Enrique Méndez y Roberto Garduño
Periódico La Jornada
Viernes 24 de octubre de 2014, p. 3
Viernes 24 de octubre de 2014, p. 3
La noche del miércoles, Ángel Aguirre se convenció de solicitar licencia al cargo de gobernador de Guerrero cuando Carlos Navarrete le puso sobre la mesa un expediente elaborado por el gobierno federal en su contra:
Ángel, te puede salir más caro; aquí te tiene el gobierno esto, y extendió el legajo. La reacción del mandatario fue solicitar al PRD que negociara su inmunidad y la de su secretario de finanzas, Jorge Salgado, ante la administración central.
Información proporcionada a este diario por diputados federales perredistas cercanos a Aguirre, reveló también que después de que se acordó solicitar licencia, éste maniobró en el Congreso local para tratar de ganar votos de los diputados locales en favor de su delfín a sucederlo, Sofío Ramírez.
Tal pretensión derivó en el impulso, por la corriente Nueva Izquierda (los Chuchos), de Beatriz Mojica Morgan como candidata al gobierno. Desde su inicio en la política como secretaria particular de Erick Villanueva Mukul hasta su vertiginoso ascenso en posiciones en el PRD, siempre permaneció al abrigo del grupo encabezado por Jesús Ortega Martínez, Jesús Zambrano, Carlos Navarrete y Guadalupe Acosta Naranjo.
No obstante que el Congreso estatal debía reunirse para recibir la solicitud de licencia de Aguirre y votarla, la rebatiña por la gubernatura vacante continuaba ayer. El senador Sofío Ramírez no cedía en su aspiración, y en ese tenor David Jiménez Romo también mantenía un interés desbordado por ganar el favor del Congreso.
Los dados estaban marcados desde el interés de los Chuchos y favorecían a Mojica Morgan. Y a esto se sumó ayer el
encarecimientode los votos de PRI, PVEM y Movimiento Ciudadano (MC) en el Congreso estatal, la determinación de quién sería el sucesor de Ángel Aguirre se trasladó al Distrito Federal para ser negociada con las cúpulas de los partidos.
Esa especie de vendimia política, donde se disputan los despojos de la administración de Aguirre, tuvo su cenit cuando el gobernador ofreció al acalde de Acapulco, Luis Walton (MC) que aceptara ser el sustituto. Walton se vio animado e ilusionado por la propuesta, pero desde la ciudad de México su dirigencia nacional le recomendó no involucrarse.
Así, de la reunión del presidente del PRD, Carlos Navarrete, y Ángel Aguirre salió el acuerdo y la negociación para que se concretara la licencia del gobernador y se garantizara, de antemano, la imnunidad del nacido en Ometepec y su secretario de finanzas.
(Con información de Alma Muñoz)