La petición suma más de 254 mil firmas
México.- A través de la plataforma change.org, miles de personas firmaron virtualmente para solicitar quitarle la concesión a TV Azteca, luego de que el conductor Javier Alatorre llamó a la desobediencia civil durante la contingencia del Covid-19.
Hasta la mañana de este 19 de abril, la petición ha sido firmada por más de 254 mil personas.
La petición señala que el dueños de la televisora, Ricardo Salinas Pliego, se aprovechó de los datos “tergiversados y mal entendidos” que proporcionan algunos gobernantes para anteponer sus intereses.
La petición fue propuesta por una persona que se identifica como Antonio Valverde y va dirigida a la Secretaría de Gobernación (Segob), a su titular Olga Sánchez Cordero, a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Salinas Pliego es el segundo hombre más rico de México, después de Carlos Slim. Su fortuna está valuada en 11 mil 700 millones de dólares, de acuerdo con la Lista Forbes 2020.
Alatorre llama a desobedecer; se “equivocó mi amigo”, dice AMLO
Durante la transmisión del programa “Hechos” el 17 de abril, el conductor aseguró que el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, miente en las conferencias diarias de las 19 horas, por lo que llamó a la población a no hacerle caso.
López Obrador difundió un video en el que dijo que Alatorre, su “amigo”, se “equivocó” porque no estuvo bien su llamado, sin mencionar a la televisora ni a Salinas Pliego, quien ha ganado varios contratos con el gobierno y es asesor empresarial del gobierno federal.
Al siguiente día, el epidemiólogo dijo que el trabajo que está haciendo la Secretaría de Salud federal es de muchos especialistas y expertos de instituciones y gobiernos federales, además, dijo que debido a la incertidumbre hay personas que están perdiendo la serenidad y pormiedo están actuando con agresividad.
La Segob emitió un apercibimiento -o advertir que será sancionado si vuelve a cometer dicha acción- a TV Azteca por perturbar el orden público al ir en contra de las medidas emitidas por el Consejo de Salubridad General.