Los paralelismos que podemos encontrar en la historia son muy interesantes. El caso de Enrique Peña Nieto es bastante similar al de Luis XVI, quien también tuvo un matrimonio que, como el del presidente de México, le generó problemas.
La pareja real francesa del Siglo XVIII fue repudiada por la sociedad; un enlace amoroso que era una estrategia de poder para Francia, terminó siendo la perdición de la monarquía. Pese a que el matrimonio presidencial mexicano fue diseñado para ser popular, irregularidades en las bodas de Angélica Rivera, han causado cierto resquemor social, sumado esto a la clara lejanía que existe entre Peña y Rivera. Como en la revolución francesa, iglesia y poder en México se miran en aprietos por la caída de un matrimonio.
Este fin de semana, a días de la visita del Papa Francisco I a nuestro país, se publicaron investigaciones de la revista Proceso y Aristegui Noticias, que desnudan anomalías en el proceso matrimonial religioso de Peña Nieto y Angélica Rivera, lo que involucra al Cardenal Norberto Rivera e incluso a instancias del Vaticano.
En 1770, la boda entre Luis Capeto y María Antonieta, desaprobada por la sociedad civil, no solamente significó una alianza entre Austria y Francia, sino también, el inicio de la Revolución Francesa.
Aquellos años la sociedad de Francia experimentó cambios económicos, políticos y sociales: los agentes más importantes para estos fenómenos, fueron las ideas de la Ilustración de Jean-Jacques Russeau, el Barón de Montesquieu, Voltaitre, entre otros; la ilegitimidad del Rey, y muy importante, las reformas que éste realizó en materia económica para legitimarse.
Luis XVI fue un Rey muy joven, que debió tomar las riendas de su país a los 20 años de edad. Era un adolecente temeroso del gran puesto que heredó. Llega al trono luego de que su abuelo, un Rey poco popular por haber perdido una guerra de 7 años contra Inglaterra, muere.
Entre 1774, inicio de su reinado, hasta 1789, asesorado por el financiero y político Jacques Necker, realiza en Francia reformas económicas que terminan en el empobrecimiento del sector campesino y el encarecimiento de las harinas, lo que provoca una subida en los precios del pan, alimento básico en el país europeo… Ahí comienzan los levantamientos contra él. Muere en la guillotina en 1793.
Si en el presente hay una figura que no ha logrado legitimarse por medio de sus reformas realizadas en materia de educación, trabajo, finanzas, energía, telecomunicaciones, etcétera, es Peña Nieto, que como se muestra, comparte mucho con el viejo Rey derrocado. Pese al evidente fracaso, el presidente sigue afirmando que sus reformas serán la cura para los millones de problemas que no entiende, o no conoce, de la sociedad que gobierna.
Las tramas que se tejen en México son muy atractivas para una sociedad acostumbrada al espectáculo; sin embargo, el caso de las bodas “falsas” de Angélica Rivera es muy serio para un pueblo que vive engañado bajo la simulación de un sistema que se preserva con la mentira. Este episodio que involucra autoridades de muchos niveles, habla de lo lejos que puede llegar la clase política con tal de legitimar su poder; el problema es cuando la política, en forma de reformas, falla, y el teatro del amor, se cae.
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