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| Caladerón, donde más agusto se siente : en el lodo. |
El Presidente recorrió zonas afectadas en Chiapas, donde aseguró que la forma en la que se hizo el reparto de tierras 'amarra' a las personas a sus parcelas y no las deja ir a vivir a zonas con servicios
El presidente Felipe Calderón consideró que la dispersión es la causa de la pobreza, debido a la forma como se hizo el reparto de las tierras que "amarró" a las personas a sus parcelas sin posibilidad de ir a vivir a zonas con servicios públicos.
El mandatario acudió a esta comunidad donde la madrugada del 29 de septiembre se desgajó una montaña que mató a 16 habitantes y dejó heridos a 13 más.
Se reunió a puerta cerrada en la Escuela Primaria Bilingüe Las 3 Garantías.
Antes, trepó un centenar de metros, donde el lodo sepultó casas y gente, para sembrar cedros y limones. "No traes zapatos, amor", dijo a su esposa Margarita Zavala, al notar que subía la cuesta con calzado frágil.
"Cómo le vamos a hacer para la bajada", dijo Calderón al voltear hacia el pie del cerro, con lodo viscoso. Un general incluso se inundó hasta las rodillas al no percatarse de lo profundo y acuoso de la tierra.
Aquí es la comunidad de Reforma y Planada. La lluvia es de las que arrasa con todo cada 10 años, dice un vecino de 69 años. Esa noche sólo escuchó un estruendo "como de un carro grande. Pero no, era el cerro que se caía", recuerda.
Antes de pasar a una reunión de evaluación en el auditorio municipal, Calderón y el gobernador Juan Sabines saludaron a los pobladores.
- Es más fácil que se muevan a Amatán. Ahí les dan terreno, casa. Mientras estén allá cómo le hacen para bajar, le comentó Calderón a un par de vecinos de comunidades cercanas.
- Estamos como dentro de un tambo: no podemos salir ni pa'llá ni pa'cá, replicó María Elena Gómez Gómez, viuda y con dos hijos pequeños, vecina de una comunidad llamada Guadalupe Victoria.
- Vénganse pa'cá, insistió el Presidente.
- Lo que pasa es que somos ejido y el ejido tiene que estar cultivando sus tierras. No podemos salirnos a otro lado, terció Jacobo Domínguez Gómez.
- Nomás a la hora de la siembra se van y se regresan, insistió Calderón, tratando de convencerlos.
- Pero para eso se necesita el camino, respondió.
- No podemos salir, señor, estamos encerrados, acotó ella.
- Vénganse a Amatán, recalcó Calderón.
- Señor, si usted viera la queja de esta señito, es nuestra vecina, están los caminos hechos pedazos, derrumbados. Cómo salimos a comprar. Somos cafeticultores, cómo sacamos el producto del ejido San Antonio, explicó el hombre.
El Presidente, se dio cuenta que no los convencería ahí de dejar sus pueblos para ir a comunidades más grandes como Amatán, con escuela y hospitales.
- Piensen ustedes qué tanta gente se mueve a Amatán, insistió Calderón.
"La causa de la pobreza en México es la dispersión. A la hora que viene el reparto, qué bueno que le dieron la tierra a la gente, a todos, pero mandaron a la gente casi casi a amarrarse a su parcela", explicó el Presidente a la mujer y al hombre con quienes dialogaba.
Sabines tomó el brazo de la mujer y le prometió: "El jueves nos vemos con el presidente municipal en la cabecera y ahí vamos a platicar bien de cómo va a ser la propuesta de reubicación. Toda la gente que esté en riesgo no la vamos a dejar en riesgo, que no corra riesgos, ¿le parece bien?".
Luego, en la reunión de evaluación se confirmó el deceso en todo Chiapas, a causa de las lluvias, de 27 personas y tres desaparecidos.
Además, son 64 municipios afectados de 118 en ese estado.
Aquí evacuaron a 2 mil personas y distribuyeron 8 mil 500 despensas.
sma / vsg
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