México, DF. El secretario general del Partido de la Revolución Democrática, Alejandro Sánchez Camacho, consideró que el decreto presidencial por el que se modificaron términos de la reforma fiscal representa un “avasallamiento” del Poder Ejecutivo al Congreso de la Unión en aras de conferir beneficios a la iniciativa privada. Aseguró que esta práctica no refleja más que el ejercicio de una presidencia autoritaria que ha retornado con el regreso del PRI al poder.
En rueda de prensa, Sánchez Caámacho también subrayó que el desenlace final que tuvieron las discusiones en torno a la reforma energética sentenciaron la desaparición del Pacto por México, un esquema de negociación “en la clandestinidad” que igualmente hizo a un lado el papel del Congreso en el diseño de las reformas legales.
Sin embargo, al ser cuestionado sobre el alza al Metro, el dirigente perredista se limitó a comentar que esta era una decisión del gobierno de la ciudad, que el partido respetaba pues estaba dentro de las valoraciones que el jefe de gobierno, Miguel Angel Mancera, hizo sobre las necesidades financieras de este sistema de transporte colectivo.
En otro orden de ideas, al referirse a la dinámica interna y a la inminente renovación de la dirigencia nacional perredista, confió en que Cuauhtémoc Cárdenas finalmente acepte la postulación a la presidencia del partido, porque ello generaría un amplio consenso entre la bases perredistas.
Sin embargo, reconoció que en su caso, el relevo en el sol azteca podría no darse en los plazos legales vigentes (marzo), toda vez que las reformas estatutarias aprobadas en noviembre, aún deben ser validadas por el Instituto Federal Electoral, lapso al cual deberán sumarse otras disposiciones internas que podrían llevar la elección del nuevo presidente, hasta mediados del 2014.
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