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De septiembre 2014 al mismo mes de
2015, el avión Presidente Juárez surcó los aires con Enrique Peña Nieto y su
gran comitiva decenas de veces dentro y fuera del país. Cada viaje era una
ostentosa bacanal; la aeronave se convirtió en una “Casa Blanca flotante”,
según la calificó la senadora Layda Sansores, del Partido del Trabajo.
Variopinto obtuvo, vía la Ley de Transparencia, copias de facturas que
documentan los exorbitantes gastos en esa ave metálica que voló en tiempos de
turbulencia financiera.
Agonizaba 2015 cuando el avión Presidente Juárez fue jubilado después de
prestar sus servicios a cinco mandatarios de manera ininterrumpida. La aeronave
simplemente se hizo obsoleta después de 26 años. Atrás quedaron las
remembranzas y bacanales organizadas por el presidente Miguel de la Madrid
Hurtado y sus sucesores para congraciarse con sus colaboradores e invitados
durante sus giras de trabajo.
El último mandatario que lo usó fue
Enrique Peña Nieto, durante su primeros tres años de gestión. En ese breve periodo,
la aeronave fue receptáculo de convivios y francachelas en viajes nacionales e
internacionales, donde los vinos de marca y los alimentos preparados por chefs
del Estado Mayor Presidencial satisfacían las exigencias de las decenas de
comensales allegados al círculo del presidente: jaibas rellenas al gratín,
ceviche colimense, pulpo a las brasas, lomo de salmón en salsa de mango,
camarones al coco, roast beef en
su jugo y otros alimentos costosos y exóticos, acompañados con onerosas bebidas
y exquisitos postres.
El despilfarro era la constante en un país donde la austeridad no define
precisamente a la clase política. A diferencia del Uruguay de José Mujica,
quien usaba un Cessna 414 para sólo seis personas cuando era presidente, Peña
Nieto y su séquito se dieron —y continúan— una vida de jeques mientras los
mexicanos deben ajustarse el cinturón ante las turbulencias económicas.
Entre 2014 y 2015 erogó 7 millones
116 mil 669 de pesos, según el expediente 0210000133415 obtenido por Variopinto por medio de la Ley de Transparencia.
Consultado al respecto, el subteniente Horacio Hernández García comentó que se
compraban alimentos “para complementar el menú” del avión, pues en promedio se
alimentaban a 79 personas.
La senadora petista Layda Sansores San Román, hija de Carlos Sansores
Pérez, un viejo cacique priista de Campeche, comenta al reportero que esos
gastos muestran que Peña Nieto “vive como jeque árabe”, mientras aplica
“ajustes preventivos al gasto público” y condena a la población a cerrarse el
cinturón. “Eso es un insulto para México, dice, sobre todo cuando se está
hablando de austeridad”.
De austeros recuerdos
Cuando Luis Echeverría despachaba en Los Pinos, recorría el país y
viajaba al extranjero con irrefrenable celo. Una vez visitó Campeche y decidió
invitar a su correligionario Carlos Sansores y a su familia a la Ciudad de
México en el avión presidencial Miguel Hidalgo, un jet Hawker Siddeley HS 125,
apodado Topo Gigio, en alusión al pequeño ratón, donde sólo cabían ocho
personas. No había nada especial, ni manjares del otro mundo ni lujos, recuerda
Layda, quien acompañó a su padre en aquella ocasión.
Curiosamente, es en las giras locales donde los gastos son más
escandalosos, según las 69 facturas consultadas en las que se erogaron 4
millones 314 mil 956 de pesos sólo en 2014-2015. En el primer año el Ejecutivo
gastó 973 mil 494 de pesos, mientras que en el segundo fueron 3 millones 341
mil 462. Los itinerarios comprendieron a 17 entidades: Colima, Chihuahua, San
Luis Potosí, Tabasco, Veracruz, Guerrero, Chiapas, Nuevo León, Baja California,
Guanajuato, Sinaloa, Zacatecas, Veracruz, Michoacán, Durango, Guadalajara y
Quintana Roo. El promedio de consumo fue superior a los 50 mil pesos y la
cuenta más alta fue de 133 mil 50 pesos en Kukulkán, Quintana Roo.
Fue en Veracruz donde se registraron los mayores gastos: 763 mil 689
pesos; seguido por Quintana Roo, con 577 mil 605; Jalisco con 458 mil 419, y
Nuevo León, con 374 mil 706. Los restaurantes predilectos, según los documentos
consultados, fueron la Auténtica fonda de mariscos y el Restaurante Villa Rica
(Veracruz), Al Pan Pan SA de CV (Quintana Roo), Sagrantino Gusto Di Vino
(Guadalajara) y Productora del Norte Garza García (Nuevo León). En dos de las
facturas aparece el nombre de Bernardo Augusto Leautaud Martínez, nieto de Juan
Leautaud, un empresario duranguense fallecido en 2007, quien pagó 165 mil 509
pesos. En su cuenta de Facebook aparece la página de comida llamada
Gaucho-Marea, donde se especializan en sabores de “mar y tierra”. “Le gustan los
mariscos, le gustan… Peña Nieto es exquisito. Así se comporta y nos lo
está demostrando”, comenta la senadora Sansores San Román.
En los viajes internacionales se expidieron 10 facturas por un total de
2 millones 951 mil 223 pesos, incluido el viaje a Francia de julio de 2015. El
itinerario incluyó una escala técnica en Gander, Canadá. El elevado costo se
debió a la contratación de servicios privados para atención en la preparación
de menú y otros rubros.
La empresa Private Catering, por ejemplo, señala en su página que
“garantiza los más altos estándares de seguridad alimentaria y los controles de
seguridad del aeropuerto”. El cobro que le hizo a Presidencia fue de 44 mil 535
euros solamente en un día y fue facturado en territorio francés el 15 de julio
del año pasado. El valor del euro en aquel momento era de 17.54 pesos, de
acuerdo con el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Respecto a los menús, el oficio confirma que dos personas se encargan de
“preparar desayunos, comidas y cenas durante los viajes del presidente de la
República en el avión presidencial […] durante las giras de trabajo que realiza
el titular del Ejecutivo federal”. Sus sueldos corresponden a las claves
salariales NA1 y OA1, cuyos puestos son “subdirector de área” y “jefe de
departamento”. El primero percibe 20 mil 315 pesos; el segundo 14 mil 51.
Variopinto solicitó una
entrevista con los asesores del presidente Peña Nieto que estuvieron a cargo de
los gastos de alimentación en los vuelos del avión Presidente Juárez. Al
cierre de esta edición no hubo respuesta.
De paladares exigentes
Durante el periodo septiembre 2014 al
mismo mes de 2015, según las 185 fojas consultadas por Variopinto, los convites del presidente Peña Nieto y
sus colaboradores incluyeron 904 botellas de vodka, tequila, ron, vino tinto y
blanco, ginebra, rompope, sangrita Jimador, anís, amaretto y crema Baileys. Por
cada vuelo se subieron 19 botellas. En 2014 fueron 261; el año pasado, 643.
En cuanto a los alimentos más
consumidos aparecen: empanadas de jaiba; cocteles de camarón; jaibas rellenas
al gratín; cocteles, salpicón y ensaladas de mariscos; ceviche colimense;
carpaccio y montaditos de atún; manitas y tarta de cangrejo al chipotle; rib eye asado a la parrilla; new york a la parrilla; pulpo a las brasas;
camarones y pulpo a la diabla; lomo de salmón de mango, a las brasas y al
chimichurri.
También hubo lomo de huachinango a
las brasas; lomo de róbalo en salsa de eneldo, a las brasas, sarandeado y a la
mantequilla; camarones al coco; filete de res a la parrilla; camarones
enchipotlados y rellenos de queso; roast beef en
su jugo; rack de ternera braceado; filete de res a la
mostaza; lomo de bacalao a la parrilla; bife de pescado al cilantro y lomo de sea bass chileno. En la comida internacional lo
más destacado fue el risotto al fungui, el beef rosini filet, roast beef, el omelette con salmón ahumado y las patas de
cangrejo.
Entre los “platillos ligeros”, los documentos registran las tortas de
milanesa de res, pollo empanizado y jamón de pavo, así como sándwiches
surtidos, platos con quesos y canasta con frutas. En los “complementos”:
vegetales mixtos al vapor; puré de plátano y papa; arroz con mariscos, blanco,
con elote, rojo y al coco; y espinacas a la crema. Al final, los postres:
crepas con cajeta, pastelería surtida, ate con queso y plátanos flameados.
Ahora que el avión Presidente Juárez
se jubiló, el amplio menú también se contraerá debido a los ajustes preventivos
anunciados por las Secretarías de Hacienda y Crédito Público y la de la Función
Pública el 22 de febrero en el DOF: sólo dos funcionarios por cada institución
podrán viajar a eventos internacionales y los desembolsos serán “competitivos o
de mercado”. Para las giras internacionales, por ejemplo, el presupuesto será
de sólo 450 dólares o euros por día. En el caso de los viajes nacionales, el
mando más alto tendrá derecho a gastar 2 mil 850 pesos; los intermedios, mil
700, y el personal operativo sólo 980. Y cuando no se necesite hospedaje, el
monto se reducirá. Lo anterior se dio tras una publicación de la agencia
Reuters donde se denunció a una de las funcionarias de la Secretaría de la
Función Pública por consumir caviar, salmón y champagne en el
marco de una visita de trabajo a Londres, Inglaterra.
Dispendio presidencial
A finales de enero pasado, Gloria Calzada, la conductora de las “Netas
divinas”, un programa televisivo que se transmite por Unicable, se llevó una
sorpresa. En un vuelo comercial compartió asiento con el “comediante
conservador” Jimmy Morales, quien en octubre pasado ganó las elecciones
presidenciales en Guatemala. Calzada aprovechó para tomarse una foto con el
mandatario. La imagen dio la vuelta al mundo.
“Volé de Guatemala a San Salvador y vi mucho alboroto en la sala del
aeropuerto, y es que en el vuelo venía el nuevo presidente de Guatemala
@jimmymoralesgt. Se tomó foto con todo el avión (incluida yo). Debo mencionar
que no venía en Clase Ejecutiva. ¿Qué tal?”, escribió Calzada en su cuenta de
Twitter. Peña Nieto es diferente. Él necesita un avión para él y 79 personas,
según la documentación consultada.
La senadora Sansores San Román se queja del dispendio. Peña Nieto, dice,
“quiere tener los lujos para él, su familia, sus cuates y sus dizque asesores
—dudo que lo asesoren—. Las cosas van tan mal que siempre me pregunto: ¿Tendrá
asesores Peña Nieto? Ellos son invisibles o no los oye. Eso sí, pide que los
incluyan en el avión presidencial. Sin embargo, no da sus nombres ni por qué
los invita”.
Ante el cuestionamiento del nuevo avión presidencial Boeing 787-8,
bautizado como José María Morelos y Pavón, cuyo costo fue de 218.7 millones de
dólares, la senadora Sansores declaró: “Hoy más que nunca debiera ser muy
transparente: ¿cuánto nos cuesta? No sé cuánto se echaron de turbosina para
darle vueltecitas para asegurar que el avión funcionara. Son miles de millones
de pesos que se van a tener que seguir invirtiendo mientras a los trabajadores
de Pemex los despiden en grupo”.
¿Con cuánto presupuesto debería
viajar el Presidente de la República? —le pregunta el reportero de Variopinto a Sansores San Román.
“Mira, yo lo pondría a viajar en avión comercial. Eso sería muy
motivador para el ciudadano. Donde las cosas están tan duras que el presidente
ponga el ejemplo. Ya no hay dinero para aviones privados, me voy en avión de
línea. ¡Eso lo hacía (José Mujica cuando fue) el presidente de Uruguay! ¡Ah!,
pero no, no, no. El Estado Mayor Presidencial, el séquito, todas estas reformas
que se hicieron al avión. ¡Que Peña Nieto no le eche la culpa a Calderón!
“Todavía no pagamos el Boeing 787-8 y tenemos que costear sus lujos, sus
camarones y sus langostas al señorito para que vaya bien nutrido en la que yo
llamo la Casa Blanca flotante”.
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