Imagen / captura de video YoutubeComo un nubarrón que persigue sin cesar al gobierno federal, las redes sociales parecen ser la piedrita en el zapato que una y otra vez ponen en jaque las acciones de una administración que cada vez que quiere tomar el control le salta algo como para decir “éramos muchos y parió la abuela”.
Cuando no es una ‘Lady Profeco’ es una ‘Princesa de la Banda’ que pone en evidencia los excesos de un estilo de vida por parte de una persona vinculada directamente con uno de los líderes del crimen organizado por quien incluso se ofrece una recompensa en millones de pesos, como diciendo, aquí hemos estado siempre, lo que pasa es que nadie nos había querido ver.
El revuelo que esta semana causó Melissa Plancarte, cantante grupera e hija de Enrique Plancarte , líder de los Caballeros Templarios, va más allá de un simple parentesco y su exhibición en internet , pues después de todo, hasta el momento no está tipificado como delito la posesión de pariente incómodo.
El trasfondo de este asunto se enmarca en el hecho de que por lo visto, una vez más, las actividades de estos personajes polémicos jamás fueron un secreto y por el contrario, se llevaban a cabo con el pleno conocimiento de las autoridades que toleraron todo hasta que se salió de control, pues tanto esta ‘Princesa de la Banda’, como su hermano, ‘El Kike’, participaron en eventos auspiciados y patrocinados por el mismo gobierno estatal, tal como sucedió en la ExpoFeria Michoacán 2012, llevada a cabo ya con Fausto Vallejo de gobernador.
Peor aún, los videos musicales tan característicos de este género, ponen en evidencia que al menos Melissa Plancarte se movía como pez en el agua en edificios a cargo de la administración estatal para grabar encuentros románticos ficticios en el lugar que más irónico: el ex Palacio de Justicia del estado, el mismo sitio donde el gobernador priista recibió su constancia de mayoría.
Esto por supuesto tiene a todos los que pudieran considerarse responsables aventándose la bolita, pues nadie sabe, nadie supo quién dio la autorización para la grabación de dicho video clip (de hecho dicen que ni siquiera es posible rentarlos, al menos legalmente) en donde la chica sale acompañada de un actor llamado Julio Camejo, conocido por su participación en varias producciones de Televisa.
Melissa Plancarte nunca se escondió y hasta entrevistas dio en el pasado, a través de las cuales se sabe nació en Estados Unidos y radica en California, aunque su origen es michoacano. Ante la vorágine que se la ha venido encima ella misma se deslindó de las actividades de las que es acusado su padre.
En efecto, nadie la puede acusar directamente a ella de alguna actividad ilícita, pero cada fotografía o archivo de video que va saliendo a la luz con ella como protagonista da cuenta de hasta dónde llegan las redes de convivencia entre grupos que ahora son perseguidos y autoridades, como es el uso de un edificio público que se supone nadie tiene posibilidad de rentar.
Todo esto es evidencia que cae como cachetada para un gobierno cuya estrategia ha sido nombrar ahora a un comisionado con súper poderes (literalmente) como es Alfredo Castillo y que por ende todo lo que pase en esa entidad relacionado con el crimen organizado ya es su responsabilidad. de él y del gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto.
Son bofetadas porque nos dice que tanto los gobiernos anteriores como los actuales saben quiénes son, cómo son, qué hacen y peor aún, dónde están los involucrados, pero al parecer no se les ha querido tocar, al menos, con el pétalo de una investigación donde bastaría echarse un clavado y zambullida en las redes sociales. Y no solo en este caso.
Foto: Cuartoscuro¿Y ahora quién podrá ayudarnos?Cuando a un secretario de Estado le birlan un reloj en una plaza comercial es motivo para preocuparse. Si a alguien como Alfonso Navarrete Prida, titular de la secretaría del Trabajo, pueden asaltarlo aún cuando se supone que siempre lleva a cuestas al Estado Mayor Presidencial, entonces uno ya no puede esperar nada bueno. Lo curioso es que pasó en la ciudad del gran 'big brother', donde las cámaras de seguridad colocadas cada 5 centímetros parecen funcionar más para la grabación de videos virales que para salvarguardar la seguridad. Uno ya no puede andar por ahí tan campante en la capital del país porque cuando no es atracado entre tiendas de mucho caché lo es en medio del tráfico nuestro de todos los días. Mientras tanto, parece que las investigaciones se dirigen hacia el verdadero responsable: un condenado socavón que sospechosamente apareció de la nada.
Imagen tomada de TwitterLa culpa la tiene el mundoAhora que el 'preciso' anda por Davos, Suiza presumiendo que solo él y nada más que él puso de acuerdo a las fuerzas políticas para firmar el Pacto por México y sacar adelante un montón de reformas que provocarán el milagro mexicano, sacó de los recónditos archivos de la memoria aquella frase maternal que respondía a las múltiples justificaciones por las que no hacíamos las cosas. Al menos a un servidor, cada vez que sacaba una mala calificación y se me ocurría salir con un “pero los demás sacaron lo mismo”, la autora de mis días solía responderme: “a mí los demás no me importan, me importas tú” y párale de contar. Esto porque ante la pregunta al presidente en pleno foro de poderosos de la lana sobre la violencia en México, salió con eso “no es privativo de México, es privativo de la región de América Latina”. Y pues él no es presidente de América Latina.
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