizada, sino que está rodeada por la impunidad. Si el gobierno sabe que es frecuente y no se presentan cargos o aquellos que llegan a juicio no van a ningún sitio, la culpa es del Estado”.

Y dio más datos: el Ejército ha matado a alrededor de 3000 personas entre 2007 y 2012. En ese periodo han muerto 158 soldados. Hay quienes creen que esa cifra de muertos es puro pragmatismo. En México, sentencia, las fuerzas armadas matan a sus enemigos porque no se puede confiar en el sistema judicial.
Señala que aunque las denuncias por tortura contra las fuerzas armadas han disminuido desde 2011 —fecha en la que se redujo de manera importante el despliegue de tropas en el país— la letalidad de los encuentros no ha disminuido según los datos hechos públicos a principios de 2014.

Expuso algunos episodios como un enfrentamiento en Tlatlaya, donde militares mataron a 22 personas en junio de 2014. Así como el caso de una mujer de Guerrero que fue torturada y videograbada. Otro caso es el del 29 de diciembre de 2009, cuando tres personas desaparecieron en el estado de Chihuahua y nunca se volvió a saber de ellas, por lo que se busca responsabilizar al Ejército. En tanto, en Baja California se recolectaron más de 90 ejemplos de lo que consideran tortura realizada por el Ejército mexicano desde 2006 a 2013. (Ver nota en NYT)