Alvaro Cepeda Neri
En un ejercicio de democratización para elegir candidato a la Presidencia entre el corderito de Calderón, el demasiado visto e insípido cara de gachupín y foxista Santiago Creel y, Josefina Vázquez Mota, los panistas independientes, es decir: los ciudadanos militantes y los llamados “adherentes” o simpatizantes, que no son tontos ni manipulables y ejerciendo su independencia y criterio, decidieron con su voto el triunfo de esta última. El día de la foto, después de que le notificaron que estaba fuera, la cara de Cordero era de un tipo enfurecido y quién sabe cuántas maldiciones y mentadas cruzaban por su mente de chorlito contra su adversaria que le ganó de calle. Éste, además, estaba apestado por Calderón, por si algo le faltara para perder de todas… todas.
Si los consejeros de Acción Nacional hubieran designado al candidato presidencial, Calderón habría impuesto a Cordero, el cómico con cara de “Mr. Bean” (en el filme: El hombre del desastre). Pero, y el pero tiene la clave, fue una elección interna y los panistas decepcionados de Calderón que no ha dado una en todo el sexenio eligieron a la Vázquez Mota. De nada sirvió que varios desgobernadores panistas (entre ellos Padrés, el de Sonora; el presidente municipal de Monterrey, ejemplo de la corrupción: Larrazábal Bretón, etc.), ordenaran votar por Cordero… ¡o los cesaba de sus cargos! Pero, votaron contra Calderón al elegir a doña Josefina.
Y es que los afiliados y simpatizantes (ignoro si fueron primero a misa y luego a sufragar, como se los pidió la Vázquez Mota), a los que todos dieron sobornos, comidas, despensas, etc., al viejo estilo electorero (igual que el PRI y el PRD), le dieron la espalda a Calderón con su favorito. Esto demuestra que hasta la derecha política está en desacuerdo con él. Creyó Calderón que eran manipulables y tontos, y que se dejarían llevar por sus órdenes de elegir al pobrecito de Cordero. Éste acabó poniéndose la soga al cuello cuando en sus presentaciones, alababa al calderonismo. Soga que los electores blanquiazules jalaron para ahorcarlo en las urnas.
Calderón, pues, fue derrotado en Michoacán, donde dice que nació y creció, cuando intentó ser gobernador; después en cada elección en esa entidad; hace poco su hermana fue sacada de la competencia electoral (y eso que repartió tarjetas de crédito y sobornos, que ella y su hermano le censuraron al PRI). Ahora, los panistas repudiaron a su favorito y prefirieron a Vázquez Mota quien le salió respondona y esto le valió la victoria arrasadora de los que fueron a votar. Esto quiere decir, que hasta los panistas tradicionales, muy posiblemente no sufragarán por el PAN el primer domingo de julio próximo. Esto favorece al PRD y al PRI, con todo y que doña Chepina se supone en la final contra el copetes Peña. Subestimó Calderón a los panistas que fueron a las urnas, creyendo que eran manipulables y tontos… pero éstos le demostraron a Calderón que lo desprecian, están en contra de todo lo que diga, haga y proponga… y que el tonto fue él y el manipulable Cordero.
cepedaneri@prodigy.net.mx
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